Hoy nos encontramos junto a la Agència de Ciberseguretat de Catalunya donde se define el nuevo modelo de ciberseguridad, que mejora de forma global y organizada los servicios de defensa y prevención de ciberataques en todas y cada una de las capas vulnerables de la tecnología. Se destinarán 232 millones de euros en los próximos cuatro años, reflejando el compromiso vital con la sociedad y los modelos emergentes de digitalización.