¿Qué haces si eres un voluntario que lucha por mantenerse motivado y cumplir con los plazos?

1 Establece metas realistas

Antes de comenzar a ser voluntario, asegúrate de tener una idea clara de lo que quieres lograr y cuánto tiempo y energía puedes dedicarle. No asumas más de lo que puedas manejar o esperes tener un gran impacto de la noche a la mañana. Establezca objetivos SMART que sean específicos, medibles, alcanzables, relevantes y con plazos determinados. Por ejemplo, en lugar de decir "Quiero ayudar al medio ambiente", di "Quiero plantar 10 árboles en el parque local para fin de mes". Esto te ayudará a enfocar tus esfuerzos y hacer un seguimiento de tu progreso.

3 Encuentra tu motivación

¿Por qué elegiste ser voluntario para esta causa u organización? ¿Cuáles son los beneficios y recompensas de tu trabajo voluntario? ¿Cómo se alinea con tus valores e intereses? Estas son algunas de las preguntas que puedes hacerte para encontrar tu motivación y recordarte tu propósito. También puedes buscar inspiración en otros voluntarios, historias de impacto o testimonios de las personas a las que estás ayudando. Recuerda que tu trabajo voluntario es importante y que estás marcando la diferencia, sin importar cuán pequeña o grande sea.

4 Recompénsate a ti mismo

El voluntariado puede ser un trabajo duro, pero también puede ser divertido y agradable. No olvides recompensarte por tus esfuerzos y logros, incluso si no son reconocidos o apreciados por los demás. Puedes darte un capricho con algo que te guste, como una película, un bocadillo o un pasatiempo. También puedes celebrar tus hitos con tu equipo, como completar una tarea, alcanzar un objetivo u obtener comentarios positivos. Recompensarte a ti mismo te ayudará a levantar tu moral, reducir tu estrés y renovar tu entusiasmo.

5 Cuídate

El voluntariado puede ser emocional y físicamente exigente, especialmente si estás lidiando con temas delicados o desafiantes. Es importante cuidarse a sí mismo y a su bienestar, así como al bienestar de los demás. Asegúrese de descansar lo suficiente, comer bien, hacer ejercicio y mantenerse hidratado. También puedes practicar la atención plena, la meditación u otras técnicas de relajación para hacer frente a cualquier emoción o pensamiento negativo. No tengas miedo de pedir ayuda o apoyo si lo necesitas, a tu equipo, a tus amigos o a tu familia. Cuidarte te ayudará a prevenir el agotamiento, la fatiga y la frustración.

6 Sé flexible y adaptable

El voluntariado puede ser impredecible y dinámico, ya que puedes enfrentarte a cambios, desafíos u oportunidades inesperados. En lugar de resistirte o quejarte, trata de ser flexible y adaptable a la situación. Esté abierto a aprender nuevas habilidades, probar cosas nuevas o ajustar sus planes. Sé creativo e ingenioso a la hora de encontrar soluciones o alternativas. Sé positivo y optimista sobre los resultados. Ser flexible y adaptable te ayudará a superar obstáculos, aceptar la diversidad y crecer como voluntario.

7 Esto es lo que hay que tener en cuenta

Este es un espacio para compartir ejemplos, historias o ideas que no encajan en ninguna de las secciones anteriores. ¿Qué más te gustaría añadir?