Danae Salinas Islas
jul 2914 min.
Actualizado: jul 30
En 2008, Jamie Kern Lima fundó IT Cosmetics en su sala de estar para crear maquillaje para mujeres con problemas en la piel. Con recursos limitados, utilizó las redes sociales para conectarse con su público objetivo. Al mostrar el poder transformador de sus productos y compartir su lucha contra la rosácea, Jamie construyó una comunidad leal de “IT Girls”. Este movimiento en las redes sociales llevó a IT Cosmetics a convertirse en una marca multimillonaria que fue adquirida por L'Oréal en 2016.
La historia de Jamie es un ejemplo de cómo una buena estrategia en redes sociales puede impulsar tu negocio. No es solo el producto; es compartir tu historia, establecer relaciones y crear contenido con el que tu público pueda identificarse a nivel personal.
En esta guía, desglosamos los tipos de contenido en redes sociales con nuevas ideas y consejos sobre cómo crear un plan de contenidos.
Material de lectura
Enlaces
Imágenes
Videos
Historias
Contenido en directo
Infografías
Testimonios
Anuncios
Concursos
Los blogs, artículos, guías, libros digitales y documentos técnicos son tipos de contenido que funcionan bien en las redes sociales porque demuestran tu experiencia, aportan valor y atraen a clientes potenciales que buscan información.
Por ejemplo, un minorista de moda puede compartir una guía de estilo, una marca de alimentos puede publicar recetas y una empresa tecnológica puede ofrecer un manual sobre su último software.
Para optimizar este contenido, utiliza palabras clave relevantes para el posicionamiento en buscadores o SEO, aprovecha los generadores de texto con IA, incluye elementos visuales llamativos y promociona tu contenido a través de tus canales sociales. Además, encuentra formas gratuitas de promocionar tu blog para maximizar su alcance.
Los enlaces son las URL que dirigen a contenido relevante, ya sea de tu sitio web o de fuentes externas. Funcionan porque dirigen tráfico a distintas áreas de tu sitio web, aumentan la visibilidad de la marca y comparten información valiosa con tu audiencia. Por ejemplo, puedes compartir un enlace a la página de un nuevo producto, una entrada de blog sobre tendencias del sector o un artículo de noticias relevante. Para maximizar su eficacia, utiliza un texto de anclaje convincente, realiza un seguimiento de los clics en el enlace y asegúrate de que el contenido enlazado sea de alta calidad y relevante para tu audiencia.
Las imágenes, como fotografías, ilustraciones, gráficos y memes, son efectivas en redes sociales porque captan la atención, transmiten mensajes rápidamente y aumentan la interacción (consiguen clics en “Me gusta” y “Compartir”). Los ejemplos incluyen fotos de productos, imágenes entre bastidores, testimonios de clientes con imágenes y citas inspiradoras con elementos visuales. Para maximizar su impacto, utiliza imágenes de alta calidad y optimízalas para cada plataforma en términos de tamaño y formato.
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Los videos, que incluyen videos cortos o largos, videos en directo y animaciones, son muy atractivos porque cuentan historias con eficacia y muestran productos o servicios en acción. Los ejemplos de uso incluyen demostraciones de productos, testimonios de clientes, tutoriales prácticos, resúmenes de eventos y videos sobre el ambiente laboral. Para maximizar su efectividad, haz que los videos sean cortos y atractivos, utiliza subtítulos e invierte en buena iluminación y sonido.
Las historias son contenido breve y efímero que desaparece en 24 horas, disponible en plataformas como Instagram y Facebook. Funcionan bien porque crean una sensación de urgencia, muestran contenido entre bastidores y ofrecen funciones interactivas como encuestas y preguntas. Los ejemplos de uso incluyen ventas flash, ofertas por tiempo limitado, avances de nuevos productos y consejos rápidos o tutoriales. Para maximizar su impacto, utiliza elementos visuales llamativos, añade superposiciones de texto e incorpora elementos interactivos para aumentar la participación.
Explora más → Si aún no lo has hecho, aquí te enseñamos cómo crear una cuenta de Instagram y por qué la necesitas para tu negocio.
El contenido en directo son transmisiones de video en tiempo real. Funciona bien porque fomenta el espíritu de comunidad, permite la interacción directa con tu audiencia y crea una sensación de emoción. Los ejemplos de uso incluyen sesiones de preguntas y respuestas, lanzamientos de productos, entrevistas, eventos de compras en directo y visitas entre bastidores. Para maximizar su impacto, promociona tu transmisión en directo con antelación, interactúa con los espectadores en tiempo real y reutiliza el contenido para verlo más tarde.
Las infografías son representaciones visuales de datos o información. Funcionan porque simplifican la información compleja, captan la atención fácilmente y son sumamente compartibles. Algunos ejemplos de uso incluyen estadísticas sobre tu sector, consejos presentados de manera visualmente atractiva y una cronología de la historia de tu empresa. Para crear infografías efectivas, utiliza elementos visuales claros, mantén el texto conciso y asegúrate de que los datos sean precisos y relevantes para tu audiencia.
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Los testimonios son reseñas positivas o avales de clientes que funcionan porque generan confianza, credibilidad y prueba social, y son una tendencia de marketing en 2024. Los ejemplos incluyen citas de clientes satisfechos, estudios de casos y contenido generado por usuarios que muestra tus productos. Para aprovechar al máximo los testimonios, solicita opiniones a clientes satisfechos y muéstralas de manera destacada en tus canales de redes sociales. Considera ofrecer incentivos para motivar a tus clientes a compartir sus experiencias positivas.
Los anuncios son noticias sobre tu empresa, productos o eventos que funcionan porque mantienen informada a tu audiencia, crean expectativa y pueden atraer tráfico a tu sitio web o tienda. Los ejemplos incluyen lanzamientos de nuevos productos, anuncios de ventas, próximos eventos e hitos de la empresa. Para maximizar su efectividad, utiliza imágenes impactantes y lenguaje persuasivo, e incluye una llamada a la acción clara como “Compra ahora” o “Más información”.
Los concursos son promociones que ofrecen premios a cambio de la interacción del usuario, como hacer clic en “Me gusta”, compartir o comentar. Funcionan porque impulsan la interacción, aumentan la visibilidad de la marca y pueden ayudarte a recopilar contenido generado por los usuarios. Ejemplos comunes son concursos de fotos o sorteos. Para organizar un concurso eficaz, establece reglas y directrices claras, ofrece premios atractivos y promociona el concurso de manera destacada en tus canales sociales para llegar a más participantes.
Entre bastidores: ofrece a tu audiencia un vistazo de tus operaciones diarias, reuniones de equipo, creación de productos e incluso momentos inesperados o errores. Funciona porque humaniza tu marca, genera confianza y fomenta el sentido de comunidad al mostrar la realidad detrás de tu negocio. Los ejemplos incluyen una panadería que muestra el proceso de elaboración del pan, una tienda de ropa que comparte el cambio de imagen de un probador, y una startuptecnológica que revela la cultura de su oficina y el ambiente de trabajo.
Entrevistas: las entrevistas son conversaciones con expertos del sector, personas influyentes o miembros del equipo, y pueden incluir sesiones de preguntas y respuestas en directo con la audiencia. Funcionan porque proporcionan información valiosa, aumentan la credibilidad y fomentan la participación activa. Los ejemplos incluyen una librería que entrevista a un autor sobre su obra, una marca de fitness que organiza una sesión de preguntas y respuestas con un entrenador personal para discutir consejos de entrenamiento, y una marca de belleza que presenta un tutorial en el que un maquillador ofrece consejos y responde preguntas en tiempo real sobre técnicas y productos.
Un día en la vida: es una narrativa que lleva a tu audiencia a través de un día típico de alguien de tu empresa, un cliente o incluso un producto. Funciona porque crea una conexión personal, muestra diferentes perspectivas y hace que tu marca sea más reconocible y accesible. Los ejemplos incluyen el dueño de una cafetería que comparte su rutina diaria detrás del mostrador, un cliente que documenta su experiencia con una nueva aplicación desde la descarga hasta el uso cotidiano, o el recorrido de un producto desde el almacén hasta la puerta de casa, para destacar el proceso y la calidad del servicio.
Encuestas: consisten en recopilar preguntas, opiniones y comentarios de tu audiencia. Funcionan porque aumentan la participación, te proporcionan información valiosa y hacen que tu público se sienta escuchado y valorado. Los ejemplos incluyen una tienda de ropa que pregunta a sus clientes por su color favorito para nuevas colecciones, un restaurante que solicita sugerencias de recetas para el menú, y una empresa tecnológica que recaba opiniones sobre una nueva función de su producto.
Desafíos: consisten en crear retos divertidos que fomenten la interacción de los usuarios y la creación de contenidos. Funcionan porque impulsan el compromiso, aumentan la visibilidad de la marca y producen contenido generado por los usuarios, lo que puede ser muy beneficioso para la promoción. Los ejemplos incluyen el reto de 30 días de entrenamiento de una marca de fitness, un reto de lectura de una librería, un reto de estilismo de una marca de moda.
Tutoriales y guías: consisten en compartir instrucciones paso a paso, consejos y trucos relacionados con tus productos o sector. Funcionan porque aportan valor, te posicionan como experto en tu campo y dirigen tráfico hacia tu sitio web o tienda. Los ejemplos incluyen un tutorial de sombras de ojos de una marca de maquillaje donde se enseñan técnicas detalladas, y un video de consejos rápidos de una empresa de software, que proporciona soluciones rápidas y eficaces para problemas comunes del usuario.
Acontecimientos de actualidad: implican crear contenido que aproveche noticias, eventos o tendencias virales actuales. Funcionan porque demuestran que tu marca es relevante y está comprometida con el mundo, lo que puede aumentar tu alcance y el compromiso de tu audiencia. Los ejemplos incluyen una marca de moda que comenta un look de alfombra roja para destacar tendencias y estilo, una marca de comida que comparte recetas para una fiesta popular que está en tendencia, y una empresa tecnológica que analiza un nuevo desarrollo del sector para mostrar innovación y conocimiento del mercado.
Hashtag en tendencia: implica unirse a retos o tendencias populares de hashtag. Funciona porque aumenta la visibilidad de tu contenido, llega a un público más amplio que está siguiendo esa tendencia y muestra la personalidad de tu marca al participar activamente en conversaciones actuales. Los ejemplos incluyen una librería que comparte una foto de su primer local con un hashtag relevante para la historia de su negocio, una marca de fitness que publica una cita motivadora para inspirar a sus seguidores con el hashtag del día, y una marca de belleza que se une a un reto de maquillaje a través de hashtags relacionados para llegar a entusiastas del maquillaje en redes sociales.
Momentos culturales: implican vincular tu contenido a acontecimientos culturales importantes como eventos deportivos, entregas de premios o festividades. Funcionan porque crean una sensación de experiencia compartida con tu audiencia, demuestran que tu marca está alineada con la época actual y pueden generar expectativa al aprovechar la relevancia del momento. Los ejemplos incluyen una marca de ropa deportiva que celebra la victoria de un equipo importante con contenido y promociones relacionadas, una joyería que ofrece descuentos especiales para el Día de San Valentín para captar la atención de parejas que buscan regalos significativos, y una juguetería que promociona productos para las fiestas navideñas para atraer a familias en búsqueda de regalos para el arbolito.
Cultura del meme: implica utilizar memes populares y adaptarlos para que encajen con la voz y el mensaje de tu marca. Funciona porque muestra la personalidad de tu marca de manera divertida y actual, aumenta la interacción con tu audiencia al utilizar contenido reconocible y puede tener el potencial de volverse viral en las redes sociales. Los ejemplos incluyen una cafetería que publica un meme humorístico relacionado con el café para conectarse con amantes del café, una empresa tecnológica que utiliza un meme divertido para explicar de manera sencilla un concepto complejo de tecnología, y una tienda de ropa que crea un meme sobre una tendencia de moda para captar la atención de seguidores interesados en las últimas tendencias.
Historias de clientes: implican compartir experiencias, testimonios o reseñas de clientes satisfechos con tu producto o servicio. Funcionan porque generan confianza, credibilidad y prueba social al mostrar las experiencias positivas de otros usuarios, lo que puede influir en las decisiones de compra de nuevos clientes. Los ejemplos incluyen una tienda de ropa que comparte fotos de clientes usando sus prendas para destacar el estilo y la satisfacción del cliente, un restaurante que comparte una crítica favorable para demostrar la calidad de su comida y servicio, y una empresa tecnológica que presenta la historia de éxito de un cliente para ilustrar cómo su producto ha ayudado a resolver problemas específicos.
Envío de fotos y videos: consiste en animar a tus seguidores a compartir imágenes o videos utilizando tu producto o servicio. Funciona porque genera contenido auténtico y genuino creado por los propios usuarios, aumenta la interacción al involucrar activamente a la comunidad y fortalece el sentido de pertenencia a través de la participación. Los ejemplos incluyen una agencia de viajes que invita a los clientes a compartir fotos de sus vacaciones para mostrar destinos y experiencias reales, una tienda de mascotas que organiza concursos de fotos de mascotas para destacar la diversidad y la simpatía de sus clientes, y una marca de fitness que presenta videos de entrenamientos de sus clientes para inspirar y motivar a otros usuarios a mantenerse activos y saludables.
Campañas de hashtags: consisten en crear un hashtag específico de marca y animar a los usuarios a compartir sus experiencias utilizando ese hashtag. Funcionan porque aumentan la visibilidad de la marca al producir contenido generado por los usuarios, fomentan la participación activa de la comunidad y crean una colección seleccionada de contenido que refleja la experiencia y la percepción positiva de los usuarios hacia la marca.
Reseñas y comentarios: se trata de destacar las opiniones y comentarios positivos de los clientes en tus canales de redes sociales. Funcionan porque refuerzan la percepción positiva de la marca al mostrar la satisfacción de los clientes, generan confianza entre los nuevos consumidores al ver experiencias positivas de otros usuarios y demuestran que valoras las opiniones y el feedback de tus clientes. Los ejemplos incluyen compartir capturas de pantalla de reseñas positivas en tus publicaciones, crear gráficos que resuman las opiniones de los clientes y destaquen las menciones favorables, y responder públicamente a comentarios y reseñas para agradecer y mostrar compromiso con la satisfacción del cliente.
Temas festivos: implican crear contenidos que se relacionen con las principales fiestas y temporadas del año. Funcionan porque aprovechan el espíritu festivo que captura la atención de la audiencia, proporcionan contenido oportuno y relevante que resuena con los intereses del momento, y pueden impulsar las ventas al alinear las promociones con las expectativas y necesidades de los consumidores durante esos períodos especiales. Los ejemplos incluyen una guía de regalos para Navidad que ayuda a los clientes a elegir regalos perfectos para sus seres queridos, una promoción espeluznante para Halloween que ofrece descuentos especiales en productos temáticos de miedo, y unas rebajas de verano en trajes de baño que atraen a clientes en busca de artículos para la temporada de vacaciones.
Explora más → Quizá te sean útiles estas ideas para tu campaña navideña.
Días/meses de concientización: implican reconocer y crear contenido para días o meses especiales dedicados a causas relevantes para tu sector o comunidad. Funcionan porque muestran el compromiso de tu marca con la responsabilidad social, educan a tu audiencia sobre temas importantes y pueden iniciar conversaciones significativas en línea. Los ejemplos incluyen una librería que promociona el Día Nacional de los Amantes de los Libros con descuentos especiales y recomendaciones de lectura, una tienda de alimentos saludables que comparte recetas nutritivas y consejos para el Mes de la Salud Cardíaca para fomentar hábitos alimenticios saludables, y una marca de belleza que destaca la importancia de la detección temprana del cáncer de mama durante el Mes de la Concientización sobre el Cáncer de Mama con información educativa y promociones benéficas.
Consejos de temporada: implican proporcionar consejos y sugerencias adaptadas a la estación o momento actual, para ofrecer valor práctico a tu audiencia mientras demuestras tu experiencia y posicionas tus productos o servicios como soluciones pertinentes. Por ejemplo, una marca de moda puede ofrecer consejos sobre cómo vestirse en invierno, un centro de jardinería puede compartir recomendaciones para la siembra en primavera, y una agencia de viajes puede sugerir destinos ideales para las vacaciones de verano.
Publicaciones de celebración: involucran la celebración de hitos, aniversarios y logros con tu audiencia, lo cual funciona al generar emoción, fomentar la comunidad y humanizar tu marca. Los ejemplos incluyen celebrar el aniversario de la fundación de tu empresa para resaltar tu trayectoria y éxito, alcanzar un hito significativo en seguidores en redes sociales y agradecer a tu comunidad por su apoyo, o lanzar un nuevo producto para destacar la innovación y el progreso de tu marca.
Sesiones de lluvia de ideas: reúne a tu equipo para generar ideas con regularidad.
Escucha social: supervisa las conversaciones y tendencias relacionadas con tu sector.
Comentarios de los clientes: pregunta a tus clientes qué tipo de contenido les gustaría ver.
Análisis de la competencia: observa lo que les funciona a otros en tu nicho.
Curación de contenidos: comparte contenido relevante de otras fuentes con tus propios comentarios.
Informes de tendencias: mantente al tanto de las últimas tendencias e incorpóralas a tu contenido.
Busca inspiración: sigue a personas influyentes, líderes del sector y marcas creativas. Explora plataformas como Pinterest, que es una fuente de inspiración.
Veamos cómo crear un plan que te lleve adonde quieres llegar:
Conoce a tu público. ¿A quién te diriges? Antes de empezar a publicar, tienes que saber a quién le hablas. Utiliza analíticas de redes sociales, encuestas y comentarios de los clientes para recopilar esta información. Cuanto más conozcas a tu público, más específico y eficaz será tu contenido.
Establece objetivos SMART. ¿Qué quieres conseguir? Tus objetivos deben ser eSpecíficos, Mensurables, Alcanzables, Relevantes y limitados en el Tiempo. Tener objetivos claros te ayudará a centrar tus esfuerzos y a medir tu éxito.
Analiza a la competencia. ¿Qué les funciona? Analiza las estrategias de tus competidores en las redes sociales para ver con qué se identifica su audiencia. Utiliza esta información para identificar oportunidades y diferenciar tu propio contenido.
Selecciona y crea. Rellena tu calendario de contenidos. Desarrolla una mezcla de contenido original que se ajuste a tus objetivos y a los intereses de tu audiencia. Utiliza las ideas de la sección 2 para inspirarte.
Programa estratégicamente. El tiempo lo es todo. Publica con regularidad para mantener el interés de tu audiencia. Utiliza un calendario de redes sociales para planificar y programar tus publicaciones con antelación.
Mide y ajusta. Rastrea tu progreso. Realiza un seguimiento de métricas como la interacción y las conversiones. Analiza tus datos para ver qué funciona y qué no. Utiliza esta información para perfeccionar tu estrategia y mejorar tus contenidos.
Explora más → Aprende cómo crear una estrategia de contenidos.
En una publicación de redes sociales cada componente desempeña un papel crucial en la creación de un mensaje cohesivo e impactante. Desglosemos los componentes esenciales:
Título: el texto principal que acompaña a tu contenido visual (imagen, video, etc.). Es tu oportunidad de captar la atención, transmitir tu mensaje y atraer a los usuarios para que interactúen con tu publicación.
Emojis: son los pequeños iconos digitales que expresan emociones, objetos o ideas. Aportan personalidad, transmiten tono y hacen que tus mensajes sean más atractivos visualmente.
CTA (Llamada a la acción): es una indicación que le dice a tu audiencia qué hacer a continuación (por ejemplo, “Compra ahora”, “Más información”, “Regístrate”). Guía a los usuarios hacia una acción deseada, ya sea realizar una compra, visitar tu sitio web o interactuar con tu contenido.
Menciones (@): es etiquetar a otros usuarios o marcas en tus publicaciones. Aumenta la visibilidad, crea relaciones y fomenta la promoción cruzada.
Hashtags (#): son palabras o frases precedidas del símbolo “#” que se utilizan para categorizar y descubrir contenidos. Aumentan tu alcance, te ayudan a conectarte con tu público objetivo y hacen que tu contenido sea más fácil de descubrir.
El contenido: es la sustancia de tu publicación, la imagen, el video, el texto o una combinación de ellos. Es lo que capta la atención, transmite tu mensaje y genera la participación.
Si comprendes la anatomía de una publicación en las redes sociales y aplicas estas prácticas recomendadas, crearás contenidos que no solo captarán la atención, sino que también conseguirán una participación significativa y resultados para tu empresa.
Aquí tienes algunos consejos prácticos para mejorar tus contenidos:
Analiza las estrategias de contenido de la competencia. No te limites a observar a tus competidores: aprende de ellos. Estudia sus canales de redes sociales para identificarlos.
La regularidad es la clave. Los algoritmos de las redes sociales favorecen a las cuentas que publican con regularidad. Establece un calendario de publicaciones coherente y cúmplelo.
Prioriza la participación de la audiencia. No te limites a difundir tu mensaje: inicia conversaciones. Responde a los comentarios, haz preguntas, organiza encuestas y sesiones de preguntas y respuestas.
Calidad sobre cantidad. Es mejor tener unas pocas publicaciones de alta calidad que una avalancha de publicaciones sin valor. Cada contenido debe aportar valor a tu audiencia.
Optimización SEO. Haz que tu contenido sea fácil de encontrar al optimizarlo para los motores de búsqueda.
Utiliza analíticas y comentarios. Sigue el rendimiento de tus redes sociales para ver qué funciona y qué no.
Las redes sociales son el megáfono de tu negocio, tu fachada virtual y tu línea directa con una audiencia global. Si comprendes los diversos tipos de contenido que tienes a tu disposición, aprovechas las ideas creativas y elaboras un plan de contenidos bien estructurado, puedes transformar tu presencia online de un mero perfil a una próspera comunidad de clientes comprometidos. Recuerda:
La variedad es la clave: no te limites a un solo tipo de contenido. Experimenta con distintos formatos para ver con qué se identifica tu audiencia.
Calidad antes que cantidad: céntrate en crear contenidos valiosos y de alta calidad que tu público los aprecie y comparta.
Interactúa con tu audiencia: responde a los comentarios, haz preguntas y crea un diálogo.
Haz un seguimiento de tus resultados: utiliza las analíticas para medir tu éxito e identificar las áreas que puedes mejorar.
Si inviertes tiempo y esfuerzo en tu estrategia de contenidos en las redes sociales, recogerás los frutos de un mayor conocimiento de la marca, relaciones más sólidas con los clientes y, en última instancia, un aumento de las ventas.