El aeropuerto de Barcelona marca récord en el 2018 pero multiplica sus desafíos. Cierra el 2018 con más de 50 millones de viajeros.
El 2018 ha cerrado con un nuevo récord de pasajeros en el aeropuerto de Barcelona-El Prat. A falta de conocerse las cifras oficiales, todo apunta a que la instalación cerró rozando o superando los 50 millones de usuarios, una cifra redonda para un aeropuerto que hace solo una década lograba 30 millones de viajeros.
Ni las previsiones más optimistas de Aena hace ahora 20 años preveían que el principal aeropuerto catalán creciese al ritmo que lo ha hecho en la última década.
El Prat es el séptimo aeropuerto más importante de Europa en pasajeros, pese a que solo un 7% de sus usuarios hacen conexión en la instalación (en Londres-Heatrow, la líder, son el 34%; en Fráncfort son el 55% y en Madrid son el 36%)
Los deberes
Los buenos números del 2018 no esconden una realidad: el aeropuerto cuenta con varios retos a los que deberá hacer frente.
El más urgente, el de la puntualidad: según datos de la Cambra de Comerç de Barcelona, hasta octubre, Barcelona ocupaba el puesto 44 en número de salidas en 1.200 grandes aeropuertos del mundo analizados por la firma de análisis OAG. En cambio, su posición en el ránking de puntualidad media era la 1.009.
El Prat, además, se acerca ya a los 55 millones de pasajeros, que son los marcados como límite teórico para el funcionamiento óptimo de la instalación con la configuración actual.
El plan director 2017-2026 de Fomento para la instalación prevé la construcción de la terminal satélite de la T-1 antes del 2026, con la que se llegarían a 70 millones de usuarios