¿Cuándo fue la última vez que te perdiste?

¿Cuándo fue la última vez que te perdiste?

Hola, valiente:  

Espero que estés muy bien.

Si hace tiempo que no sabemos de una persona, al encontrarnos solemos decir que «estaba perdida». Así parece que estaba yo por acá, pues no te escribía desde el año pasado. ¿Qué te puedo decir? Te extrañé, pero de vez en cuando hay que perderse. 

En ocasiones se trata de retirarnos de la vista de alguien, por nuestro bien o el de ambos; otras veces significa parar en cierta actividad, especialmente si es creativa, a favor del resultado. En el caso de la escritura, ya sea para recuperar fuerzas, superar un bloqueo o abandonar (que también es válido), estoy convencida de que hay momentos en los que lo mejor para tu texto es que lo dejes y perderte un rato

Y de eso me gustaría contarte hoy (y ojalá tú me contaras algo también).

Luego de haber decidido cuál sería mi palabra de este año (si no has definido aún la tuya, siempre estarás a tiempo) me encontré con el libro de Rebecca Solnit titulado: Una guía sobre el arte de perderse. Mi palabra de 2024 era «presente», pero gracias a esa lectura, «perderse» me guiñó el ojo :

«Perderse: una rendición placentera, como si quedaras envuelto en unos brazos, embelesado, absolutamente absorto en lo presente de tal forma que lo demás se desdibuja. Según la concepción de Benjamin*, perderse es estar plenamente presente, y estar plenamente presente es ser capaz de encontrarse sumergido en la incertidumbre y el misterio. Y no es acabar perdido, sino perderse, lo cual implica que se trata de una elección consciente, una rendición voluntaria...».

Una guía sobre el arte de perderse" por Rebecca Solnit. * Walter Benjamin, filósofo y ensayista del siglo XX.


Entonces, como «perderse es estar plenamente presente», creo que me quedaré con las dos .

Cuando fluimos, es decir, cuando hacemos algo y lo disfrutamos, nos perdemos, que como bien dice Solnit, no es lo mismo que «estar perdidos». Lo hemos elegido, y nos implicamos tanto, que el tiempo parece detenerse y los obstáculos se convierten en retos que nos estimulan. 

¿Con qué te pasa eso? ¿En qué te pierdes, valiente? 

A mí me pasa escribiendo, pero también contemplando la naturaleza. Logro perderme en un atardecer o mirando la luna. Podemos «perdernos» en nuestra propia ciudad, pero también haciendo un dibujo o cocinando. Y hay poemas y canciones que hablan de que es posible perdernos en una mirada.

¿Qué pasa cuando nos perdemos? Nos abrimos a lo desconocido, nos entregamos a lo incierto. Entonces vienen los descubrimientos, encontramos y nos encontramos. Todo eso nos hace crecer, transformarnos. Y para quienes escribimos, eso con lo que nos topamos se convierte, además, en insumos para expresarnos y conectar con otros. 

Hoy quiero invitarte a que te pierdas, porque como dice Solnit: «no perderte nunca es no vivir; no saber cómo perderte acaba contigo, y en algún lugar de la terra incognita que hay entre medias se esconde una vida de descubrimientos». 

Ojalá escribas sobre lo que encuentras. Y ojalá te pierdas escribiendo.

Te dejo un abrazo y, un poco más abajo, un regalo por San Valentín.

Ángela.


«Todo amor tiene su escenario»

 San Valentín puede ser la excusa perfecta para decirle a la gente que quieres cuánto la quieres. Creo que el amor, en cualquiera de sus formas, debe celebrarse. Y si hay una fecha señalada, ¿por qué no hacerlo ese día también? 

 Te propongo que regales y te regales escribir sobre un escenario de amor. 

 ¿Ejemplos? La mesa en la que come toda la familia; el patio del colegio donde nació esa amistad; el café en el que pasaste horas hablando aquel día, el parque, la plaza, la playa, la oficina, el semáforo, el aeropuerto, el hospital, el jardín... donde protagonizaste o presenciaste amor... 

La inspiración fue esta cita:

 «En los lugares en los que ha ocurrido algún hecho significativo queda contenido parte del sentimiento asociado a ese hecho, de forma que rescatar el recuerdo del lugar es rescatar el sentimiento y a veces el sentimiento sale a la superficie cuando se regresa al lugar. Todo amor tiene su escenario». R.S.


¿Te imaginas escribir un cuento corto, una carta o simplemente un mensaje acerca de ese escenario (o usarlo como punto de partida) para regalarle palabras a esa persona especial en tu vida? 

En la sesión de Escribir juntos de este martes hicimos este ejercicio. Y de allí salieron varios regalos de San Valentín y cumpleaños que en este momento deben estarse terminando de escribir o ya entregando.

Te deseo muchos escenarios y palabras de amor. En San Valentín y todos los días.

 Otro abrazo y no olvides contarme algo, para saber si mis palabras llegaron a un buen lugar,


 Á.



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