Publicación de Alvaro D.

🚨 19 #ahogamientos mortales en #enero 2024 🚨 Las 19 muertes ocurridas en #espaciosacuáticos en enero sitúan al mes por debajo de la media de la serie histórica El del 2023 había sido el tercer inicio de año con más personas ahogadas en la serie histórica y el peor en los últimos seis Las 19 muertes por ahogamiento no intencional ocurridas en los espacios acuáticos españoles durante el pasado enero se sitúan por debajo de la media de la serie histórica, entre 2015 y 2023, de este mes, 20,3 fallecimientos. Enero de 2023, con 22 víctimas, había sido el peor de los seis años anteriores, desde que en 2017 se habían registrado 35 fallecimientos por esta causa, además del tercer peor inicio de año de la serie histórica. #swimstars #swimstarsespana #ceroahogados #natacion #Espana #catalunya #barcelona #madrid #valencia #malaga #lanzarote #ibiza #Sansebastian #alicante https://lnkd.in/dvkyhnKP

¿Es un bulo? ¿es cierto? La desinformación, el peor reflejo y causa del caos. Dentro del desastre institucional que está mostrando la tragedia humana de la #DANA, hay -¡6 días después!- un dato que nadie ha hecho público y que no sabemos si los organismos competentes conocen realmente: el número de desaparecidos. Mucha gente normalmente bien informada han hablado todo el fin de semana sottovoce (y la mayoría de la gente lo comenta, pero no de forma discreta) de que las víctimas mortales superarían el millar, porque un medio contó que el número de desaparecidos inicial superó los 2.000. Entre la gente ha volado la idea de que hay parkings públicos enormes que se han convertido en involuntarios cementarios, con supuestos cientos de fallecidos atrapados en los coches. Confío -y, sobre todo, deseo- plenamente en que no sea así. La culpa ya no es de los que deducen y transmiten eso, sino de los organismos que ¡6! días después aún no sabe dar una cifra de desaparecidos y da pie a la especulación, angustia, desolación e indignación de la gente, que no entiende cómo puede haber un funcionario de la seguridad, emergencias, bomberos, militares... en cualquier punto del país y que no esté trabajando de forma coordinada y dirigidos por profesionales con conocimiento y experiencia en este ámbito. Pero si todavía no se ha dicho (y tememos que las instituciones desconocen realmente) el número de desaparecidos, es difícil confiar en que sepan resolver lo demás. Todo esto se resuelve con información útil, honesta y creíble, actualizada, responsable e inteligente. Salvo que hubiera un motivo operativo o de protección a las personas que lo justificara, es necesaria la transparencia al servicio de la gente. Dejar trabajar a los profesionales, sí. Que se dé información oportuna, también. Porque, con la reputación y la confianza de los ciudadanos, las instituciones sólo generan confianza si se la ganan. Y debemos acordarnos de que la reputación cuesta mucho ganarla (y recuperarla) y muy poco perderla. PD: Ojalá sea un bulo... y acordémonos de que aquí los políticos nunca serán lo importante, aunque ocupen los informativos, sino las víctimas, familiares y demás afectados. No lo (ni les) olvidemos.

Nuestros pensamientos y oraciones están con las víctimas de la DANA, y resulta difícil poder abstraerse de tanto dolor al contemplar la magnitud de la tragedia. Las imágenes de devastación nos conmueven profundamente, pero más allá del impacto visual, es crucial recordar el coste humano de este desastre natural. La reciente DANA nos deja imágenes desoladoras de calles inundadas, casas destruidas, comercios arrasados y, lo más trágico, vidas arrebatadas. Los medios de comunicación, en su afán por informar, nos bombardean con cifras: "212 muertos", "se estiman 216 fallecidos"... Pero, ¿nos detenemos a pensar realmente en lo que significan esos números? Detrás de cada cifra hay un nombre, una historia, una vida irrepetible. Hay familias destrozadas, amigos que lloran, sueños truncados. Cuando hablamos de "cantidad de muertos", corremos el riesgo de deshumanizar la tragedia, de convertir el dolor en una fría estadística. Una sola vida perdida ya es demasiado. Cada persona que se ha llevado la DANA era un mundo, con sus seres queridos, sus anhelos, sus miedos. Olvidamos que el drama no se mide en cifras, sino en el vacío que deja cada ausencia. El nombre de la tragedia es el nombre de cada víctima. Es el nombre del anciano que no pudo escapar de la riada, de la joven madre que perdió a su hijo, del trabajador que quedó atrapado en su vehículo. Son sus historias las que debemos recordar, las que nos deben conmover. No permitamos que el dolor se diluya en las cifras. Honremos la memoria de las víctimas, recordando que detrás de cada número hay una vida que se ha apagado, un universo de afectos que se ha roto. Y, sobre todo, trabajemos para que estas tragedias se puedan prevenir y evitar en el futuro. Porque una sola vida perdida, ya es demasiado.

En los cinco primeros días de la tragedia, las fuerzas armadas y los voluntarios lograron rescatar y transportar a más de 100.000 personas, entre ellas a mis padres, de las zonas más afectadas por los deslaves y las riadas. Era diciembre de 1999, en Venezuela. El recién instaurado régimen había ya empezado a derribar la legalidad y las instituciones. Chávez se permitió rechazar, por motivos ideológicos, la ayuda urgente que venía de Estados Unidos. Había saqueos, caos y confusión. Pero hubo una reacción inmediata en cuanto se percibió la magnitud de la catástrofe. Las instituciones de la moribunda democracia se movilizaron, al igual que la solidaridad de la nación. Valencia ha reabierto esa herida que llevo y que sé que nunca se acabará de cerrar. Y no puedo dejar de compartir mi indignación por la falta de respuesta y el abandono en el que se ha dejado a tantas personas durante tantos días. Es muy difícil hacer otra cosa que no sea pensar en los afectados por las inundaciones. Pido perdón porque sé que esta es una red profesional en la que solemos compartir otro tipo de contenido, pero creo que tenemos la obligación de arrimar el hombro en la medida de nuestras posibilidades, de expresar nuestra solidaridad con las víctimas y de exigir responsabilidades para que esta vergüenza no se repita. La solidaridad ciudadana ha sido lo único ejemplar. En todos los demás aspectos vinculados con la gestión de la catástrofe hace falta una revisión profunda. ¿Por qué no se ha decretado un estado de alarma? ¿Por qué la demora en la movilización de los recursos? El fracaso en la coordinación, ¿es un fallo de diseño institucional o es fruto de la incapacidad o de la falta de voluntad política? España, que había sido un ejemplo en catástrofes anteriores, registra ahora actos vandálicos, robos y saqueos que hace años parecían imposibles. Mis condolencias a todas las personas que han perdido seres queridos y un mensaje de ánimo para todos los afectados. No estáis solos. 

𝐈𝐧𝐮𝐧𝐝𝐚𝐜𝐢𝐨𝐧𝐞𝐬 La DANA que esta semana ha golpeado varias zonas de España, con mayor fuerza en la Comunitat Valenciana, es una catástrofe que marcará a generaciones. El número de víctimas mortales y desaparecidos, las imágenes, los testimonios, el colapso de carreteras y municipios, se clavan en la retina y la piel ahora pero perdurarán aferradas durante décadas en la memoria colectiva. También lo serán para los viveristas y otras empresas del sector verde de las zonas afectadas. Todavía a falta de recuentos oficiales nos llegan las primeras informaciones de viveros devastados en Valencia y Andalucía, y muchos profesionales no han podido siquiera acceder todavía a sus instalaciones, que han quedado aisladas o bloqueadas. Es por ello que habrá que esperar unos días para conocer el alcance de los daños en cifras, que se prevé que sean cuantiosas. El equipo de #Guiaverde se solidariza con todos los ciudadanos afectados de una u otra forma por esta tragedia y se pone a disposición de los profesionales del sector para lo que estimen oportuno.

La catástrofe que se está viviendo en el este de España, con inundaciones que están dejando un devastador saldo de muertes y destrucción, ha revelado una vez más el contraste entre la voluntad solidaria de los ciudadanos y la falta de coordinación en la clase política. Mientras las calles de Valencia y sus alrededores sufren los estragos de la DANA, los vecinos se han organizado para brindar apoyo, ayudando en las evacuaciones, ofreciendo alimentos y ropa, y apoyando a las familias afectadas. La gente, a pesar del dolor y las pérdidas, se ha unido en un esfuerzo común, mostrando una empatía y compromiso que ha sido, como en tantas otras crisis, un ejemplo de solidaridad. Sin embargo, y como es habitual en este país, este esfuerzo colectivo contrasta amargamente con la respuesta de los dirigentes políticos. A pesar de la urgencia de la situación, los líderes siguen enfrascados en disputas partidistas y críticas vacías, en lugar de unir fuerzas en un frente común. El jefe de la oposición, en lugar de tender la mano y ponerse a disposición del gobierno para coordinar ayudas y acciones, ha preferido una vez más hacer el ridículo, como de costumbre, y centrarse en alimentar una rivalidad política que resulta vacía e inoportuna en un momento de tanta necesidad. Esta tragedia vuelve a poner de manifiesto la realidad de la clase política, que en vez de priorizar a las personas, parece más interesada en mantener sus disputas incluso en situaciones así. Mientras tanto, los ciudadanos y los servicios de emergencia (Bomberos, Guardia Civil, Policía, UME, Protección Civil, Ejército....) con su unión y su esfuerzo en primera línea demuestran ser los verdaderos protagonistas en momentos de crisis, recordándonos que la humanidad y la ayuda mutua siempre estarán por encima de los intereses partidistas . . . Y no hay que olvidar tampoco a los que están rescatando animales, las víctimas olvidadas y silenciadas de esta tragedia.

Desde que vi La Sociedad de la Nieve que confirmo algo que hace un tiempo entendí. Cada día es un regalo y es lo único que tenemos... Nuestra actitud cambia totalmente. ¿Por qué no tomar el riesgo? ¿Por qué no disfrutar más con nuestra familia, nuestros amigos? ¿Por qué no? La vida puede ser un juego espectacular dependiendo de nuestra actitud. Muy bueno este artículo de Juan Bautista Segonds sobre La Sociedad de la Nieve. A vivir.

El dolor que embarga a Valencia tras el paso devastador de la DANA es inmenso. Las vidas arrebatadas, las familias destrozadas, el paisaje irreconocible… una herida profunda que tardará mucho en sanar. Pero al dolor se suma la indignación, un sentimiento que crece con cada hora que pasa, con cada imagen de desolación, con cada testimonio de impotencia. ¿Cómo es posible que, en pleno siglo XXI, una tragedia de tal magnitud se cobre tantas vidas? ¿Cómo es posible que la respuesta de las instituciones haya sido tan lenta, tan ineficaz? Tres días han tardado en llegar los efectivos del ejército, tres días en los que la desesperación se ha apoderado de los valencianos. Tres días viendo cómo el agua arrasaba con todo, mientras los responsables políticos parecían mirar hacia otro lado. Y lo que es aún más indignante: el ejército estaba preparado, listo para actuar, esperando una orden que no llegaba. ¿Quién es responsable de esta negligencia criminal? ¿Quién ha tomado la decisión de dejar a miles de personas abandonadas a su suerte, mientras la ayuda estaba a su alcance? Mientras tanto, países de la Unión Europea se han ofrecido a colaborar, a enviar efectivos de emergencia para paliar la situación. Pero el Gobierno de España, en un alarde de soberbia incomprensible, ha rechazado la ayuda. ¿A qué esperan? ¿A que el número de víctimas siga aumentando? La indignación se extiende como la pólvora. Los valencianos se sienten traicionados, abandonados por aquellos que deberían protegerlos. Exigimos responsabilidades, exigimos explicaciones. ¿Por qué no se tomaron medidas preventivas? ¿Por qué se ignoraron las alertas meteorológicas? ¿Por qué se ha actuado con tanta lentitud e ineficacia? No podemos permitir que esta tragedia quede impune. Es hora de que los responsables políticos asuman las consecuencias de sus actos. Es hora de que se depuren responsabilidades. Es hora de que se haga justicia. Valencia llora a sus muertos, pero también grita su indignación. No olvidaremos lo sucedido. No perdonaremos la inacción de quienes tenían el deber de protegernos.

🚨 Esta es una llamada de auxilio: los valencianos no podemos más. Han pasado seis días desde que la tragedia golpeó nuestra tierra y, a pesar del esfuerzo incansable de los voluntarios y ciudadanos que arriman el hombro sin descanso, nos sentimos abandonados y traicionados por quienes deberían estar al frente. La magnitud de esta catástrofe exige una respuesta contundente, con todos los recursos disponibles. Sin embargo, la realidad es bien distinta. No tenemos maquinaria pesada ni apoyo suficiente de las fuerzas militares. 5,000 efectivos, en segunda instancia, son una broma para la inmensidad de lo que enfrentamos. No se ha enviado SUFICIENTE ayuda de la UME ni se ha movilizado a los efectivos necesarios para socorrer a nuestros pueblos devastados. Los voluntarios hacen lo que pueden, sin apenas medios, afrontando restricciones, pero hoy por hoy su labor, es la única con la que cuentan los afectados y que ya sabemos que pueden generan incluso problemas de salud a corto plazo. Esto ya es un grave problema de salud pública. 🆘 A esto se suma un nuevo riesgo: hoy mismo tenemos activo un aviso de alarma naranja por las inclemencias meteorológicas, según la AEMET y aun así los voluntarios siguen intentando acceder para rescatar a las personas atrapadas y socorrer a todos los afectados. Lo hacen arriesgando su seguridad y sin el apoyo institucional necesario. El lodo apesta, aún hay cadáveres atrapados en garajes sin rescatar, y personas mayores que no han podido recibir atención. Sin electricidad, la carne y los alimentos se están pudriendo, y las enfermedades ya comienzan a extenderse. Pero mientras esto ocurre, quienes deberían actuar solo parecen estar preocupados por proteger su color político, mientras nos enfrentamos a la desolación solos. Exigimos la declaración de un estado de alarma y una respuesta a la altura de esta tragedia. No es momento de excusas ni de cálculos políticos. Si no están dispuestos a defendernos en el peor momento, que lo digan y que asuman las consecuencias. A todos los ciudadanos valencianos, españoles y europeos: necesitamos vuestra ayuda y vuestra voz. Esta es una situación insostenible y no podemos permitir que continúe. Es hora de ACTUAR. Esto no es política, es dignidad. Valencia Plaza / Levante-EMV / ayuda difusión 🙏🏼🙏🏼

🌧️ Carlos Mazón detalla la gestión de la DANA en Valencia El president de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, compareció hoy en Les Corts Valencianes para explicar en detalle la gestión de la tragedia causada por la DANA que afectó gravemente a la provincia de Valencia el pasado 29 de octubre. 📋 Cifras del desastre: 216 personas fallecidas. 16 desaparecidos. 🗣️ Mazón, enfático en la transparencia: El president aseguró que la cronología de los hechos sería abordada de forma minuciosa y documentada, subrayando la importancia de la transparencia: «Se lo debemos a las víctimas y a los afectados.» 🔑 Un relato detallado: En su primera intervención parlamentaria sobre el tema, Mazón expuso: Las acciones previas, durante y posteriores a la DANA. Documentación que respalda cada decisión y medida tomada. Compromiso de proporcionar el máximo nivel de exhaustividad en sus explicaciones. 📌 Impacto y próximos pasos: La tragedia ha generado demandas de mayor preparación ante fenómenos extremos. Mazón adelantó que seguirá trabajando en medidas de reconstrucción y en planes de prevención para minimizar el impacto de futuras catástrofes. #DANA #Valencia #GestiónDeCrisis #Transparencia #CarlosMazón