El 2020 Un Auténtico Cisne Negro
La historia del Cisne negro, es bastante interesante y peculiar. La misma proviene de las ciencias sociales, más específicamente del campo Epistemológico.
Todo inició cuando el navegante holandés Willem de Vlamingh en el siglo XVIII, visualizó cisnes negros en Australia desarticulando la asociación del color blanco como exclusivo de dicho animal. Este descubrimiento, rompió el paradigma de aquel momento y evidenció los problemas de la teoría inductivista como método de avance científico, al demostrar que la generalización no es una verdad absoluta, sino que solamente hay que ser pacientes hasta que un evento inesperado cambie nuestra forma de pensar, nuestro comportamiento y desafié al máximo nuestro instinto de adaptación.
Nassim Nicholas hizo de este concepto " Cisne negro" una verdadera explotación de la idea; y por lo tanto, no estaría tan sorprendido como el promedio de nosotros ante la ocurrencia de una pandemia. Evento con un porcentaje de probabilidad altamente bajo y cuyo impacto tiene paralizado al mundo entero, generando un nivel de incertidumbre de cómo y cuándo terminará. Muchos estiman diferentes hipótesis, incluyendo a los más arriesgados que apuestan al fin del capitalismo y la globalización tal como la conocemos. La realidad, es que el futuro al igual que el clima siguen siendo elementos que escapan al avance tecnológico actual.
Siendo Argentino y Economista, me preocupa el impacto sobre la Economía Real de nuestro país, y esperemos que el grado de ocupación a nivel sanitario sea el mismo que a nivel económico. La lógica detrás mi argumento es sencillo, aunque su resolución, por demás compleja: Una economía sin producción no genera ingresos, la falta de los mismos, solamente se puede compensar con deuda, y los caminos de la deuda Argentina están lejos de ser cisnes negros, es más cercano a un trayecto uni-direccional que nos conduce a un aumento de la pobreza y la desigualdad.