Edificios Digitales, Tendencias, Realidad y Futuro

A inicios del año 2020, el cual vivimos de manera atípica, se decía que durante los próximos cinco o diez años los edificios digitales serían una realidad y ayudarían a incrementar significativamente la productividad de los negocios. Pero, como en una película de ciencia ficción, el futuro nos ha alcanzado; los avances en transformación digital que se proyectaban para los siguientes años son ahora es una necesidad real, no solamente para la productividad, sino también en aspectos como la seguridad de las personas, implementando tecnologías como la inteligencia artificial, soluciones para el monitoreo de la temperatura corporal y dispositivos para el control de acceso o contacto libres que ayuden a minimizar la posibilidad de contagios de cualquier virus.

Desde mi perspectiva, la tendencia para edificios digitales es que, tanto sus propietarios como los constructores y arquitectos, deberán prestar especial atención al diseño de una infraestructura de redes robusta y segura que interconecte todos los sistemas de gestión y brinde a los ocupantes una mejor experiencia. Esta infraestructura ahora va más allá de controles de acceso y ventilación; se expande para integrar soluciones que identifiquen el nivel y ocupación de las áreas comunes para no rebasar el número máximo de personas concentradas, así como en señalización digital para indicar cómo conducirse dentro de los edificios de forma ordenada, hasta sistemas de iluminación inteligente que procuren que la luz sea la adecuada, teniendo en cuenta el número de personas y cantidad de luz natural con la que cuenta el espacio. Por ejemplo, en una sala de juntas, las luces pueden encenderse o apagarse en determinados horarios para ahorrar energía eléctrica.

Todas estas tecnologías tienen un común denominador: hablamos de redes basadas en el protocolo IP que, como es bien conocido, se trata del protocolo universal requerido para crear una hiperconvergencia de todas las redes y sacar el mejor partido de todos los sistemas. Es por ello que la infraestructura toma un papel crucial y debe ser robusta, confiable y escalable, sin estos atributos podría ponerse en riesgo la seguridad de las personas que interactúen en el edificio.

Finalmente se puede afirmar que el conjunto de estas tecnologías, sumadas a las medidas sanitarias y sociales determinadas por los organismos oficiales, establecen las bases de una nueva Certificación para edificios seguros y libres de virus, que podría ser adoptada rápidamente como parte de los requisitos de operación de los grandes corporativos, representando una ventaja competitiva y garantizando la seguridad de las personas con los beneficios que brinda el internet de las cosas (Internet of Things or IoT).

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Miguel Rivera.

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