¿Cúal es la diferencia entre una ICO y una STO?

Nos encontramos en plena era de cambio e innovación, por ello son numerosos los sectores que cada día implementan en sus empresas las últimas novedades tecnológicas. Las criptomonedas y la tecnología blockchain han supuesto un antes y un después a la hora de entender la recaudación de capital para las empresas. 

Conceptos como ICO, BTC o STO han revolucionado el sector financiero abriéndolo al mercado hacia nuevos horizontes y democratizado las diferente inversiones de la población, que, hasta hace unos años, contaban con sistemas tradicionales de lo más desfasados. 

Y en medio de todos estos términos nos preguntamos ¿son todos los mecanismos iguales? ¿Qué los diferencia? Si te suenan las siglas que comentamos anteriormente pero todavía hay matices que se te atragantan, continúa leyendo este post. 

¿Qué es una ICO?

Las ICO (Initical Coin Offering) o lo que es lo mismo Oferta de Moneda Inicial fueron las primeras en aparecer en el mercado y supusieron un antes y en después ya que aportaron mucha utilidad en el sector. Monedas como Ethereum, NEO o IOTA comenzaron su andadura como ICO y gracias a ello consiguieron obtener los fondos suficientes para desarrollarse y convertirse en los proyectos que conocemos hoy en día.

Este mercado, a pesar de los esfuerzos de las diferentes entidades del sector, no se encuentra muy regulado por parte de los gobiernos. Los desarrolladores de estos proyectos no deben cumplir ningún tipo de marco regulatorio o ceñirse a un protocolo, únicamente deben preparar un White Paper que integre todos los detalles importantes acerca del proyecto; aspectos financieros, publicidad, desarrollo tecnológico o la hoja de ruta que encauza a la ICO. 

Cuando un inversor decide introducirse en este mundo, los participantes adquieren un token de forma temprana. Dicha “moneda” tendrá una utilidad concreta que está detallada por parte de los cabecillas de esa ICO. El éxito de las ICOs en el mercado es realmente complicado ya que la falta de regulación y los fantasmas del pasado han provocado una desconfianza por parte de los inversores además del temor hacia este sector

Hacer una inversión ganadora dentro del mercado es muy complicado. Este entorno, realmente, es muy voraz y la falta de regulación ha provocado que muchos inversores pierdan su dinero. A este aspecto debemos sumarle que no muchos inversores comprenden completamente la manera de invertir en un activo que no ofrece un ganancia fija.

¿Qué es una STO?

Como respuesta a la situación de incertidumbre y desconfianza que planteábamos anteriormente, surge en el mercado la idea de hacer las STO (Security Token Offering) una nueva forma de financiación que trata de absorber lo mejor de las ICO’s y las IPO’s.  

Este tipo de inversión pretende demostrar la utilidad que presenta la tecnología blockchain que es capaz de ofrecer un sistema transparente, escalable y más eficiente que el sistema actual de acciones. A diferencia de las ICO’s, la STO deben seguir una serie de regulaciones legales como registros públicos, control por parte de las autoridades financieras y muchos otros procesos típicos de las empresas que cotizan en bolsa. 

En las STO ocurre lo mismo que con las ICO, el poder o no que puedan tener los poseedores de tokens dependerá exclusivamente si se está conformado una DAO o no sobre el proyecto.

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