¿Cómo le pongo precio a mi producto?
Esta es una de las principales consultas que nos traen los emprendedores: cómo fijar el precio del producto o servicio que comercializan.
“Cuando me preguntan el precio no se que decir. Creo que si pongo un precio «elevado» no me van a comprar y si mi precio es muy bajo, pueden pensar que lo que vendo no es de buena calidad y terminen no comprándome.”
Te decimos que existen varias formulas de fijación de precio, nosotros te compartimos el modelo que nos resulta más generador por varios motivos. Por ejemplo, éste modelo:
Asegura que puedas recuperar tu inversión al producir (ya sea en serie o de manera individual).
Asegura la perdurabilidad de tu negocio: que puedas recuperar el valor mínimo que necesitas para seguir produciendo.
Te muestra el nivel de detalle con el que creemos saludable gestionar: te mantiene atento a que aspectos de la producción observar permanentemente, calculando los costos de producir enfocado en la rentabilidad.
Te va a permitir seguir en la búsqueda de materia prima y de proveedores que mejoren tu inversión actual, sin resignar calidad: mejorar el precio de tu materia prima.
Lo primero que debes de tener en cuenta es el COSTO TOTAL. El costo total podes calcularlo por unidad de producto o por producción total.
Este se conforma por la suma de todos los costos fijos (CF) reflejados en los gastos que no se modifican conforme produzcas mayor o menor cantidad (alquiler de un espacio, gastos de Internet, etc.) y los costos variables (CV) que son los gastos que se modifican según el nivel de producción (materia prima, packaging, etc.).
COSTO TOTAL (CT): Suma de los costos fijos (CF) y de los costos variables (CV)
CT = CF + CV
PUNTO MUERTO: hace referencia al volumen de ventas con el que sólo cubrís gastos fijos y variables. Es decir, las unidades de producto que necesitas vender para auto-sustentar el emprendimiento, pero en el que no obtenés pérdidas, ni ganancias. “Cubrís gastos”.
PRECIO MINIMO: Se desprende de la fórmula de COSTO TOTAL, es el precio por debajo del cual no podes vender. Si lo hicieras, no cubrirías los costos totales y no podrías seguir produciendo, a excepción de que desees invertir de otra fuente que no sea el propio negocio (financiación externa).
Esta práctica de vender por debajo del precio mínimo, puede ser adoptada por aquel emprendedor que recién comienza su camino y desea que conozcan la calidad de su producto. Esto lo asiste a posicionar su marca dentro del mercado.
Ahora bien, te recomendamos tener precaución con utilizar esta estrategia por un lapso prolongado de tiempo, ya que cuando quieras nivelar el precio a tu ganancia deseada podés correr el riesgo de que tus clientes te abandonen como opción y salgan a buscar nuevas promociones.
Te sugerimos que diseñes cada paso financiero que vas a dar. Sobre todo, en tu estrategia de precio y descuentos. Preguntate siempre: ¿cuál es el objetivo final de tomar esta decisión estratégica?
Retomando el concepto de “competencia” es que te decimos: el último punto a tener en cuenta es el de “beneficio deseado” y este se encuentra sumamente ligado a quien vos elijas como competencia. Si, si, porque vos elegís contra quienes competir dentro del mercado. Mientras más conozcas a tu competencia, más posibilidad de ganar clientes obtendrás.
Te invitamos a que listes a tus competidores. Averiguá cuáles son sus precios y cuáles son sus diferenciales. Y que conectá con los tuyos.
¿Qué hace que un cliente elija tu producto contra otro que cuesta lo mismo?
¿Qué tiene tu producto como valor agregado?
En el proceso de fijación de precio se debe incorporar el beneficio deseado o porcentaje de ganancia, de la siguiente manera: precio de venta al público = Costo Total + Beneficio deseado
P.V.P. = CT + Beneficio deseado
La calidad es algo que también debes vender. Si producís utilizando materia prima de una mayor calidad que tu competencia y a un precio más bajo que ella: ¡promocionalo! Vendelo como un diferencial, mostralo en tus acciones de marketing. Creemos que los clientes no siempre se ocupan proactivamente de conocer con que esta hecho cada producto que adquieren. Distinto es que la marca misma se lo informe a través de su estrategia de marketing…
Desde allí, el BENEFICIO DESEADO lo fijas vos.
¿Cuanto querés ganar?
¿Cuál va a ser tu estrategia con respecto a esto?
¿Cómo vas a hacer para asegurar el porcentaje de beneficio deseado en el futuro?
Y entonces: ¿cuánto cuesta tu producto?