El corto y el largo plazo de las operadoras de #telecomunicaciones.
Tras 20 años de regulación es necesario tomar decisiones a corto y largo plazo para que las operadoras de telecomunicación sean un negocio viable y sostenible, que lleve a nuestro país a ser competitivo.
Las ayudas del Estado para afrontar inversiones son positivas a corto plazo, siempre que en el largo plazo no se conviertan en un problema que lastre a la cuenta de resultados.
Es muy importante, a la hora de recibir ayudas, saber si esas inversiones van a ser rentables a largo plazo consiguiendo superar el punto de equilibrio, es decir, si los ingresos que originan son mayores que los costes de operación y mantenimiento que ocasionan.
Las ayudas para llevar la conectividad a cualquier rincón del país deben venir acompañadas de planes de industrialización en zonas rurales, para que estas ayudas no caigan en saco roto, convirtiéndose en un problema en el largo plazo para las operadoras que han recibido las ayudas.
El impacto de los costes del espectro para las operadoras es un problema a corto plazo, ya que tienen que desembolsar importantes cantidades de dinero antes de invertir en los activos que generarán los futuros ingresos.
De hecho se ha observado como las operadoras cada vez han pagado menos en las subastas del espectro: en la última subasta de 26 GHz el precio total quedó por debajo de los 100 millones de euros, muy lejos de los 1.431 millones que recaudó el Estado con la subasta de espectro en la banda 3,7 GHz y los 1.010 millones en la banda 700 MHz.
El problema actual de viabilidad del negocio de las operadoras es más de corto plazo que de largo plazo y es por ello que están llevando a cabo ajustes de plantilla para equilibrar sus números.
Está muy bien que el Gobierno a través de SETELECO. Secretaría de Estado de Telecomunicaciones e Infraestructuras Digitales, anunciase ayer en #DigitalES2024, organizado por DigitalES, el alargar el tiempo de concesión de licencias del espectro a las operadoras, pero dada la situación actual, también es necesario tomar urgentemente decisiones regulatorarias a corto plazo que faciliten la sostenibilidad y las inversiones de las operadoras.