Buscar trabajo como no nos han enseñado.
Buscar trabajo se ha convertido en una actividad, en muchos casos, desalentadora. Pese a que tenemos delante cada vez más plataformas que nos facilitan el cometido y nos dan visibilidad de las oportunidades, terminamos frustrándonos al ver que por una misma posición son capaces de aplicar miles de personas. Estas nuevas “facilidades” nos hacen también acomodarnos, pues basta con sentarte en el sofá, abrir una app, ver lo que hay y si nos suena bien, darle a “Apply”.
Sin embargo, cuantas veces escuchamos o decimos expresiones del tipo “No me llama nadie”, “he mandado mil CVs”, “No sé ya qué hacer”, con el componente de pérdida de esperanza, de energía y, en consecuencia, de autoestima que ello conlleva. Esto hace que en muchas ocasiones acabemos eligiendo lo primero que nos sale, dando las gracias por ello y quitándonos un peso de encima, aunque no sea ni de lejos a lo que inicialmente aspirábamos.
Escribo este artículo porque creo de verdad que podemos romper con esta dinámica y aplicando algunas técnicas (cada uno evaluará cuál le sirve más) lograr destacar en el entorno competitivo y acercarnos lo más posible a nuestros deseos reales de desarrollo profesional. Ni pretendo dar lecciones ni pretendo que nadie tome esto cono ciencia exacta, sólo despertar las ganas de replantearnos la manera en la que acudimos al mercado.
Estructuremos el post en 3 puntos:
- ¿Qué quiere el mercado?
- ¿Qué quiero yo y qué valor puedo aportar al mercado?
- ¿Cómo puedo hacerlo llegar sin morir en el intento?
¿Qué quiere el mercado?
Nunca me ha gustado escuchar “Las empresas lo que quieren es…”, porque las empresas están compuestas por personas, cada persona es un mundo y tu interlocutor puede ser abierto, cerrado, rígido, flexible, empático, antipático… de todo. Por tanto, tiendo a huir de esto. Si queremos basarnos en esta premisa, yo lo resumo en una frase:
Las empresas lo que quieren es que les aportes valor.
Y si es desde el minuto 0, mejor.
A lo largo del artículo exploraremos cómo podemos aportarles valor de manera específica pero es bueno que vayamos asimilando que vivimos en un entorno que está cambiando, evolucionando a una velocidad de vértigo y las realidades de los negocios, también. Hoy cualquier nuevo player innovador, aprovechando las ventajas de las nuevas tecnologías, puede hacer tambalear una industria entera, es por ello que te animo a tomar nota de estas características transversales cada vez más imprescindibles:
- Versatilidad y agilidad. Para ser capaces de realizar roles distintos en menos tiempo.
- Creatividad. Para aportar soluciones rápidas a realidades cada vez más complejas.
- Capacidad de interpretación. Un entorno cada vez más automatizado y con sobredosis de datos requiere que sepamos bien extraer insights que nos hagan tomar las mejores decisiones posibles.
- Adaptabilidad al cambio. Trabajos por proyectos, entornos distintos, necesidades nuevas que se van generando nos necesitan sin miedo.
- Curiosidad y aprendizaje continuo. Las nuevas tendencias surgen de manera recurrente y debemos estar al día para tratar de anticiparnos en la medida de lo posible a lo que pueda impactar en nuestro entorno.
- Co-Creación en Equipo. Retroalimentarnos en el conocimiento que vamos adquiriendo por múltiples vías y ponerlo a disposición de objetivos comunes. Coge más peso que nunca.
- Humildad. La más importante. Hoy sabemos mucho, mañana no sabemos nada.
¿Qué quiero yo de verdad y cómo puedo aportar valor al mercado?
1º paso, te animo a preguntarte
- ¿Qué te gusta hacer? ¿Qué sientes que haces bien y te lo reconocen? ¿Qué cosas te mueven sin necesidad de que te las pidan? En tu vida en general, personal y profesional.
- ¿Qué sectores/entornos te atraen especialmente? Ponlos por escrito y visualízate haciendo X cosas sintiéndote bien y alegre en el momento en el que las haces.
- Reflexiona por ejemplo: “Siento que soy ocurrente, que tengo ideas que me salen con facilidad y gustan o soy buena en relaciones sociales, me es fáicl tratar con la gente, soy organizada y cuido los detalles a la perfección, me gusta analizar, entender el porqué de lo que hacemos…”
Te sugiero que en este paso pongas foco en lo competencial más que en la función específica. Visualízate en un tipo de trabajo y en un tipo de entorno concretos.
Si miramos a quienes trabajan contentos como gente afortunada a los que les ha tocado la lotería, estaremos asumiendo una perspectiva del trabajo asociada siempre a la obligación. Y yo me pregunto ¿Qué vínculo vamos a tener con algo a lo que sólo asociamos a obligación? ¿Cuánta energía vamos a perder por el camino con la consiguiente disminución de rendimiento frente a lo que potencialmente podríamos dar? Cómo eres más valioso para la empresa, ¿identificad@ o sacrificad@? (las empresas tienen importante responsabilidad pero hoy centrémonos en nosotros mismos).
¿Cómo puedo lograr hacer llegar mi valor sin caer en el intento?
Aquí voy a dejar una serie de prácticas algo disruptivas y puede que políticamente incorrectas, pero en las que creo firmemente y que en más de una ocasión me han ayudado.
Tenemos 2 caminos.
- Aplicar a lo que salga y rezar.
- Pelear, de manera práctica y con acciones concretas, por lo que de verdad deseas.
Qué puedo hacer VS Qué he hecho
Si sientes que en tu trayectoria no has tenido la oportunidad de hacer cosas que de verdad sientes que haces bien (una vez has identificado tus gustos, virtudes y entornos que te mueven) y por tanto tu CV no me dice quién de verdad eres… ¡Cuéntalo tú!. Para ello identifica y pon por escrito:
- Listado de Sectores donde te gustaría trabajar.
- Listado de empresas de cada uno de los sectores donde te gustaría trabajar.
- Identificar en LinkedIn responsables de las áreas de negocio en las que crees que puedes aportar valor.
- Agrégalos. Si no te acepta Ana, te aceptará Juan.
GO!
En ese momento, gracias a esta herramienta, tendrás la gran oportunidad de hablarle de tú a tú al lugar donde quieres estar (¿No es estimulante?) y decirle, no que te haría mucha ilusión trabajar allí, no que estarías muy agradecida si tienes la oportunidad, no que sería un placer… No. Le dices con humildad pero con convicción (ojo al equilibrio entre seguridad y prepotencia, cuidado con eso) que tienes capacidad de aportar valor a su proyecto. Que sabes de que va su área de negocio, cómo está el entorno competitivo, muéstrale que no sólo tienes pasión sino que tienes conocimiento y capacidad para contribuir a hacer más grande su área de influencia. Échale creatividad a las palabras y ten tacto. Despiértale las ganas de conocerte. Aunque no haya vacantes.
Genera contenido ad hoc a lo que quieres trabajar:
En mi caso, quería trabajar en Recursos Humanos y nunca lo había hecho, sin embargo me consideraba con inquietudes y sensbilidad para hablar de ciertos aspectos de este sector que verdaderamente me apasionan. Empecé a escribir en LinkedIn reflexiones (perdamos la vergüenza), a compartir contenido que suscite interés y agregando a profesionales del sector que puedan leer/compartir lo que publicas y al mismo tiempo tú aprender de ellos.
¿El riesgo? Que el contenido no sea valioso. Hay que ser valiente. Para alguien lo será, seguro. Confía en ti.
Haciendo balance:
- Si has identificado los sectores que te atraen.
- Si has identificado las empresas cuyos proyectos/productos los sientes como parte de tu vida.
- Si has identificado los aspectos de tu personalidad que unidos a tu trayectoria y conocimientos te permiten ser valios@ para ese rol que estás peleando…
- Si has identificado los interlocutores a los que poder transmitir todo lo que te ves capaz de hacer con convicción, pasión y humildad.
- Si has generado contenidos ad hoc al entorno en el que quieres participar y así equilibrar una posible falta de experiencia...
Habrás adelantado muchísimos pasos en el objetivo de alcanzar un lugar donde verdaderamente puedas sentirte feliz.
Delegado de ventas RADO watches España
5 añosMe ha encantado a ver si nos conocemos y puedo plasmar lo que siento muchas gracias
Sales Account Executive Hunter | Ex Salesforce & Glovo |
6 añosReplanteémonos la manera en la que nos acercamos a las empresas, identificando los puntos donde podemos hacerlas mejores,partiendo de un autoconocimiento honesto, pensando sin escudos de manera aspiracional y a partir de ahí ser proactivos y creativos. Apunta a las estrellas y llegarás a la luna. Lo mismo hasta nos sorprendemos. Un abrazo
Auxiliar Judicial en Juzgados de Primera Instancia de Familia (Madrid)
6 añosGran artículo Pepo!!
Sales Account Executive Hunter | Ex Salesforce & Glovo |
6 añosMuchas gracias. Yo mismo me lo estoy aplicando en este momento.