El éxito de una estrategia de sostenibilidad
La sostenibilidad es transversal en las diferentes áreas de una empresa, eso significa que no es tan fácil definir el nivel de éxito de una estrategia de sostenibilidad. Especialmente, porque son múltiples acciones, con diferentes actores, donde muchos resultados puede que no se evidencian en el corto plazo.
Como si fuera poco, muchas veces tiende a confundirse la sostenibilidad de la empresa (corporativa), la sostenibilidad de los materiales o insumos, la sostenibilidad en las instalaciones y la sostenibilidad de los productos o servicios que se comercializan. Volviendo aún más complejo definir el éxito de una estrategia.
Si una empresa consume el 100% de la energía a partir de fuentes renovables o ha sido reconocida por la calidad de su ambiente laboral ¿es su estrategia de sostenibilidad exitosa? No necesariamente. Las mejores acciones ambientales sociales o de gobierno corporativo no son sinónimo de una estrategia exitosa.
El éxito de una estrategia de sostenibilidad está en articular las prioridades del negocio y su visión a largo plazo, con las acciones sostenibles y comunicar de manera asertiva con los actores adecuados no sólo el resultado, sino también el proceso. Esta articulación se logra no solo comunicando y aplicando acciones en una sola dirección, es algo que debe ser bilateral y recurrente.
Según HBR, el 85% de los empleados dicen que se sienten más motivados cuando se les mantiene actualizados sobre noticias e información corporativa. El 72% de los empleados no comprende las estrategias comerciales de su organización. Muchos empleados no comprenden sus objetivos ni cómo se vinculan con los objetivos de la organización. Menos del 6% de las organizaciones comunican sus objetivos a los empleados a diario.
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Según The Economist Intelligence Unit, la comunicación deficiente puede afectar el desempeño de una compañía logrando:
Por lo tanto, la comunicación es la columna vertebral del éxito de una estrategia de sostenibilidad ya que es la base fundamental para lograr esa articulación entre las acciones ambientales, sociales y de gobernanza, con las prioridades del negocio.
Los líderes de sostenibilidad en las empresas, en vez de estar aislados y siendo percibidos como un cargo operativo, es necesario que asuman ese rol de articulador, de “10 en el fútbol”, para estar entendiendo el juego (mercado) de forma permanente, comunicando avances, riesgos y oportunidades, para que el negocio evolucione de manera rentable y sostenible.