Desconexión digital: Qué es y cuáles son las mejores prácticas
¿Cuál es la ventaja de la “desconexión digital” en la empresa?
Contrariamente a la creencia, la desconexión digital no necesariamente afecta la productividad, de hecho, según un estudio de la Universidad de Stanford, el exceso de trabajo puede disminuir la productividad y aumentar el riesgo de errores en el trabajo; mientras que de acuerdo con la Organización Internacional del Trabajo (OIT), el 68% de los trabajadores en América Latina reporta altos niveles de estrés laboral. En ese contexto, debemos resaltar la importancia de reconocer la nueva realidad sobre el trabajo y el desarrollo que implica hoy en día mantenernos productivos, llegando en algunas ocasiones a ocupar espacios y horarios fuera del horario laboral.
La desconexión digital en el ámbito laboral se refiere a establecer límites saludables entre el trabajo y la vida personal, esto con el fin de evitar el “burnout” o desgaste profesional. Las tecnologías de la información (Tic´s) cambiaron el paradigma del tiempo de trabajo. Por ejemplo, antes la finalización del horario laboral coincidía con la salida de la oficina; sin embargo, la generalización del uso de los smartphones ha supuesto poder llevarnos la oficina con nosotros. El correo electrónico, las aplicaciones de la empresa ahora las tenemos al alcance de la mano y por ende es habitual seguir trabajando fuera del horario laboral.
Para entender los efectos negativos de la sobrecarga de trabajo fuera del horario laboral y su impacto en la salud, es fundamental realizar evaluaciones. Dichas evaluaciones nos darán el alcance de los riesgos y nos ayudarán a diseñar estrategias para mitigarlos. Un ejemplo de esto, son los estudios de impacto en la salud mental de los trabajadores y el análisis de la calidad de sueño o el tiempo destinado a los pasatiempos en la vida diaria de nuestros colaboradores.
Aquí compartimos algunas ventajas de la desconexión digital:
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Es importante destacar que la desconexión digital no implica una desconexión total de la tecnología, sino más bien establecer límites y tiempos dedicados al descanso y a actividades no laborales. Estos son algunas buenas prácticas para la desconexión digital:
En conclusión, la desconexión digital colabora en mejorar el bienestar y la salud de los trabajadores, disminuyendo el cansancio y elevando la gratificación laboral. Además, puede promover una productividad más elevada al permitir que los empleados se desconecten y recarguen sus energías, lo cual puede potenciar la creatividad, la concentración y la capacidad de tomar decisiones.