Cuéntame ¿de qué te arrepientes?

Todos alguna vez en nuestras vidas, nos hemos arrepentido de algo, el arrepentimiento es esa sensación de desazón que experimentamos cuando debimos haber hecho algo o dejamos de hacer algo que considerábamos que era lo correcto. Esa sensación puede acompañarnos por mucho tiempo en nuestras vidas, algunas veces juzgándonos sin piedad por las consecuencias de nuestros actos o puede impulsarnos a actuar de una manera diferente, permitiéndonos conocer qué es lo que más valoramos.  

En mí caso, uno de mis más grandes arrepentimientos, sucedió cuando tenía 5 años, estábamos jugando en la finca con mí hermana menor, que en ese entonces tenía como 3 años y medio, y no sé por qué razón empezamos a molestar a unos pavos grandes que estaban en un corral, eran echevarríos que son pájaros que pueden medir como un metro de alto, de un momento a otro se abre el corral y salen persiguiéndonos esos pájaros para picarnos, con mí hermana empezamos a correr hacia la casa, pero como yo era más grande llegué primero y cerré la puerta, mi hermana empezó a golpear para que la dejara entrar pero como tenía mucho miedo que el pájaro entrara no le abrí la puerta y el ave empezó a picar a mí hermana unos segundos después llegó uno de mis hermanos mayores, que la defendió como yo no lo había hecho.  

Después de lo sucedido tuve una conversación muy seria con mi mamá, en dónde me preguntó por qué no había abierto la puerta y le dije que había tenido mucho miedo y por eso no la había abierto, me dijo Jessi pudo haber perdido un ojo porque tu no hiciste el papel que debías hacer como hermana mayor, debías protegerla, por más miedo que tengas debes tener presente que es tu hermana, ella confía en ti y debes cuidarla.

Mi hermana al otro día, aún tenía las marcas de las picadas cerca a los ojitos, y me arrepentí de no haberla defendido, aún hoy escribiendo estas palabras me duele no haber actuado como una buena hermana mayor y haberla dejado sola, ¡lo siento Jessi!. Sin embargo, esa situación me permitió convertirme en una mejor hermana, a demostrarle con hechos que podía contar conmigo, a estar pendiente de ella y a defenderla cuando lo necesitara. 

Esa es razón, por la que creo que nuestros arrepentimientos no solo están ahí para juzgarnos, sino también porque tienen el poder de transformarnos en mejores personas, pueden enseñarnos a aprender de nuestros errores y a actuar en el futuro de una manera totalmente diferente. Por eso, esta semana, quiero invitarlos a revisar de qué cosas se arrepienten, ¿hay algo que puedan hacer para remediarlas?, si es así hagámoslo, si nos arrepentimos porque no actuamos, o no hicimos algo cuando tuvimos la oportunidad de hacerlo, estemos pendientes para actuar de una manera diferente cuando tengamos una próxima oportunidad y no seguir arrepintiéndonos de lo mismo.

Por último, no dejemos que nuestros arrepentimientos no nos dejen avanzar, mejor hagámoslos nuestros aliados para que nos enseñen a ser más valientes, arriesgados, o más cautelosos, o cuidadosos y que de esta forma nos impulsen a tener la vida que queremos.  

¡Feliz semana de aprender de nuestros arrepentimientos!

Yo ya les conté de qué me arrepiento, ¿ustedes de qué se arrepienten?