15 Años...

Son las 3 de la madrugada, escucho a todo volumen Dream On de Aerosmith (creo, estoy convencido que todos los informáticos somos rockeros, si...al menos los de la vieja escuela, claro no todos tan locos como yo para estar hasta la coronilla con problemas de mi emprendimiento principal y aun asi tener tiempo y energías para iniciar otro emprendimiento: un restaurante-bar con temática de Rock y llenar el lugar todos los Viernes que se presentaban el “Nazi” Serrano y la guitarra eléctrica de René, si ellos los exFugga) …pero ese emprendimiento musical ya no está y en la soledad de la hora, mi pensamiento regresa al estribillo, “…dream on, dream on, dream until your dreams come true…” 

Pensando como inició esta cabalgata rocanrolezca (mas bien quijotezca?) llamada Creativa Consultores hace ya 15 años, primero pienso en aquel niño que caminó desde su querido Santiago Nonualco hasta San Salvador, cuando tenía menos de 10 años de edad. Solo, huérfano y analfabeta, llegó al centro a la calle Ruben Darío, a los pies de “Fotografía O” cuyo dueño y esposa se “apiadaron” de él, le enseñaron primero a hacer mandados, a barrer, trapear, lavar trastos y sólo con el tiempo cuando estuvo listo se le enseñó el arte de la fotografía. Llegó a ser el fotógrafo principal, durante muchos años, hasta llegar a independizarse y poner su propio estudio fotográfico. 

No, lógicamente esta no es mi historia, no soy ese niño; lo que nos une es nuestro nombre: Nicolás; pero mejor aún nos une la sangre, ese legado sagrado para mi (maldito para otros) del que no se puede huir o renunciar. Él es mi abuelo y yo creo su historia, porque me la contó cuando el alzheimer lo había vencido, me la contaba una y otra vez; yo escuchaba atento cada vez como si fuera la primera vez, me criaron él y mi abuela con la humildad, educación y respeto al mayor de edad, respeto a la gente; pero hicieron mejor: al criarme cargaron en mi el ADN de luchador, el de no dejarse vencer, de caer, levantarse y volver a ser. 

Él es el primer gran emprendedor de mi vida, de mi historia, estoy tan orgulloso de él y tan triste porque cuando murió no tuve los medios para salvarlo, estudiaba los primeros años de computación. Lo único que me queda ahora es mi memoria, y una radiola marca Phillips de 1950, que aún funciona y sobre ella algunos de los premios, reconocimientos y logros de Creativa, simbolizando “la Base” y como le estoy enseñando a hacer torres a mis hijos: “si hay una buena Base nada se cae”. Y cómo una promesa jamás dicha hacia ese hombre, estoy a cargo de mi abuela de mi “mamá Yuly”

Son 15 años, no puedo llamar de éxito sino de lucha constante, a parte de los peligros intrínsecos del emprendedurismo, tenemos condimentos adicionales, me lo decía un mentor de PWC en Dallas que conocí a través del premio de mentorías, que me otorgó Business Council for Peace - Bpeace en el 2014, para que todos esos consejos me ayudaran a crear más empleo: “ayer estuve con un colega de una compañía de TI en Dallas, estábamos en un bar, él se quejaba del trabajo y de lo díficil que le tocaba y yo le dije, he conocido a un pequeño empresario de IT de ES, aparte de todos los problemas comunes, el vive en uno de los países mas peligrosos del mundo, las grandes empresas tienen más recursos que él, lo que le dificulta competir y aun asi tiene un programa de entrenamiento para personas sin experiencia laboral y les da trabajo” … “ después de decirle todo eso, mi colega se sintió mucho mejor, dijo que sus problemas no eran nada comparados a los tuyos y me dijo que te felicitaba por hacer lo que haces”. 

A estos 15 años de lucha constante, sólo puedo pensar en mi abuelo, mi familia, mis hijos, Bpeace, mis mentores, mis jóvenes colegas, si esos jóvenes los que se quedaron a reconstruir, los nuevos que vienen en busca de entrenamiento y oportunidad. Simplemente no les puedo fallar…”Sing with me, sing for the year, sing for the laugther, sing for the tear…Dream on, dream on, dream on…”