Así conseguí creer en mí.

Esto ha cambiado mi vida.

Puedes pensar que exagero, pero así es.

Y también podría cambiar la tuya.

Antes de que cualquiera en el mundo lo crea, tenía que creerlo yo mismo. 

No hay razón para tener un plan B porque te distrae del plan A. 

Es muy simple: este plan es por lo que creo y por lo que estoy dispuesto a morir. 

No existen más opciones.

No importa lo bueno que sea en cualquier cosa, si no tengo disciplina, no soy nadie ni nada. 

Sin disciplina me rindo ante el más mínimo desafío. 

La disciplina es hacer lo que odio hacer, pero hacerlo como si lo amara.

Todos pasamos por momentos difíciles o tenemos contratiempos. 

Pero esos momentos no son parte del viaje: son el viaje.

Son el puto viaje mismo.

Por eso a todos nos suceden cosas en tu vida, para que experimentemos y crezcamos. 

Sí, lo “malo” también.

Porque son los momentos difíciles los que construyen tu fe más fuerte.

Cuando suena la alarma y es hora de levantarme para ir a entrenar, estoy cansado, pero tengo que luchar un día más. 

Maldigo el calor de la cama, la comodidad de la almohada. 

Combato la tentación de la debilidad. 

Me levanto y voy a por ello, dando todo lo que tienes. 

Si pierdo, al menos lo intenté. 

Fracasaré 10 veces más que alguien que se quedó preguntándose qué hubiera pasado si lo hubiera hecho.

Por eso no existe persona en este mundo que haya perdido la fe y logrado lo que se propuso. 

Si fracasas, pero siempre te levantas, es solo cuestión de probabilidades. Vas a conseguirlo.

Cuando encuentro un miedo que nubla mi camino, me hago esta pregunta: 

¿Este miedo me creará o me destruirá? 

Me merezco todo por lo que estás pasando porque prefiero ser mejor mañana en lugar de hoy.

Reflexiona sobre esto: 

Tienes la capacidad física y mental para contribuir con algo valioso al mundo, y prefieres sentarte en el sofá y desperdiciar día tras día. 

Hay personas que no tienen opción, confinadas a una realidad sin posibilidad de cambio. 

Sin embargo, tú tienes la audacia de quejarte y ni siquiera ves lo afortunado que eres.

Una vez que comienzas a soñar con lo que puedes llegar a ser, el impacto que puedes tener y la alegría que te brindará, comienzas a diseñar un propósito increíble para tu vida. 

Puedes empezar hoy mismo a reflexionar, a hablar sobre ello y a diseñarlo. 

Diseña ese plan que te convertirá en esa persona que deseas ser.

¿Cómo será tu vida si no lo haces? 

¿Qué sentirás en 1, 5, 10, 20, 30 años si no sigues esa pequeña visión que tienes en tu corazón? 

Te puedo prometer que ese sueño no se irá. 

La mayoría de la gente sueña con hacer algo algún día, y porque solo sueñan, nunca se convierte en realidad.

Escribe esos objetivos, esos planes, ese sueño. 

Y persíguelo como si tu vida dependiera de ello…

Porque realmente tu vida depende de ello. 

Una vida que vale la pena vivir es una vida que vale la pena documentar.

A menudo, en la vida, volvemos a viejos patrones y dudas. 

Pensamos que no somos los mejores, que la gente no creerá en nosotros. 

Pero cambiar tu vida significa cambiar las preguntas que te haces a ti mismo.

La única limitación de una persona está en su desarrollo y uso de su imaginación. 

La mente puede producir cualquier cosa que pueda concebir y creer. 

Si tu imaginación puede verlo, puede manifestarse en este mundo.

Puede que estés en una temporada difícil ahora mismo, donde el mundo trata de mentirte, de decirte que tu vida ha terminado. 

Pero no puedes confiar en tus circunstancias, tienes que confiar en tu fe.

El miedo es autoimpuesto y puedes destruirlo.

Enfrenta tus miedos y descubrirás que no son tan grandes y que esa energía negativa del miedo se transforma en confianza.

Porque tú eres el capitán de tu propia vida. No le des el control a nadie más.

PD: Recibe píldoras diarias para eliminar las creencias que frenan tu éxito y empezar a ganar más dinero, tranquilidad, propósito y libertad en tu negocio apuntándote gratis en abundanciaempresarial.com.