Diseños de Espacios de Trabajo con COVID-19
¿Serán obsoletas las oficinas tradicionales?¿quedará nuestro estilo de vida afectado permanentemente?¿cómo puedo adaptarme mejor? Es innegable que nuestro presente ha sido alterado en un abrir y cerrar de ojos, respectivamente, desde que se anunció el estado de emergencia debido a la pandemia, existen tantas preguntas que quedan dentro de las mentes de todos. Dadas las circunstancias para mantenernos en salud, los negocios y empresas han tenido que adecuarse a través de las medidas y protocolos necesarios para asegurar que sus colaboradores puedan continuar sus labores de forma segura y efectiva. Mientras que algunos negocios han podido adaptarse para el trabajo remoto, otros han tenido que invertir dinero y tiempo para implementar nuevos métodos para continuar las labores, y finalmente quedan aquellos que no pudieron continuar laborando por la imposibilidad de incumplir medidas adecuadas.
A pesar de esto, la situación ha servido para abrir nuevas oportunidades para trabajar desde el hogar y cumplir con las necesidades del trabajo funcionalmente. Aunque esto ha abierto los ojos a posibilidades para muchas empresas, una forma de asegurar de que el tiempo sea dedicado para el beneficio de la empresa es mantener las oficinas tradicionales como una forma de supervisar los esfuerzos y asegurar que estos se encuentren concentrados.
Actualmente nuestro país se encuentra en la fase de reintegración parcial y progresiva a las labores presenciales, ¿cómo puedo preparar el espacio en la casa?
Primero, es importante considerar las herramientas que necesitas para trabajar adecuadamente y verificar cuánto espacio necesitas para alojar tales herramientas. Designa un lugar de la casa como tu "zona de trabajo", identifica las posibles distracciones y eliminalas de esa área, es importante mantener el espacio de trabajo en casa limpio y organizado, solamente tener las cosas que sí estarás usando durante esa sesión de trabajo, asegurar una buena iluminación, después de todo, la comodidad también es importante.
Para facilitar el proceso de reintegración se puede diseñar un protocolo para que los colaboradores puedan ir a la oficina ciertos días a la semana, organizados de forma que dentro de cada departamento se puedan mantener medidas de seguridad como el distanciamiento social y seguir cumpliendo con sus funciones individuales y colectivas. Igualmente como los países han adecuado un proceso dividido en fases para la reintegración, esta es una forma de recordar al cuerpo de los horarios de trabajo anteriores y aunque nuestra vida no vaya a ser la misma que antes, poder prepararnos para seguir viviendo la vida, dar respuesta a nuestras necesidades personales, a las de nuestras familias y las del trabajo.
Tomando en cuenta este formato que pudiese considerarse como híbrido entre la casa y la oficina, nos encontramos en la segunda fase de adecuación de los servicios públicos y privados bajo las condiciones que permite mantener la seguridad de la población. Los transportes públicos aunque más costosos vuelven a estar disponibles para permitir el regreso progresivo a la vida en la oficina tradicional. Tener estas opciones permite a los colaboradores de las empresas tener un plan de contingencia en el caso de que, por ejemplo, los servicios eléctricos tengan planes de mantenimiento un día en específico y ese día se coordine para que los colaboradores que residan en esas áreas laboren desde la empresa y permitir que los procesos puedan continuar sin problemas.
Como país tenemos la capacidad de poder adaptarnos bajo estas nuevas circunstancias post-covid-19, sin embargo, esto requiere la colaboración de todos. Tal y como dijo el célebre Benito Juárez: el respeto al derecho ajeno es la paz, si respetamos a nuestro prójimo, tomamos las medidas de distanciamiento social por seguridad, permitimos al otro hacer lo mismo, podremos ayudarnos a detener esta pandemia y poder retomar un nuevo estilo de vida, más saludable, más atento, más humano.
El trabajo es la vía de mantener el flujo de nuestros consumos y producciones en curso, de poder mantener y mejorar nuestra calidad de vida, es importante tomar medidas para proseguir con el trabajo al tiempo que aseguramos nuestra salud. Esto se logra a través de disciplina, establecer reglamentos y protocolos para proceder con los procesos del trabajo de forma tanto efectiva como segura.
¿Nuestro futuro? Tenemos un largo camino por recorrer para cambiar nuestra mentalidad como nación, para reconocer la realidad de nuestra circunstancia, somos seres vulnerables a la enfermedad, estamos en el periodo en que una pandemia está en nuestras puertas.
Desde mi perspectiva, pienso que si empezamos a actuar de forma responsable en un plazo de 6 a 12 meses podremos haber controlado los casos de contagio por esta pandemia, existe la posibilidad de que una cura pueda empezar a distribuirse a finales de ese plazo para la tranquilidad de la población, pero aún así, es importante que nos cuidemos hasta que sea seguro romper con el distanciamiento social que tan difícil ha sido especialmente para nosotros los dominicanos. Tenemos una cultura tan cálida como la temperatura de nuestro eterno verano, el acercamiento no es más que nuestra reacción natural, tratamos a los demás como parte de nuestra familia, pero aún así, es necesario que actuemos para mantener a nuestras familias a salvo, para asegurarles un futuro en el que puedan estar dispuestos a colaborar por el bien común y no solo propio. El tránsito se está restableciendo, pero los casos de contagios siguen aumentando, aún tenemos mucho por recorrer.
En un mediano plazo, entre 12 y 24 meses, las fases de reintegración se han completado, aunque el nivel de riesgo ha disminuido considerablemente, el distanciamiento social se ha vuelto una realidad, nuestra cultura se ha enfriado debido a las circunstancias, una vez el peligro se haya alejado, ¿podremos volver a tener ese nivel de calidez que nos destaca como dominicanos? ¿Podremos vencer el temor a que el otro pueda estar contagiado y pueda poner en peligro a mi familia?
Pienso que sí, porque lo llevamos en la sangre, podremos volver quizás no exactamente a la misma situación que antes, pero sí podremos volver a una situación mejor, es una de las características del ser humano que posee desde que es un bebé y aprende a caminar, mientras da sus primeros pasos y cada vez que cae se vuelve a levantar, tenemos el potencial de mejorar y ser mejores cada vez.
A largo plazo, de 25 meses en adelante, nuestra cultura se ha vuelto a reforzar, somos más unidos que antes, tomamos medidas responsables para cuidar a los nuestros y a la vez le ofrecemos ese cálido sentir de compañerismo que nos caracteriza. Estamos de vuelta en nuestras oficinas laborales, ahora con la oportunidad de no sólo trabajar dentro de los recintos de las instituciones sino también desde nuestras casas en caso de que ocurra cualquier percance o circunstancia. Aprendimos a dar lo mejor de nosotros mismos por el bienestar común, confío en el potencial de la humanidad de hacer cosas grandiosas, así como durante estas circunstancias debemos de adaptarnos a un estilo de vida totalmente diferente al que acostumbramos, puedo descansar con la esperanza de que algún día, volveremos no a lo mismo, sino a ser mejores.
Ingeniero de Software│Coordinador de Sistemas TI│Analista de Datos│Automatización de Software│Administrador de Sistemas│Analista de Inteligencia de Negocios
4 añosUn modelo de trabajo híbrido bajo estas circunstancias podría ocurrir de la siguiente forma: Las reuniones empresariales pueden realizarse de forma online sin ninguna problemática, mientras que los casos de soporte técnico aunque deben realizarse de forma presencial en las oficinas (aquellos que no puedan ser resueltos remotamente, que debería ser la primera opción a verificar) se puede mantener el distanciamiento y limpieza de las manos antes y después de tocar o interactuar con los equipos. Muchas de las labores de oficina pueden ser movilizadas a entornos de teletrabajo, desde casa, sin embargo, para el empleador se pierde un poco del control sobre el tiempo dentro del horario laboral, en la casa hay más distracciones y otras responsabilidades/necesidades que hacen presencia; aunque para el empleado estar en la comodidad de su hogar (siendo este el caso), le ayuda a tener más herramientas para lidiar con el estrés acumulado por la carga laboral, tiene la libertad de pararse, tomarse un respiro, beber agua o incluso tomar una siesta. Es mi opinión personal que se mantengan las labores de forma remota mientras nos encontremos en este estado de peligro, cada vez que se sale incluso con todas las medidas de seguridad y distanciamiento, no se puede asegurar la seguridad de aquellos en nuestro hogar en un 100%, de todos modos hay un riesgo, sin embargo, es necesario que continúe el ciclo de producción de material laboral, de otra forma no podríamos subsistir.