CFO The Catcher in the Rye or The Guardian of Business Values
Lo que ayer valía como estratégico en las finanzas de las Compañías puede que un análisis de datos que combine indicadores financieros e indicadores operativos haga trizas lo esperado, replanteándose de nuevo: ¿Qué representa hoy el potencial empresarial para escalar valor en la continuidad del negocio?
La incorporación del procesamiento de datos en computación ha generado un cambio fundamental en el paradigma de las decisiones más sensible de las Organizaciones: las Finanzas.
Los sistemas automatizados ofrecen una gran cantidad de información precisa ya que pueden navegar rápidamente por grandes bases de datos y detectar patrones matizados. Esto permite que todas las partes involucradas, desde las personas hasta las empresas, tomen decisiones bien informadas con el pulso acelerador y cambiante del mercado.
La capacidad de la automatización para superar los límites y reducir los errores que con frecuencia acompañan a las operaciones manuales le otorga a la automatización un poder transformador holístico, dado que permite acelerar tareas, que antes requerían tiempo y recursos, liberando recursos y esfuerzos (es decir dinero invertido en esos procesos) para enfocar a los talentos a proyectos estratégicos y analíticos de alto rendimiento financiero en las Compañías.
Los CFO son los guardianes del valor empresarial en un momento en que la reordenación de los mercados con la recesión y por la velocidad de los cambios a los que ahora se someten es innegable.
El resultado de este nuevo replanteamiento forzoso al que van a verse sometidas las Compañías hace que los impulsos que deben proyectar los CFO abarquen cualquier área de la Empresa, ya que es necesario que estos puedan introducir novedades significativas en la forma en que las Compañías han ido tomando sus decisiones corporativas hasta el momento.
Los CFO se ven tomando más decisiones y es que sus análisis combinados entre todas las áreas y la necesidad de introducir nuevos indicadores, más allá de los tradicionales en sus funciones, está creciendo.
Ahora los CFO son los valedores máximos de las decisiones que se toman estratégicamente y nadie duda de que estamos en un momento en el que tomar decisiones es clave.
¿Qué ha cambiado en el enfoque del nuevo CFO?
Básicamente los CFO tienen muchas más decisiones que tomar con menos tiempo para hacerlo, empezando en que llevan las riendas de la rentabilidad y retorno en todas las áreas, así que deben conocer la rentabilidad de cada proceso administrativo y operativo generado por la Compañía.
La minuciosidad en el análisis financiero hoy, desde la gestión del personal a la forma en que se proyectan y venden las Compañías, pasando por asegurar el refuerzo de unas cadenas de suministro muy debilitadas hacen del CFO un impulsor de la visión holística del negocio.
Más que un asesor estratégico de los Empresarios, el CFO es el guardián entre el centeno, usando la metáfora del personaje de la novela, es el custodio del Valor de la Compañía, siendo el que debe liberar el impulso de la digitalización y la transformación de los negocios con cautela, de ahí que deba ser un guardián.
Es lógico, por tanto, que alguien que cada vez tienen más peso analítico dentro de la Compañía, necesite combinar conocimientos del mercado con conocimientos estratégicos operativos de la Compañía.
Los CFO deben ser capaces de asesorar en todos los ámbitos del negocio, conocer, absorber la información y ponerla en manos de la Compañía.
Un nuevo CFO surge de la necesidad analítica en múltiples flancos, un roll que seguirá evolucionando con el apoyo de modelos en IA generativa cada vez más regulados, acotados y fortalecidos.
El roll del director Financiero ahora mucho más complejo con nuevos skills y un mayor peso dentro de las Compañías se posiciona como el primer guardián del valor. Y esto lo comprende todo.
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Sus obligaciones crecen para cubrir más skills y por esta razón necesitan mayor integración en ámbitos como la gestión y análisis de datos, no solo financieros.
Debe ser un proveedor de información, más allá de los KPIs financieros, necesita incluir otros KPIs cuyo análisis son más complejos, que incluyen el valor de la marca por parte de usuarios y clientes, la percepción que se tiene de esta, la productividad y retornos de las operaciones en todas las áreas de la Compañía y la revalorización de la Compañía a través de la inversión en tecnología, la digitalización y la transformación.
Un perfil nuevo que confiere más responsabilidad al líder Financiero.
Las nuevas incertidumbres hacen del CFO el decisor de todas las inversiones de las Compañías.
La importancia de la planificación financiera avanzada con IA generativa para el análisis financiero en los CFO, esto se traduce en deberes en sus departamentos.
El CFO debe abanderar la transparencia de los modelos, fomentando la confianza entre pares y partes interesadas, aplicando funciones y limitaciones del uso de la IA generativa desde su máximo control.
Entre sus máximas competencias a abordar:
La integración de la IA generativa ha de garantizar la adherencia, la apertura y la reducción del sesgo empresarial, lo que ha de fortalecer la confianza en el procedimiento de análisis de los negocios. Una integración que, sin duda, es crítica en las Empresas y que traslada al CFO una responsabilidad capital, la de ser el guardián entre el centeno del valor del negocio, un valor que diversifica sus responsabilidades en sus decisiones.