El alma de tu marca personal
Al preparar el número de noviembre de la revista Emprendedores nos planteamos si tendría sentido hablar en profundidad sobre marca personal del emprendedor. Los americanos llaman a este tipo de aptitudes, las soft skills (o habilidades blandas). La duda razonable era si en esta cuestión de la marca personal hay ‘ciencia’ suficiente... si no era demasiado soft.
Nos ha quedado claro que es un universo que merece mucho la pena explorar. Es otra de esas cosas muy importantes a tener en cuenta y que no se pueden medir: es la suma de prestigio y proyección, dos elementos subjetivos, pero que se pueden (y se deben) gestionar.
Rompamos pues, dicho sea de paso, una lanza a favor de los valores intangibles. Estamos en un mundo cada vez más dominado por el dato. Las métricas nos dan una referencia valiosísima en la empresa, imposible negarlo. Pero hay otros elementos también críticos: la confianza, la seguridad, la emoción o el compromiso (que ahora se llama engagement) son igualmente esenciales en todo tipo de proyectos. Son el cemento que sostiene en pie el largo plazo.
Por eso nos ha gustado tanto escribir sobre marca personal. Pilar Alcazar ha realizado una investigación preguntando a los mejores en este terrero, capitaneados por Kike Sarasola (fundador de Room Mate Group) y verdadero referente en este terreno. El resultado es una buena serie de técnicas: uso de redes, generación de eslóganes o la definición de targets a los que debes dirigirte.
Todas las técnicas que recogemos en el artículo son muy útiles. Estoy seguro. Además de las herramientas, hemos encontrado también los principios y valores de la marca personal del emprendedor. Son mucho más potentes aún para hacernos reflexionar.
Si hay un mensaje común en todos los emprendedores y expertos que nos han ayudado es que es imprescindible ser auténtico. La magia de la marca personal bien construida es que debes basarla en tu ‘yo’ auténtico. Ser tú mismo y serlo de modo consistente. Naturalmente, puedes evolucionar, pero es fundamental que tu misión y valores sigan estables. Por cierto, exactamente lo mismo que ocurre con las marcas de las empresas.
No pasemos por alto la obviedad de que la marca personal proyecta a personas. Todas las herramientas (blogs, libros, redes sociales, etc) están al servicio de un ser humano.
La verdadera prueba del nueve es el cara a cara. Por mucho que avance el ámbito digital, la relación personal nunca dejará de tener un valor esencial.
Para ganar en consistencia, parece necesario crear primero una marca personal en nuestro entorno real. A partir de ahí, empezar a explotarla fuera.
Socio Fundador Grupo Abrasador
6 añosMe ha encantado esta reflexión Alejandro!!