Cultura Workaholic: La adicción al trabajo

Cultura Workaholic: La adicción al trabajo

El workaholismo es una preocupación creciente en nuestra sociedad, con muchas personas luchando por equilibrar su vida laboral y personal.

¿Pero antes... qué es ser un workaholic?

Se lo puede definir como una adicción al trabajo que puede llevar a problemas de salud física y mental, así como a problemas en las relaciones y un bajo rendimiento en el trabajo.

Aunque el término puede sernos desconocido, existen muchas personas en nuestro país que sufren de esta patología. El diagnostico suele estar relacionado con otros problemas como la fatiga crónica, el estrés, la depresión y la ansiedad.

Te comentamos cuáles son algunos de los síntomas habituales para poder identificarlo a tiempo. Algunos de ellos pueden ser:

  • Trabajar de forma compulsiva.
  • Incapacidad para desconectar del trabajo.
  • Priorizar la vida profesional sobre el resto de ámbitos.
  • Evitar tomarse vacaciones o días de descanso.
  • Altos niveles de exigencia.
  • Llevarse el trabajo a casa, aunque no sea necesario.
  • Desinterés por otras actividades que no tengan que ver con el entorno laboral.

Es un problema multicausal que puede verse motivado por factores económicos, emocionales hasta físicos.

Una de las causas principales por las que se puede desarrollar una adicción, es para cubrir una necesidad psicológica. Algunos colaboradores pueden ver al trabajo como un escape para no afrontar emociones desagradables. También en muchos ambientes laborales, se alaba y premia a aquellos que priorizan el trabajo, trabajan horas extra y hacen lo necesario para tener éxito.   

No obstante, los perfiles más propensos a sufrir esta patología son los altos cargos con grandes responsabilidades o los freelances.

Para evitar convertirse en un workaholic, te recomendamos establecer límites claros entre el trabajo y el tiempo personal, priorizar el cuidado personal y buscar apoyo de amigos, familiares o profesionales si es necesario. También es importante reconocer el impacto negativo que el workaholismo puede tener en la vida de uno y tomar medidas para abordarlo antes de que se convierta en un problema grave.

Si bien es importante ser dedicado en el trabajo, es igualmente importante mantener un equilibrio saludable entre la vida laboral y personal para evitar caer en esta adicción. Al establecer límites, priorizar el cuidado personal y buscar apoyo cuando sea necesario, los colaboradores pueden evitar que el trabajo tome el control de sus vidas.

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