Cualidades digitales para empresas en la #NuevaNormalidad

Las dinámicas internas y externas de las organizaciones cambiaron para siempre. La pandemia del Covid-19 marcó un antes y un después, en el que las organizaciones deben comprender cuáles son los cambios necesarios para continuar operando bajo la nueva normalidad. Y aunque en ocasiones las nuevas tendencias hacen pensar que la tecnología es la salvación, lo cierto es que sí son un gran impulso para una correcta transformación, pero deben ir de la mano con los equipos humanos de trabajo.

 Bajo esa reflexión, quiero compartirles tres cualidades digitales que deben adoptar las organizaciones para esta nueva era de los negocios, en la que no siempre las altas directivas pueden tener la solución a los retos y circunstancias que se presenten. 

Aprendizaje experencial: La evolución tecnológica de los procesos internos de una empresa, junto con las avanzadas técnicas de entrenamiento de un personal han puesto en el ojo del huracán a aquellas organizaciones cuyos modelos de trabajo permanecen construidos bajo métodos tradicionales. La pandemia, la nueva forma de relacionarnos y los nuevos retos, han obligado a que las directivas entiendan que su personal y su modelo productivo deben estar soportados en una base rígida de conocimientos y habilidades tanto tecnológicas como digitales.

Para ello están las experiencias digitales que, como su mismo nombre lo indica, son procesos con enfoques de aprendizaje práctico, como entrenamiento de acción, entrenamiento en el trabajo, simulaciones virtuales o en vivo y juegos de roles. Una encuesta realizada por Deloitte a más de 10 mil ejecutivos globales encontró que solo el 5% de los encuestados sentían que tenían líderes digitales sólidos.

Por lo tanto, la recomendación hecha por el portal Chief Executive en este sentido es que las empresas deben buscar en sus equipos a quienes mayores habilidades digitales demuestren. Y posteriormente capacitarlos para que ocupen los puestos ejecutivos que les permitan dar el siguiente paso. 

Automatización del aprendizaje: El primer análisis del panorama laboral durante y después de la pandemia, realizado por Adecco, resaltó la importancia de que las organizaciones cuenten con profesionales digitales cuyas perspectivas de crecimiento sean más estables. Entre los nuevos cargos a tener en cuenta se destacan los analistas de datos digitales, los directores de comercio electrónico, y los profesionales en ciberseguridad, tecnologías Blockchain y realidad virtual. Todos estos perfiles demuestran, una vez más, que las empresas buscan profesionales capaces de adaptarse a la nueva normalidad con entendimiento y análisis profundo de la economía.

Sin embargo, existe un riesgo latente de que muchas de las profesiones que conocemos actualmente desaparezcan por cuenta de la automatización y de las máquinas. Por ello, el portal El País publicó en uno de sus artículos la entrevista a Rodrigo Miranda, director general de la Escuela de negocio digital (ISDI), quien resaltó la necesidad de que los profesionales aprendan a estar en modo beta constante, el cual les permitirá desarrollar curiosidad por los nuevos modelos y las tecnologías de negocio, generar sus propias iniciativas de motivación y que las impulse a seguir “evolucionando en un entorno de cambio permanente”. 

Perfiles jóvenes: Las actuales generaciones tienen la responsabilidad de aprender las nuevas tecnologías y aplicarlas en su entorno, y ese comportamiento debe ser tenido en cuenta por las empresas, especialmente por aquellas que requieran de una verdadera digitalización y transformación en sus operaciones. Una forma fácil de capitalizar la tecnología en las compañías es a través de los jóvenes y de paso les damos oportunidad a estas personas de adquirir experiencia laboral.  

Las empresas le presten una mayor atención a los aportes que provienen de aquellos cargos inferiores que nacieron en la era digital, teniendo en cuenta los nuevos retos de la normalidad que vivimos actualmente. Es importante escuchar a los empleados nacidos en la era digital, estos aportan de forma natural y utilizan su capacidad de enfocar problemas y de crear soluciones desde otra perspectiva.  

En ese orden de ideas, adquirir únicamente los equipos y programas que transformen los procesos para una mayor productividad no convierte a una empresa en 100% digital. Aunque el desarrollo tecnológico avance rápidamente, lo cierto es que en el personal de trabajo está la base sólida de desarrollo y rendimiento de cualquier empresa, sin importar al sector que pertenezca. Por eso, la clave está en combinar la tecnología con el personal, de tal forma que todos aprendan a utilizarla en beneficio del avance del negocio en conjunto.