¿Cuántos sueños han quedado atrapados en los juicios?
Es curioso como la autocrítica nos lleva a mirar -casi en exclusiva- nuestras “limitaciones”, ¿no?
Solemos pensar muchas cosas sobre nosotros mismos. En nuestro fuero íntimo, durante esas conversaciones reservadas solemos desnudarnos y dar paso a lo que creemos ver. Es ahí donde nos ponemos etiquetas que -luego- nos acompañan en cada vivencia de la cotidianidad.
Y así, llevando a cuestas una idea de lo que no podés hacer (o ser), te pasás la vida condicionado.
¿Hay etiquetas buenas y malas?, ¿hay etiquetas verdaderas y falsas? Si bien no soy partidaria de caer en dicotomías, prefiero agrupar en etiquetas que sirven y etiquetas que no sirven. En este punto, intento tener en cuenta la temporalidad de los juicios, es decir, los juicios nacen en un presente, sobre una acción del pasado y tienen consecuencias en nuestro futuro.
Desde esta concepción es que te invito a hacerte las preguntas que siguen. Por favor, tomate tu tiempo para responder y dejá que te sorprenda tu nueva versión (o visión) de vos mismo:
¿Qué cosa llevás pensando de vos hace tiempo?
¿En qué situación concreta nació ese juicio? ¿Había otras personas en ese momento?
¿Cuán cierto es ese juicio?
¿Que posibilidades te quita pensar de esa forma sobre vos?
¿Te sirve esa etiqueta?...
Para hacer más poderoso este proceso, animate a escribir lo que vas pensando y reflexionando. Verlo escrito te va a aportar más claridad. Luego viene la parte de reformular ese juicio de manera que te sirva. Escribí tu nueva versión y leela hasta que algo dentro te haga click!
Te propongo pensar también en las etiquetas que ponés a otros y cómo esas etiquetas influyen en tus relaciones familiares, amistosas y laborales. ¿Cuánto conocés realmente a tus compañeros de equipo?, ¿cuánto sabés sobre el aporte y los objetivos de otros sectores de la empresa?
Pienso que despojarnos de las etiquetas que no nos sirven, que no nos suman, es ponernos alas, pasar a la acción y apoderarnos de nuestro futuro.
Y vos… ¿qué pensás?
Natalia Font, Creativity Coach
Experta en generar entornos laborales emocionalmente seguros. Conferenciante. Escritora.
4 añosHermoso, Natalia Font! muchas gracias por compartir.
Key Account Mánager en Novartis
4 añosQue hermoso y rico abordaje!! Es verdad que a muchas personas les gusta poner etiquetas y que muchos de nosotros las tenemos y ya sea para bien o para mal entiendo que no podemos resumir la vida de una persona a una simple descripción....de “etiqueta” ellas son simplemente parciales y generalmente se las usa en un sentido negativo, gracias por él artículo, nos lleva a reflexionar en profundidad quienes somos y no que dicen de nosotros algunos....jajaja
Executive Leader | Strategy, Performance & Growth | INSEAD Exec. MBA & Harvard alumnus, Doctoral Candidate
4 añosInteresante lección Nati!. Es importante identificar esas 'etiquetas' que en algún momento nos fueron muy funcionales, al nivel de llevarnos a una zona de confort, pero que expiraron. Factores limitantes después de todo. Espero tu próximo artículo!
consultora capital humano en Alejandra Salinas y Asociados
4 añosmuy bueno ! gracias...