Coaching y liderazgo disruptivo: las dos competencias más apreciadas en los gerentes y directores
Cada día se requieren más competencias al elegir a la persona adecuada para una posición; sin duda, debemos considerar las habilidades técnicas de cada puesto, pero hay dos indicadores principales que nos llevarán a determinar si estamos eligiendo a la persona adecuada.
Coaching
Es la capacidad de proporcionar retroalimentación y guía. A través de esta competencia, se busca que el líder apoye a su equipo y a sus compañeros para hacer un mejor trabajo; asimismo, a planear y apoyar el desarrollo de conocimientos, habilidades y actitudes de los otros.
El coaching es una disciplina inspirada en los grandes entrenadores deportivos y adaptada al ámbito organizacional como una forma de desarrollar competencias y producir grandes saltos en el aprendizaje de gerentes y ejecutivos, quienes, a su vez, apoyan el desarrollo de las personas de manera efectiva y productiva para la organización.
Liderazgo disruptivo
Lo poseen personas capaces de impulsar y generar cambios tecnológicos, culturales y organizacionales, necesarios para alcanzar los objetivos de las empresas. Los convierte en motores de nuevas formas de pensar para alcanzar los resultados, al apoyar a los demás a superar su resistencia al cambio.
El líder, por su carácter de pieza clave en la organización, debe poseer los conocimientos y habilidades necesarios para emprender su rol de forma asertiva. Al identificar sus fortalezas y debilidades, desarrollará la capacidad de dar solución a los conflictos propios del proceso de cambio, y con ello motivar al personal a su cargo en la búsqueda de un servicio de calidad.
Por otra parte, el empoderamiento que se le da a las personas a través de estas dos competencias gerenciales interviene de manera directa en la productividad, puesto que impacta directamente en la forma en la que los miembros de la organización asumen su nivel de responsabilidad, tanto consigo mismos como con el equipo.