¿Cuál es la duración ideal de un vídeo?

Es lógico pensar que un vídeo corto tendrá más reproducciones que uno largo. Y que, además, a medida que el vídeo avanza, la curva de visionados irá decreciendo paulatinamente. Los espectadores se van cansando y abandonan el visionado del vídeo.

Por lo tanto, la respuesta a la pregunta inicial debería ser: un vídeo, cuanto más corto mejor. ¿No?

Por lo general, esto es así. Y no lo dice solo la lógica, lo dicen también las estadísticas. Pero un estudio detenido de la actitud de la gente frente a un vídeo revela una curiosidad interesante.

La empresa de vídeo Wistia, de Cambridge, Massachussetts, hizo una original investigación. Testaron dos variaciones de un mismo vídeo. Uno, que llamaremos Vídeo A, duraba 30” y el otro, que llamaremos Vídeo B, tenía una duración de 90”. Pero lo importante es que los primeros 30” eran idénticos en ambos vídeos. En un caso, al finalizar esos 30” el vídeo terminaba y en el otro, al finalizar los mismos 30”, el vídeo continuaba durante un minuto más.

¿Cuál fue el porcentaje de visionados de los dos vídeos?

Esta gráfica lo explica claramente.

Casi el 50% de los espectadores veían el vídeo A entero, sus 30” de duración hasta el final. Mientras que solo el 25% de los espectadores veían los mismos 30” en la versión larga, la del vídeo B. Es decir, que la expectativa de duración del vídeo era más importante que el contenido.

Es evidente que, a la hora de hacer un vídeo, la brevedad y la capacidad de síntesis son fundamentales.

Pero también es muy importante informar por adelantado de la duración del vídeo, especialmente si es corto. Si el espectador sabe que el vídeo es breve, estará mucho más dispuesto a verlo y, además, a verlo entero. Hagamos vídeos cortos, por supuesto. Y digámoslo.