El capital humano y cómo gestionarlo

Si hay algo que siempre me ha llamado la atención dentro del mundo empresarial, es la manera de como son gestionadas las compañías, desde simples pymes a multinacionales.

Es interesante ver como se comportan, actúan y reaccionan sus directivos, y como reaccionan sus empleados.

Podríamos añadir muchos más factores, pero me centraré en el capital humano y sus gestores.

Si hay algo que hace a una empresa especial, es su capital humano. Difícil es tener un equipo unido con la misma visión y misión compartida por todas las áreas del negocio, más cuando se tratan de empresas multinacionales, pero no es imposible.

Para ello se necesitan lideres que sepan gestionar equipos emocionalmente equilibrados y fuertemente comprometidos con estos ideales.

Liderar...

Ardua tarea capaz de llevar a lo más alto a una compañía. Los directivos de hoy día, cumplen un papel fundamental, siendo capaces de intuir nuevos modelos de negocio, compañías que tienden a estructuras cada vez más horizontales.

Pero ¿cómo se lidera? Os transmito lo que nos explicaba el fundador y presidente del Instituto de Práctica empresarial IPE - Marcial Bellido sobre el año 2006.

Existen tres pasos que debe seguir el gestor.

Primer paso:

Pensar, los buenos gestores imaginan el futuro y reconocen los cambios que en nuestro entorno se producen. Su pensamiento estratégico les sitúa y los prepara para escenarios nuevos, adelantándose a sus competidores. Son capaces de anticiparse a los problemas y de admitir que las cosas pueden hacerse de un modo diferente. 

Segundo paso:

Decidir. Hacerlo supone establecer objetivos, plantear las estrategias para conseguirlos y disponer los medios necesarios para alcanzarlos. Significa tomar partido, aceptando los riesgos derivados de la decisión adoptada y, por tanto, estar preparado para digerir, en soledad, el fracaso.  

Tercer paso:

Actúar. Lo hace asumiendo plenamente sus decisiones, acometiéndolas a pesar de los rechazos y reacciones que todo proceso de cambio provoca. En cualquier caso las comunica, haciendo a todos participes tanto del destino como del papel que cada uno de ellos ha de jugar para alcanzarlo. Por último las implementa poniendo a toda la organización a caminar.  

En definitiva, tanto directivos como empleados deben de estar bien alineados con el rumbo que va marcando la compañía con el fin de lograr el éxito común.

“El talento gana juegos, pero el trabajo en equipo y la inteligencia ganan campeonatos”. “Mi filosofía del triunfo” de Michael Jordan