¿Cómo cultivar una mentalidad financiera?

Mentalidad financiera no significa gastar sin responsabilidad, ni tampoco es lógico pensar que de la noche a la mañana multiplicarás tus ingresos. La mentalidad financiera tiene más que ver con tus creencias y tu sentir, porque de eso dependen también tus acciones.

Mentalidad financiera son nuestras actitudes e ideas sobre las finanzas, y la forma en la que nos relacionamos con el dinero. Una mentalidad positiva, en ese caso, nos ayuda a concebir a nuestros bienes como un medio para alcanzar nuestras metas y sueños; mientras que por otro lado, una mentalidad financiera débil puede llevarte a sentir ansiedad o temor respecto a esta área de tu vida.

Hasta ahora, ¿con cuál te identificas más? Si tu caso es que te encuentras a ti misma en la segunda opción, no te preocupes, que aquí abajito te cuento cómo puedes accionar para cambiar tu realidad.

Todo comienza con un verbo

Como ya te he comentado en el pasado, tus creencias moldean tu realidad. Si piensas que eres capaz de lograr algo, terminarás haciéndolo. Si piensas que no eres suficiente, te convencerás de que no tienes lo necesario incluso si no es el caso. Es algo bastante sencillo.

Ahora, ¿Qué crees que pasa en tu mente que afecta tus finanzas? Te cuento resumidamente: sientes que no mereces eso que tanto dices que quieres. Suena contradictorio, pero es la realidad.

Cuando esto sucede, dices que quieres tener más dinero para viajar, y cuando lo tienes, prefieres ocuparlo en cosas “más importantes”. Dices que quieres consentirte con tu comida favorita, y te sientes culpable apenas la pagas. ¿Ves lo que digo? Aunque parezca descabellado, es la realidad de muchas personas. Y es algo que muchas otras no terminan de entender.

El paso más importante para mejorar tus finanzas no es cambiar de empleo, no es invertir, no es ahorrar (aunque estas dos son bastante ventajosas). El verdadero paso infalible para el bienestar financiero es desaprender y reprogramar tus ideas, para reemplazar esos pensamientos que te limitan por otros que te recuerden que mereces eso que sueñas, y que eres capaz de conseguirlo de forma fácil, fluida y feliz.

¿Cómo puedes trabajar tu mentalidad financiera?

Comienza por aceptar que como todo en la vida, construir una mentalidad financiera es un proceso que lleva tiempo, y que puede lucir distinto para cada persona. 

Ahora que ya sabes esto, también es importante que descubras de dónde viene tu actitud actual. Explora tus creencias sobre el dinero: ¿de dónde vienen? ¿Quién te las enseñó? ¿Cómo te están condicionando? Este es un ejercicio de autoconocimiento bastante poderoso que te ayudará a ganar claridad para poder avanzar.

También, es necesario que trabajes en tu autoestima. La forma en la que te percibes y te relacionas contigo misma tienen todo que ver con tus finanzas y la manera en que gestionas tu dinero. Pues, más allá de tus circunstancias, es tu concepción de ti lo que define cómo llevas esta área de tu vida: si tienes una buena autoestima, te creerás merecedora de tus bienes, y si tu autoestima es baja, ninguna cantidad podrá compensar esta falta de amor propio.

Finalmente, toca cambiar tu narrativa, dejar de lado las excusas y comenzar a contarte una historia distinta. Toma todas esa creencias, pretextos y concepciones que te están limitando y reemplázalas con nuevos pensamientos. Lo que dices, lo crees; y lo que crees, lo creas. Por eso, es mejor llenar tu mente con afirmaciones e ideas positivas, que te recuerden que eso que quieres sí es posible.

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