∇·7 LinkedIn, un juego de serpientes.
Bienvenido Divergente, a Inversión diferente.
Hoy hablaré de LinkedIn y espero no hablar más.
LinkedIn es un lugar muy turbio, muy turbio.
En Twitter crían monos y aquí serpientes. ¿Qué quiere decir?
Pues que en Twitter dado el anonimato, tú ya te ves venir a los monitos. En cuanto abren la boca, despejan las dudas.
Sin embargo, LinkedIn es un lugar sombrío. Aquí los monos no sobreviven. Sólo quedan serpientes.
En esta plataforma hay que utilizar la cautela y tener la flauta a mano. No sabes que tipo de cobra te puede estar esperando. El juego va de agarrar una flauta e ir domando serpientes. A los mayores flautistas les llaman Top Voice. Lo de serpientes viene porque las intenciones nunca están claras, se juega mucho al maquiavelismo.
Ejemplo —> Dan like a un post:
Hay varios tipos de flautistas, entre vastidores, unos son polis y otros son cacos:
Unos se las dan de moralistas, dictaminan lo correcto, y otros se pasan la ética por el forro.
Aquí, un divergente, es muy liberal. Me he encontrado con polis que con su moralismo han desprestigiado mi contenido, y de igual forma me he encontrado con cacos que han robado/plagiado mis ideas/publicaciones. Y cuando esto pasa, suelo callarme y olvidarlo. No dejo de ser una serpiente más pero, soy una serpiente que va a su bola. Mientrás no me pises, no te muerdo.
Los cacos
La mayor parte de los creadores de linkedIn son unos ladrones de primera. ¿Qué quiere decir? Pues que la originalidad brilla por su ausencia. Más que creadores de contenido, son comentaristas:
Los polis
Ojo… Ojito con los moralistas. Éstos son más estrictos. Son originales, y les cabrea que el resto no lo sea. Por tanto, se vuelven autoritarios. Se sienten dueños de la plataforma. Son ellos los líderes y habrás escuchado sus mandamientos:
Estoy cansado. Estoy cansado de ambos. Es que estamos siempre igual.
Dime, ¿eres de izquierdas o de derechas?
Pues de ninguno. Y de lo que tú seas, pues menos aún.
Qué pesadilla. Todo el rato hay que elegir…
Pues NO. NO voy a elegir. Yo soy divergente. Elijo todo y nada a la vez.
A veces estaré de acuerdo con los de izquierdas, otras con los de derechas y otras con nadie.
No hay ideología más corrupta que la que inhibe el uso de la razón.
Cuando el pueblo se divide, el pueblo es vulnerable porque el pueblo desconfía del pueblo. Y cuando existe esa desconfianza entonces el pueblo se mira entre sí. Y cuando el pueblo se mira entre sí, se abre una ventana. Una oportunidad que permite al líder robar, engañar y aprovecharse.
Lo mismo pasa aquí, en LinkedIn. El que tiene números tiene al pueblo. Y si tienes números y además el tic de LinkedIn entonces tienes el favor del pueblo y el favor del monarca.
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Mientras tanto el pueblo se olvida:
Pero, pueblo, POR FAVOR. Que nos conocemos:
No somos el usuario de Instagram
No somos el usuario de Twitter
No somos el usuario de Tik-Tok
Somos un usuario más respetuoso.
Somos un usuario más consciente. Consciente de los problemas, consciente del negocio, consciente de la adversidad…
Que el pueblo decida. Que el pueblo decida lo que está bien y lo que no. Pero, que lo decida el pueblo culto. Un pueblo educado, respetuoso y pensador. No un pueblo manipulado, engañado, enfrentado y aflijido.
Si alguien hace algo malo y tú lo expones sin hacer una mínima investigación, entonces tú eres igual o peor que esa persona. La bondad, a diferencia de la vanidad, se hace en privado y en secreto.
El que dona buscando bondad, lo hace sin que nadie se entere. El que dona buscando vanidad, lo pregona. Lo mismo sucede con el que ayuda, corrige, remedia, auxilia…
Ahora, vamos a exponer algunos hechos:
Mi tarea no es juzgar si las prácticas son buenas o malas. De hecho, me da igual.
El camino del Divergente, consiste en dar herramientas y nociones para que la gente olvide la opinión del Divergente, convirtiéndose así en uno. Es decir, que tengas una opinión diferente, un pensamiento propio y crítico que te aleje de lo esperado por la sociedad.
La verdad es algo mucho más grande que tú o que yo. Y me da igual perder a un inversor o a un cliente, o a un suscriptor, me da igual realmente. Porque sé que si olvido mis principios tal vez no perderé a un cliente o a un inversor, pero sí a mi mismo.
Y puedes ser el tío más rico del mundo que si no estás de acuerdo con lo que eres no vivirás bien. Porque todos somos santos hasta que se interpone el dinero en nuestro camino.
Los políticos son poco más que el reflejo de la sociedad.
Cambiemos nosotros, y los cambiaremos a ellos.
Se despide un Divergente:
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Student at Heriot-Watt University
2 añosInteresante concepto🐍🐍