Cardiología Climática
Las principales fuentes de emisión de gases de efecto invernadero son la quema de combustibles fósiles, la agricultura, la deforestación y la producción de carne. La prevalencia y la gravedad de los factores de riesgo cardiovascular van a ir en aumento debido a las consecuencias medioambientales y sociales que el cambio climático provoca.
Factores como la contaminación atmosférica o la calidad nutricional de los principales cultivos de cereales afectan directamente a la salud cardiovascular. Solo en 2019, las altas temperaturas fueron responsables de unas 93.000 muertes a nivel mundial por enfermedades cardiovasculares. También el trauma, la depresión y el estrés que pueden provocar los fenómenos meteorológicos extremos son factores de riesgo de enfermedades coronarias.
El calentamiento y la acidificación de los océanos, la desertificación y el aumento del CO2 atmosférico afectan al suministro de alimentos nutritivos: las dietas bajas en productos frescos, cereales integrales y mariscos son la causa de más de 3 millones de muertes cardiovasculares anuales en todo el mundo.
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A pesar del panorama nada optimista, los autores recuerdan que hay oportunidades para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y disminuir el número de enfermedades cardiovasculares en el mundo. Entre las medidas que destacan:
Finalmente, los autores sugieren que los sistemas sanitarios deberían invertir en la planificación de catástrofes y prepararse para futuras oleadas de enfermedades asociadas al cambio climático; también proponen que la investigación sobre salud ambiental y prácticas sostenibles en la atención sanitaria debería incluirse en las competencias médicas, siendo parte de la enseñanza médica.