Apaga el ruido, enciende el poder del silencio

Pleno verano. Llegas a esa piscina llena de gente donde hay el bullicio propio de la plena temporada. Te metes despacio en la piscina. Primero los pies, luego poco a poco todo el cuerpo y finalmente metes la cabeza bajo el agua y lo escuchas alto y claro: el silencio.

De repente, todo el ruido que había a tu alrededor desaparece. Desaparecen los gritos de los niños jugando, de los mayores que hablan en voz alzada e incluso ese ruido de la naturaleza de fondo. De pronto, la nada. Una paz que no sabes describir se apodera de ti, y tras unos segundos tomas conciencia de lo que es: el silencio.

El silencio, ese gran ausente ya en nuestras vidas que tratamos de acallar con una hiperactividad continua y que nos incomoda con su presencia en algunos momentos. Y sin embargo, es el silencio también un lujo supremo al que a veces necesitamos volver para reconectar con nosotros mismos.

Porque el silencio tiene un enorme poder que a veces menospreciamos.

Apaga el ruido, enciende el silencio

El ruido es una distracción (*1) y aunque  a veces, creas que eres capaz de aislarte en tu pequeña burbuja, está afectando negativamente a tu concentración.

Incluso el denominado “ruido blanco”, es una distracción inconsciente para tu cerebro, y tenerlo de fondo es una sobrecarga de estímulos innecesarios que seguramente utilizamos porque no podemos soportar el absoluto silencio.

Cuando el silencio se hace ensordecedor

Sin embargo, en una sociedad hiper cargada de estímulos, el ruido se mete en nuestras vidas casi de forma irremediable. Llegamos incluso a normalizarlo y consigue que incluso lleguemos a temer al silencio. En una sociedad como la nuestra, nos incomoda más el silencio que el ruido.

El silencio, en determinados momentos, puede llegar a ser incómodo y volverse ensordecedor.

Si estamos solos, rellenamos los silencios con música o cualquier otra distracción para no escuchar nuestra voz interior. Acallamos la introspección rellenando el silencio con sonido.

Si estamos en compañía, aún tememos más al silencio. La incomodidad que nos genera estar junto a alguien que no dice nada, la vivimos peor que estar junto a alguien que alza la voz mucho más de lo necesario. Sabemos que estamos a gusto con una persona cuando los silencios con ella dejan de incomodarnos. Dime cuánto silencio compartes con alguien sintiéndote cómodo y te diré cómo de cercanos sois.

El silencio como super poder

Que el silencio reduce el estrés (*2) o promueve el bienestar emocional no es sorpresa para nadie.

Pero que además es un poderoso aliado en momentos de creatividad (*3), concentración, negociación, presentación o ante conversaciones difíciles, es algo que no tenemos presente tan a menudo.

Usa el silencio

Aprender a utilizar el silencio de forma consciente, en lugar de rellenar los silencios con palabras vacías, puede ser un poderoso multiplicador de resultados en muchos ámbitos.

El súper poder del incómodo silencio en una conversación

El silencio en una conversación, en especial en una conversación difícil,  muestra empatía, permite practicar la escucha activa y transmite respeto y serenidad.

Pero hay 3 momentos clave en los que tiene un uso muy poderoso:

• Cuando la persona ha dicho algo fuera de lugar, hiriente o que no te ha gustado, deja unos segundos de silencio y permite que la otra persona reflexione lo que acaba de decir. Al no reaccionar directamente a sus palabras si no dejar que el silencio se apodere del ambiente, verás cómo la otra persona baja su nivel de agresividad y quizás llega incluso a disculparse o a justificarse por lo que acaba de decir.
• Cuando la persona te interrumpe, en lugar de volverla a interrumpir y entrar en una espiral de frases cortadas, guarda silencio, y verás que en muchas ocasiones, pasados unos segundos la persona se dará cuenta de que te ha cortado y te devolverá al palabra.
• Y la más especial, cuando haces una pregunta complicada y esperas una respuesta sincera. Deja que la otra persona responda y cuando haya terminado espera unos segundos más, quizás incluso hasta 10 aunque te parezcan una eternidad. Verás que la persona, por no sostener ese incómodo silencio acabará diciendo algo que es a fin de cuentas, la verdad más profunda de lo que aún no te ha dicho. Es lo que se conoce como “la última gota”, y es la respuesta más sincera que la persona podía darte y sale sólo después de haber dejado un silencio incómodo. Se puede decir que rellenamos el silencio con la más absoluta verdad.

El poderoso estruendo del silencio en una presentación

Los silencios en las presentaciones son un juego pirotécnico que sólo los ponentes más experimentados saben utilizar.

Reconoces a un novato presentando cuando no deja ni un solo espacio de silencio y suelta un discurso del tirón, en modo “metralleta”, sin pausas ni cambios en el volumen ni en la entonación.

Prescindir de los silencios en una presentación, es como ver una buena película sin banda sonora, quizás se entiende, pero le falta algo para ser sublime.

Lo silencios generan intriga, permiten cambiar de tema con una transición suave y dan ritmo a una presentación, pero hay 3 momentos en particular en los que elevan el resultado:

• Cuando lanzas una pregunta o un dato relevante, deja unos pocos segundos para que la audiencia procese lo que acabas de decir o piense su propia respuesta a la pregunta que acabas de lanzar. Los silencios tras una pregunta permiten que la audiencia que se haya podido ausentar mentalmente por unos segundos, vuelva reconectarse con tu ponencia, porque las preguntas son un excelente punto para volver a meterte en la explicación en un momento en el que el tema puede captar tu atención.
• Cuando quieres enfatizar un punto o generar impacto, deja por lo menos 3 segundos antes de seguir y permite que ese silencio sea el espacio mental en el que las personas retienen el dato que quieres que se lleven de tu presentación. Es como si les dieras un momento para darle al botón de “grabar” antes de pasar al siguiente argumento.
• Cuando quieres generar expectativa o misterio, antes de decir algo interesante o algún dato interesante que pueda captar aún más la atención de los asistentes, deja unos segundos de suspense, captarás automáticamente la atención de la gente que quiere resolver la duda y busca la gratificación mental de resolverla. ¿Cuántas veces nos hemos quedado a ver el final de una mala película sólo por saber cómo acaba? La mente de las personas no se queda tranquila si no sabe cómo acaba algo y tú juegas con eso.

El silencio enigmático en una negociación

Se dice que los mejores negociadores son aquellos capaces de ocultar sus intenciones. Son los conocidos como “poker face” y son auténticos artistas del silencio, que lejos de rehuirlo, lo utilizan como nadie particularmente de 3 formas:

• Durante toda la negociación, intercalan silencios de forma conveniente para mostrar fortaleza emocional y control. Con eso mandan una señal a su oponente que dice: “Puedo estar en esta situación el tiempo que haga falta”.
• En momentos de tensión y conflicto, mostrando que pueden guardar la calma en las situaciones más adversas y que los juegos de alzar la voz o subir la agresividad no van a conseguir desestabilizarlo. En un momento de tensión, después de un argumento de la otra parte prueba a decir "Eso es interesante", ciérralo con unos segundos de silencio y comprueba el efecto.
• No respondiendo de forma inmediata a una pregunta o a una potencial oferta, utilizando lo que se denomina un “silencio estratégico” para que la otra parte revele más información o incluso para que haga una oferta más favorable.

El silencio como nuestro mejor amigo

Puede que por tu trabajo no te encuentres antes potenciales conversaciones difíciles, presentaciones o negociaciones, pero aún así el silencio puede ser muy útil para ti.

• Parar mejorar tu concentración (*4) reduciendo tus distracciones y aumentando tu productividad.
• Para superar tus momentos de duelo el silencio es fundamental para volver a poner en perspectiva lo importante y reconstruir nuestros planes de futuro tras una pérdida importante.
• Y lo más importante, para que se convierta en tu mejor aliado de crecimiento. Si quieres convertirte en la persona que mejor te conoce, el silencio tiene que ser tu mejor amigo. Date espacios para pensar, para hacerte autocrítica y utiliza el silencio como tu mejor herramienta para practicar la autorreflexión y el autoconocimiento. Las personas que más crecen, personal y profesionalmente, es porque previamente se hacen las preguntas adecuadas antes de pasar a la acción. Conocerte y saber en qué puedes mejorar y qué tienes que seguir explotando, es lo primero para tomar las mejores decisiones y acciones en tu vida, y sin momentos para pensar en silencio, es muy difícil que consigas eso.

Burbujas de silencio

Recuerda la sensación del silencio al zambullirte completamente en una piscina, o quizás en el mar, observa como las burbujas de silencio suben a la superficie y se funden con el ruido e imagínate a ti mismo sintiéndote cómodo con los incómodos silencios.

Cuando aprendas a provocar el silencio intencionalmente en lugar de rehuirlo, estarás comenzando a sacarle partido al súper poder del silencio.

Siempre es un buen momento para practicar.

Y ahora… shhhh… silencio.

#desarrollopersonal #LaPlumaGris #management #rrhh

Las opiniones expresadas son a título personal y no en nombre de Danone

Referencias:

(*1) Según un estudio de la Journal of Applied Psychology, el ruido de fondo afecta negativamente a la capacidad de concentración y la productividad en tareas cognitivas complejas.

(*2) Según el Journal of Environmental Psychology una exposición con bajos niveles de ruido, reduce los niveles de cortisol, hormona del estrés y según un estudio realizado por el Workplace Health Management, los trabajadores con acceso a lugares tranquilos para descansar y recuperarse reportaron niveles más bajos de estrés.

(*3) Según Psychological science

(*4) Según el Journal of Environmental Psychology, el silencio mejora la atención sostenida y la memoria de trabajo.