¡BAJADA DE PRECIOS!
La mayoría de las grandes empresas dedicadas al comercio incluyen en su propaganda los precios bajos como reclamo para los consumidores. Pero debemos pararnos a pensar si los precios bajos son siempre convenientes y por qué algunos de ellos son tan bajos.
Cuando veo en un gran supermercado el café a 1, 50 euros el 1/4 Kg o las ofertas de camisetas "2 x 3 euros" en una gran superficie, a menudo me pregunto qué habrá detrás de precios tan bajos, y sospecho que nada bueno, al menos nada bueno para los pequeños agricultores o ganaderos, para los trabajadores del sector textil o para quienes trabajan en cadenas de montaje en ciertos países. No quiero ni pensar ya en el tratamiento de residuos tóxicos o peligrosos.
La situación de semi-pobreza de una gran parte de la población europea y americana, en parte ocasionada por la crisis, propicia y fomenta las prácticas que conlleva la producción a bajo coste: dado que el poder adquisitivo es mínimo algunos precios también deben serlo para que dichos sectores de población puedan comprar, impulsados por una publicidad generalmente engañosa. Así, además, se mantiene la semi-esclavitud en sociedades del primer y tercer mundo, para regocijo de algunos que amasan fortunas sin demasiados escrúpulos.
Al axioma que exhibe el liberalismo, que dice que los mercados se auto-regulan a la perfección por la "ley de la oferta y la demanda"se oponen los "diez principios de comercio justo", que, como mínimo, deberían hacernos reflexionar.