Agilidad emocional y flexibilidad

He tenido la oportunidad de disfrutar de un podcast antiguo de una conversación entre Arthur C. Brooks y Bruce Feiler . En este diálogo, profundizan el tema de las "transiciones" en la vida, basándose en la investigación de Feiler. Resaltan la importancia de los cambios de estado en diversas áreas de la vida como elementos clave para afrontar eventos dolorosos y salir fortalecidos. Según Feiler, el 90% de estas transiciones son exitosas y positivas para las personas.

La hipótesis de Feiler se fundamenta en la idea de comprender y dominar el cambio para superar eventos difíciles. Destaca la no linealidad de la vida, describiendo los frecuentes "terremotos de vida" que ocurren cada 12 a 18 meses como disruptores significativos. Identifica tres fases en las transiciones: la despedida del viejo yo, el punto medio desordenado y la revelación del nuevo yo. Enfatiza la importancia de adaptarse a estas fases, así como la de aceptar emociones, adaptarse y abrazar el proceso.

Este estudio no solo aporta valiosas reflexiones sobre la vida personal, sino también tiene eco en el actual escenario laboral caracterizado por disrupciones tecnológicas. Para las personas, comprender y dominar el cambio es crucial en un entorno laboral dinámico.

Las personas experimentan "terremotos de vida" comparables a los cambios tecnológicos frecuentes. La propuesta de una vida no lineal refleja la naturaleza de la evolución tecnológica, donde la adaptación constante se convierte en esencial. La habilidad para enfrentar transiciones profesionales, se convierte en un activo valioso para aquellos que deben ajustarse a nuevos paradigmas y modelos de negocio.

La creatividad en la fase del "desordenado medio" se vincula con la innovación necesaria en la disrupción tecnológica. Aquí, la presión del conformismo puede limitar la innovación, y la capacidad de las personas para salir de su zona de confort y abrazar nuevas estrategias se vuelve esencial.

Aceptar las emociones y adaptarse se traduce en una llamada a la agilidad emocional y flexibilidad en la estrategia laboral. En el actual entorno, las personas deben abrazar la incertidumbre y adaptarse rápidamente a las demandas cambiantes del mercado, algo fundamental para la supervivencia y el éxito.

La idea de que la vida lineal no existe encuentra eco en la realidad de las personas, ya que las trayectorias de carrera y los métodos tradicionales pueden volverse obsoletos rápidamente. La sugerencia de repensar y actualizar constantemente la historia de vida se traduce en una adaptación continua de habilidades y enfoques de trabajo.

En resumen, la conversación sobre transiciones de vida proporciona lecciones valiosas para las personas en la era de la disrupción tecnológica. La adaptabilidad, la creatividad en la innovación, la agilidad emocional y la disposición a abandonar modelos obsoletos son esenciales para mejorar los niveles de felicidad en un entorno laboral caracterizado por cambios constantes y desafíos imprevistos.