3 Pasos para salir de la zona de Confort
La zona de confort la podemos denominar como un lugar fiable, donde tenemos sensaciones de tranquilidad y seguridad; donde nos sentimos a gusto con lo que tenemos y confiados con el entorno que habitamos
Para crecer como personas en cualquier ámbito de nuestras vidas y tener nuevas experiencias, es necesario salirnos de nuestra zona de confort; esto lo logramos, buscando motivaciones, venciendo nuestros miedos y creyendo en nuestras capacidades. Este camino no es tan fácil como simplemente decirlo, se requiere de mucha valentía, disciplina y enfoque, ya que lo desconocido puede parecernos perturbador y generarnos estrés.
Considero que hay 3 pasos a seguir para salirnos de la zona de confort y dar el salto a nuevas oportunidades:
El primer paso es fortalecer nuestra autoestima y tener la convicción de que somos lo suficientemente capaces de aprender cosas nuevas y de enfrentarnos a situaciones que no son familiares.
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El segundo paso es tener metas claras y enfoque. Para esto necesitamos organizar nuestras prioridades, entender el plan y destinar los recursos necesarios; esto con el fin, de evitar distracciones que nos alejen de la meta.
El tercer paso y quizá el más complejo, es la puesta en marcha de nuestro sueño, aventúranos al camino de lo desconocido y disfrutar del proceso, con sus pros y sus contras. En este punto debemos de ser resilientes, no sacar excusas y apoyarnos en nuestros amigos y familiares para encontrar un equilibrio y no sentirnos abrumados o entrar en la zona de pánico. Debemos entender que estamos en un proceso de crecimiento y muchas veces tendremos fallas, cansancio y ganas de tirar la toalla, pero si recordamos nuestra motivación, la cuál debe ser muchísimo más fuerte que nuestros miedos y no perdemos de vista el enfoque, podemos devorarnos el mundo entero si es lo que deseamos.
Hay una frase que me encanta y que un día dijo Henry Ford “Si crees que puedes, tienes razón. Si crees que no puedes, también tienes razón”. Nuestra mente es muy poderosa y una actitud positiva siempre hará la diferencia. En nosotros esta el control de nuestras vidas y son nuestras decisiones las que nos permiten crecer o las que nos dejan estancados.
Estar en la zona de confort se siente chévere, pero no se compara con la sensación de alcanzar lo que tanto soñamos y que quizá en algún momento veíamos muy fuera de nuestro alcance. El conocimiento es infinito y hoy en plena era tecnológica contamos con miles de recursos para seguir expandiendo nuestra zona de confort.
Gerente en Etiquetas Fevar
2 añosBuenas tardes