∇·7 LinkedIn, un juego de serpientes.

∇·7 LinkedIn, un juego de serpientes.

Bienvenido Divergente, a Inversión diferente.

Hoy hablaré de LinkedIn y espero no hablar más.

LinkedIn es un lugar muy turbio, muy turbio.

En Twitter crían monos y aquí serpientes. ¿Qué quiere decir?

Pues que en Twitter dado el anonimato, tú ya te ves venir a los monitos. En cuanto abren la boca, despejan las dudas.

Sin embargo, LinkedIn es un lugar sombrío. Aquí los monos no sobreviven. Sólo quedan serpientes.

En esta plataforma hay que utilizar la cautela y tener la flauta a mano. No sabes que tipo de cobra te puede estar esperando. El juego va de agarrar una flauta e ir domando serpientes. A los mayores flautistas les llaman Top Voice. Lo de serpientes viene porque las intenciones nunca están claras, se juega mucho al maquiavelismo.

Ejemplo —> Dan like a un post:

  1. Like porque me gusta
  2. Like porque este tío me da likes
  3. Like porque es mi jefe (a ver… habrá que comer, ¿no?)
  4. Like porque el discurso es populista y venga “Vox Populí”
  5. Like porque el discurso es antipopulista y venga a por el voto de los contrarios.
  6. Like porque este tío es inversor y a lo mejor necesito su apoyo…

Hay varios tipos de flautistas, entre vastidores, unos son polis y otros son cacos:

Unos se las dan de moralistas, dictaminan lo correcto, y otros se pasan la ética por el forro.

Aquí, un divergente, es muy liberal. Me he encontrado con polis que con su moralismo han desprestigiado mi contenido, y de igual forma me he encontrado con cacos que han robado/plagiado mis ideas/publicaciones. Y cuando esto pasa, suelo callarme y olvidarlo. No dejo de ser una serpiente más pero, soy una serpiente que va a su bola. Mientrás no me pises, no te muerdo.

Los cacos

La mayor parte de los creadores de linkedIn son unos ladrones de primera. ¿Qué quiere decir? Pues que la originalidad brilla por su ausencia. Más que creadores de contenido, son comentaristas:

  • Inserta vídeo viral que ha visto en Instagram, en Twitter o en Tik-Tok, le pone 1 párrafo y una pregunta al final, y tremendo post. FULL VIRAL.
  • Coge una noticia, le mete un párrafo con una pregunta al final y alé a rular. Lo próximo que sabes es que LinkedIn Noticias te lo ha citado en su hilo…
  • Ve que un tweet ha funcionado… Copy + Paste y listo…
  • Ve que el contenido de un creador de LinkedIn (a veces español, aunque la mayoría americanos) ha funcionado. Pues lo coge, lo maquilla un poco y clic “publicado”.
  • Siempre tienen contenido que publicar y cosas que decir. Normal, no es suyo…

Los polis

Ojo… Ojito con los moralistas. Éstos son más estrictos. Son originales, y les cabrea que el resto no lo sea. Por tanto, se vuelven autoritarios. Se sienten dueños de la plataforma. Son ellos los líderes y habrás escuchado sus mandamientos:

  • Este post quítalo que esto no es Twitter.
  • Ehhh. ¿Es eso un shelfie? ¡Esto no es Instagram!
  • Chico, ¿tu has visto el perfil que me llevas? ¡Que esto es LinkedIn, no un CV andante!
  • ¿Estáis hablando de política aquí? Por favor, eh. Que aquí sólo se habla de trabajo.
  • EH EH EH EH🚨🚨🚨 Mira, mira. Que ese tío está intentando vender. ¡Detenedlo!


Estoy cansado. Estoy cansado de ambos. Es que estamos siempre igual.

Dime, ¿eres de izquierdas o de derechas?

Pues de ninguno. Y de lo que tú seas, pues menos aún.

Qué pesadilla. Todo el rato hay que elegir…

Pues NO. NO voy a elegir. Yo soy divergente. Elijo todo y nada a la vez.

A veces estaré de acuerdo con los de izquierdas, otras con los de derechas y otras con nadie.

No hay ideología más corrupta que la que inhibe el uso de la razón.

Cuando el pueblo se divide, el pueblo es vulnerable porque el pueblo desconfía del pueblo. Y cuando existe esa desconfianza entonces el pueblo se mira entre sí. Y cuando el pueblo se mira entre sí, se abre una ventana. Una oportunidad que permite al líder robar, engañar y aprovecharse.

Lo mismo pasa aquí, en LinkedIn. El que tiene números tiene al pueblo. Y si tienes números y además el tic de LinkedIn entonces tienes el favor del pueblo y el favor del monarca.

Mientras tanto el pueblo se olvida:

  • El pueblo se olvida de darse cuenta de que el creador ha robado el contenido.
  • El pueblo se olvida de elegir sus propias leyes. Permite que el poli se las imponga.
  • El pueblo se olvida de la verdad, la razón y la ética. Se guían por los likes.
  • El pueblo se ve vulnerable. El pueblo es sumiso. El pueblo no quiere expresarse. Tiene miedo a decir lo que el Project Manager o el CEO no quieren que diga.
  • El pueblo se olvida de que convencen al pueblo para que venda a sus compatriotas. Porque el pueblo confía más en el hermano que en el líder. Pero bueno, a esto ellos lo llaman afiliación o marketing multinivel…

Pero, pueblo, POR FAVOR. Que nos conocemos:

No somos el usuario de Instagram

No somos el usuario de Twitter

No somos el usuario de Tik-Tok

Somos un usuario más respetuoso.

Somos un usuario más consciente. Consciente de los problemas, consciente del negocio, consciente de la adversidad…


Que el pueblo decida. Que el pueblo decida lo que está bien y lo que no. Pero, que lo decida el pueblo culto. Un pueblo educado, respetuoso y pensador. No un pueblo manipulado, engañado, enfrentado y aflijido.


Si alguien hace algo malo y tú lo expones sin hacer una mínima investigación, entonces tú eres igual o peor que esa persona. La bondad, a diferencia de la vanidad, se hace en privado y en secreto.

El que dona buscando bondad, lo hace sin que nadie se entere. El que dona buscando vanidad, lo pregona. Lo mismo sucede con el que ayuda, corrige, remedia, auxilia…


Ahora, vamos a exponer algunos hechos:

  • Puedes tener 50K seguidores y facturar 0 euros. Esto es porque los likes no dan de comer.
  • Puedes tener 1000 seguidores y tener un negocio viable en LinkedIn.
  • Es mucho más fácil crecer en LinkedIn que en Youtube. Tal vez sea porque en Youtube se respetan algo más los derechos de autor.
  • Existen grupos de creadores de contenido que se dan likes entre ellos, creadores que compran likes con bots, cuentas falsas, etc.
  • También hay grupos de creadores que se ponen de acuerdo para reportar un post, o para mandar indirectas a un creador...

Mi tarea no es juzgar si las prácticas son buenas o malas. De hecho, me da igual.

El camino del Divergente, consiste en dar herramientas y nociones para que la gente olvide la opinión del Divergente, convirtiéndose así en uno. Es decir, que tengas una opinión diferente, un pensamiento propio y crítico que te aleje de lo esperado por la sociedad.

La verdad es algo mucho más grande que tú o que yo. Y me da igual perder a un inversor o a un cliente, o a un suscriptor, me da igual realmente. Porque sé que si olvido mis principios tal vez no perderé a un cliente o a un inversor, pero sí a mi mismo.

Y puedes ser el tío más rico del mundo que si no estás de acuerdo con lo que eres no vivirás bien. Porque todos somos santos hasta que se interpone el dinero en nuestro camino.

Los políticos son poco más que el reflejo de la sociedad.

Cambiemos nosotros, y los cambiaremos a ellos.

Se despide un Divergente:

Por un LinkedIn justo, libre y diferente.


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Sebastian Millership

Student at Heriot-Watt University

2 años

Interesante concepto🐍🐍

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