17 REGLAS PARA TRABAJAR EN EQUIPO

Muchas veces nos preguntamos qué es lo que debemos hacer para alcanzar el éxito en nuestras organizaciones y lograr realmente alinear al equipo para que podamos alcanzar los objetivos.

En este duro camino nos damos cuenta de que gran parte del problema se encuentra más adentro que afuera de la organización. Las áreas suelen tener objetivos y mediciones diferentes las cuales, en vez de integrar, generan rivalidades internas que lo único que hacen es crear conflictos que al final desenfocan al equipo y lo vuelven más vulnerable frente a los peligros del entorno.  

Para hacer frente a esta situación, John C. Maxwell autor del Best Seller The 17 Indisputable Laws of Teamwork, comparte con nosotros 17 principios que nos pueden ayudar a construir un verdadero equipo:

1.      Ley de la Importancia: Todas las partes del equipo son importantes pues son como los engranajes de una máquina, sin la más pequeña no es posible que funcione. Todo líder tiene la obligación de hacerle saber a cada miembro del equipo como su importante aporte hace posible alcanzar las metas.

2.      Ley del Panorama Completo: Es importante tener claro que la meta u objetivo siempre va a ser más importante que el rol que desempeñamos. Tanto el líder como cada miembro del equipo debe ser capaz de sacrificar sus intereses personales por el bien del equipo y con miras a alcanzar el objetivo a largo plazo. En este punto es realmente importante conocer los egos del equipo y trabajar para controlarlos y canalizarlos como energía para alcanzar las metas.

3.      Ley de la Posición Correcta: Cada miembro del equipo tiene un lugar dentro del mismo donde puede agregar mayor valor. Es labor del líder identificar el potencial de cada miembro del equipo y encontrar la posición dentro del mismo en la que pueda explotar mejor esa habilidad. Cuando tenemos a las personas correctas en los lugares correctos, el resultado no suma sino se multiplica.

4.      Ley del Monte Everest: A medida que el desafío avanza, la necesidad del trabajo en equipo se eleva. El líder del equipo debe primero invertir tiempo en desarrollar las habilidades de cada miembro. Debe buscar de añadir personas claves con talento y actitud que hagan la diferencia. Debe ser capaz y lo suficientemente humilde para aceptar cambiar su rol de liderazgo por el de otra persona con mejores habilidades si la situación lo amerita. Finalmente, debe tener la capacidad de hacer los cambios adecuados a tiempo, pues si uno de los miembros no está al nivel, deberá tomar acción buscando el bienestar del equipo y para alcanzar las metas.

5.      Ley de la Cadena: La fuerza de un equipo se mide por el eslabón más débil. Todo líder tiene la obligación de identificar quien dentro del equipo es el más débil y debe elaborar un plan de acción para lograr que este individuo mejore y contribuya mucho más dentro del equipo. Si a pesar de todos los esfuerzos no logra nivelar este eslabón, lamentablemente deberá prescindir del mismo pues cada integrante del equipo multiplica (10x10x1010x10 = 100,000 vs.10x10x10x10x5 = 50,000)

6.      Ley del Catalizador: Un catalizador es aquel que dentro del equipo no tiene miedo en tomar decisiones, quien convierte los planes en acción, quien tiene mucha pasión por lo que hace y sobre todo logra influenciar en el resto del equipo con su liderazgo. Un catalizador es un jugador o integrante que dentro de un grupo hace la diferencia y muchas veces del mismo depende que se logren resultados sobresalientes.

7.      Ley de la Visión: Un equipo que no tiene una visión o dirección realmente no tiene sentido. La visión ayuda a mantener al grupo enfocado y le brinda confianza. Todo equipo necesita saber porque está luchando, tener un motivo y saber que alcanzar la meta realmente vale la pena.

8.      Ley de la Manzana Podrida: Tener talento no es lo único que necesitamos para alcanzar el éxito. Las habilidades y sobre todo las actitudes influyen mucho en el resultado. Un equipo que tiene un gran talento pero que está lleno de actitudes negativas, jamás será un buen equipo. Un gran talento acompañado de una extraordinaria actitud logra sorprendentes resultados.

9.      Ley del soporte: Es la habilidad y el deseo de los miembros del equipo de trabajar juntos para alcanzar un objetivo en común. Un equipo alcanza el soporte cuando logra desarrollar lo siguiente: 

a.      Carácter: que se basa en la confianza que se tienen entre los miembros del equipo.

b.      Competencia: es la habilidad de cada persona para lograr sus funciones.

c.      Compromiso: saber que las personas están comprometidas con la visión.

d.      Consistencia: es necesario saber que puedes confiar en tu equipo todos los días.

e.      Cohesión: es la habilidad de mantenerse unidos, no importa lo difícil que se tornen las circunstancias.

10.  Ley del Precio: El equipo está destinado a fracasar cuando no es capaz de tomar riesgos y salir de su zona de comfort. Para alcanzar el éxito es necesario que el sacrificio sea hecho por todos los miembros del equipo. Mientras mayor sea el reto mayor deberá ser el sacrificio.

11.  Ley del Marcador: El juego cambia constantemente, por lo que el equipo debe de estar preparado para poder realizar cambios en su estrategia. Saber lo que tu equipo posee y lo que no, ayuda tomar las decisiones en momentos de necesidad.           

12.  Ley de los Sustitutos: Un equipo que quiere sobresalir, debe de tener personas capaces de sustituir a los jugadores principales. Hay dos tipos de personas en un equipo, los “starters” que son las personas que influyen en el destino de la organización y los de la banca, que son las personas que agregan valor indirectamente a la organización y su visión.

Porque es importante tomar en cuenta a las personas que, por decirlo, se encuentran en la banca:

a.      Porque mañana pueden convertirse en los jugadores principales

b.      Porque su apoyo puede mejorar la eficiencia de los “starters”

c.      Tener personas sustitutas le da más opciones al líder en momentos críticos para el equipo.

13.  Ley de la Identidad: Incluso cuando las personas no comparten las mismas experiencias, cultura o no tienen una relación entre ellos, pueden seguir siendo un gran equipo cuando tienen los mismos valores y se sienten identificados por lo que hacen. Es importante sentirse identificado con el objetivo del equipo para que todos los miembros estén motivados para alcanzarlo.

14.  Ley de la Comunicación: La comunicación entre los miembros del equipo es muy importante porque define la forma en la que se maneja el conflicto, la toma de decisiones y las interacciones diarias. La comunicación debe ser concisa, clara y constante para evitar conflictos internos, malentendidos y alcanzar en el menor tiempo posible el objetivo.

15.  Ley del Borde: Lo que diferencia un equipo de otro es liderazgo. Un verdadero líder sabe manejar el talento, explotarlo, ubicarlo en la mejor posición y sacar los mejor del mismo. Los resultados sorprendentes de un equipo que posee el mismo talento y habilidades que otro, se alcanzan con estrategias y acciones del líder que lo dirige.

16.  Ley de la Moral Alta: Una moral alta ayuda al equipo a tener un gran rendimiento. Cuando un equipo tiene una moral alta, no tiene que manejar bajo las condiciones que se le impongan, sino que el mismo crea sus propias condiciones. ¿Pero por qué es importante que un equipo tenga una moral alta?

a.      Porque cuando el equipo es positivo, todos los individuos se sienten bien.

b.      Los miembros tienen mayor compromiso.

c.      Una moral alta motiva y da energía al equipo.

d.      Ayuda al equipo a alcanzar su potencial. 

17.  Ley de los Dividendos: Invertir en el equipo trae beneficios a largo plazo. Para que un equipo realmente funcione debemos hacer lo siguiente:

a.      Tomar la decisión de crear o ser parte del equipo.

b.      Tratar de juntar a las personas correctas.

c.      Tener claro que debemos sacrificar en orden de lograr la meta.

d.      Comprometerse con el equipo para que trabaje como uno solo.

e.      Empoderar a cada individuo, no importa si estas al mando o no.

f.       Felicitar al equipo cuando alcance sus objetivos y apoyarlo cuando sucedan los fracasos.

g.      Invertir tiempo para disfrutar con los compañeros cuando alcancen las metas propuestas.

h.      Darles la oportunidad a los eslabones débiles de mejorar, pero cuando llegue un momento determinado y no se logra un avance, hacer los cambios que sean necesarios.  

i.        Tratar de crear oportunidades y desafíos constantes, velando porque siempre haya nuevos retos que motiven a seguir mejorando como equipo.

j.        Dejar que todos los miembros del equipo tengan la posibilidad constantemente de sobresalir.

Lograr crear equipos de alto rendimiento es un reto que debemos desarrollar diariamente si realmente queremos alcanzar los objetivos y superar nuestros límites. Trabajar e interiorizar cada una de estas 17 reglas puede facilitarnos el camino para crear valor y hacer la diferencia.