La importancia de la accesibilidad en el ecosistema emprendedor
La accesibilidad en el ecosistema emprendedor es más que un tema técnico o legal; es un pilar fundamental para construir una sociedad equitativa. A lo largo de los años, he visto cómo el emprendimiento puede cambiar vidas, y por eso me resulta tan importante que estas oportunidades no estén limitadas solo a quienes no enfrentan barreras adicionales, como la discapacidad.
Recientemente, con la promulgación de la Ley N.º 21.690, el porcentaje de personas con discapacidad que deben ser contratadas por empresas con más de 100 trabajadores ha subido de un 1% a un 2%. Aunque este es un paso adelante, no puedo evitar preguntarme: ¿cuántas de estas oportunidades llegarán realmente a las personas con discapacidad intelectual? Ellos constituyen un grupo significativo dentro de la población con discapacidad en Chile, pero suelen quedar excluidos de los procesos de contratación, con preferencia por discapacidades físicas o sensoriales, debido a estigmas y falta de apoyos.
En el emprendimiento, esta realidad no es distinta. Hay iniciativas que buscan apoyar a emprendedores con discapacidad, pero muchas están diseñadas pensando en quienes tienen discapacidad física, dejando en segundo plano a aquellos con discapacidad intelectual. ¿Cómo puede alguien con una buena idea, pero con dificultades cognitivas, acceder a estas oportunidades si no les damos las herramientas necesarias? La falta de formación adaptada y acceso al financiamiento deja fuera a personas con un potencial tremendo.
Para mí, la accesibilidad no es solo un tema de rampas o plataformas digitales accesibles. Es, sobre todo, ofrecer un acompañamiento real, programas de formación que respeten los ritmos y estilos de aprendizaje de cada persona, independientemente de sus capacidades.
El acceso al financiamiento es otra barrera que duele. He trabajado con personas que tienen sueños de montar sus propios negocios, pero que se ven frenadas por la falta de redes de apoyo. Sin embargo, cuando se les da la oportunidad adecuada, demuestran ser capaces de gestionar negocios sostenibles y exitosos.
Es aquí donde entra el rol de quienes formamos parte del ecosistema emprendedor. Si queremos ser agentes de cambio, debemos ir más allá de las leyes y las cifras. Tenemos que asegurarnos de que cada persona, sin importar su discapacidad, tenga acceso a las herramientas necesarias para emprender. Un ecosistema inclusivo debe ofrecer accesibilidad a todos los niveles.
Actualmente, en Desafío Levantemos Chile estamos ejecutando una iniciativa de inclusión laboral que está generando un cambio significativo. Esta labor no solo transforma vidas, sino que demuestra cómo el trabajo en equipo puede abrir oportunidades reales y sostenibles para todos.
El emprendimiento inclusivo es, sin duda, el camino hacia un futuro más equitativo.
