Hay que trabajar por los temas realmente importantes para la industria, así lo hacemos en la RAI. Formar, atraer a nuevos técnicos...hay que generar opinión y voluntades en este esfuerzo colectivo.
CEO at Royal Academy of Engineering, Gral. Secretary at Observatory of Engineering of Spain, Industrial Policy advisor.
La importancia de la Industria y nuestra autonomía estratégica como gran tema de la reunión celebrada con el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu. Estos fueron los mensajes transmitidos desde la Real Academia de Ingeniería: ➡️ Hace falta definir y movilizar un Plan Estratégico de la industria española. Debe ser un plan sectorialmente selectivo basado en fortalecer las capacidades existentes y alineado con Europa. El ejemplo del plan implementado en el País Vasco a partir de los años 70 es una referencia que ha llevado a un PIB industrial local del 23 % comparado con el 17 % de España. La mayor dificultad es la selección de sectores. ➡️ Hay que aumentar la inversión en I+D del 1,5 % al 3 %. En 4 años tenemos que alcanzar el 2 %. La inversión pública debe mejorar en calidad y la privada en cantidad, mediante políticas de incentivación, ayudas, fiscalidad, etc. ➡️ Necesitamos más y mejores ingenier@s, 100.000 más en diez años, sobre el ritmo actual de titulados y retirados anuales. Hay que relacionarlo con la FP superior dual. La ocupación ofrecida por la industria a nuestros nuevos ingenieros salidos de la Universidad no está en ocasiones a la altura de sus expectativas y capacidades, lo que lleva a una cierta frustración profesional y a la posible fuga de talento. Las empresas se quejan de no recibir profesionales con la cualificación que precisan y la universidades tienen que reaccionar. Necesitamos también más titulados en FP. ➡️ Hay que movilizar políticas para la captación y retención de talento. ICREA e Ikerbasque han sido un éxito. Debemos extenderlo y generalizarlo. ⭐ Creemos que la nueva #LeydeIndustriayAutonomíaEstratégica, que sustituye a la presente con 30 años de vida, es la oportunidad para movilizar estas políticas. Evitemos que esta necesidad, prioritaria para nuestra economía, se contamine con la dinámica de controversia política estéril a la que tristemente estamos tan acostumbrados.