Diferencias más comunes entre cepas
Aunque en el Viejo Mundo los vinos se clasifican por su Denominación de Origen (distintivo que identifica un producto como originario del país o de una región o localidad del territorio, cuando la calidad, reputación u otra característica del mismo sea imputable), más que por las variedades que lo componen, en el Nuevo Mundo y particularmente Chile, las variedades son la forma más común de categorizar vinos; es decir, cuál es el tipo de uva utilizado para su elaboración.
Normalmente se nombra a un vino por la variedad predominante en su composición, como por ejemplo Sauvignon Blanc, Chardonnay, Pinot Noir, Merlot, Carménère, Cabernet Sauvignon, etc.
Cuando un vino lleva una de esos nombres es porque al menos un 75% del contenido pertenece a esa variedad, ya que en muchos casos se mezclan con otras para darles un determinado carácter o cuerpo, también para hacer ensamblajes. A continuación, explicamos algunos de los rasgos y características esenciales de cada una de estas variedades.
Vinos Blancos
Sauvignon Blanc
Recuerda mucho al pasto, hierbas y olores vegetales. Además de esto, su alta acidez hace que sea una variedad perfecta para producir vinos muy refrescantes y ligeros. Por lo mismo, esta variedad por lo general no se trabaja con guarda en barricas y se toman jóvenes.
Chardonnay
Este clásico blanco ofrece intensos tonos frutales a manzana, melón, pera, piña y algo de limón, así como también especias, miel y mantequilla. Los enólogos usualmente le agregan algo de complejidad al utilizar técnicas como la fermentación de barrica y maloláctica (un proceso que convierte el ácido málico en ácido láctico).
Vinos Tintos
Pinot Noir
Conocido también como “la gran uva de Borgoña”, por la región francesa de donde proviene originalmente. Este tinto ofrece una experiencia llena de toques a cereza negra, frambuesa, especias y aromas con tonos de tierra, hierbas y alquitrán. Tiende a ser de cuerpo ligero a cuerpo medio.
Merlot
El Merlot tiende a tener un perfil de sabor similar al de Cabernet Sauvignon ya que pertenece a la misma familia de uvas, siendo ambas cepas descendientes del Cabernet Franc. La principal diferencia entre estas uvas es que la Merlot tiene una piel más delgada y tiende a ser menos astringente, porque contiene taninos más suaves y en menor cantidad. A su vez tiene un cuerpo más frutal y ligero. Se caracteriza por notas de fruta madura azul, negra y roja, respaldadas por matices de coco, vainilla y varios tonos de tierra.
Carménère
Caracterizado principalmente por contar con aromas de frutas rojas maduras y especias a base de hierbas, el Carménère se encuentra en estilos diversos: puede encontrarse en versiones acirueladas y opulentas con notas de roble, como también, en versiones que destacan más por unas notas más frescas, como hierbas y pimiento.
Cabernet Sauvignon
En su forma pura (no en ensamblaje), esta variedad de vino se manifiesta a través de una gran intensidad y profundidad de sabor. Sus notas más clásicas son de berries rojos como las grosellas, así como también, ciruelas y cereza negra. Un Cabernet Sauvignon de calidad se puede identificar por un tono oscuro púrpura-rubí, con niveles acídicos firmes, un gran cuerpo y fuertes taninos.
En conclusión, cada variedad tiene algo que aportar. Siempre es importante tener en cuenta que la variedad se expresará de formas muy diferentes según su lugar de procedencia, condiciones climáticas, el suelo donde se cultiva la uva, aun siendo la misma variedad. El maridaje también es un factor muy relevante para ir amplificando las bondades organolépticas del vino, de nuestros sentidos en definitiva.
Lo entretenido de todo esto es que la única forma de aprender a diferenciarlos, es entrenando bien tu paladar.
KAM | Export Manager | Gerente de exportaciones | Gerente de Ventas
4 añosExcelente articulo Gerardo , acerca en forma muy didactica a las personas que no dominan y no pertenecen a la industria . Slds.