El “colaborador” a disgusto
¿Te sentís así en tu trabajo? ¿Crees que convivís con un colaborador a disgusto? ¿Colaboras con él/ella o necesitas liderarlo? El artículo te asistirá a generar comprensión de la situación y esbozará una estrategia de gestión y auto-gestión. Tiempo de lectura: < 10 minutos.
Esta semana, en el encuentro de “Gestión de Personas” del Programa “El Futuro del Trabajo” surgieron varios aportes que daban cuenta de ciertos colaboradores que vivían enojados en sus roles y con la organización toda. Me contaban que suelen estar disconformes con sus tareas, que no llegan a los resultados y, que esto, los deja en una situación de tensión constante consigo mismos y con los demás. Una caracterización, que escuché en ese encuentro, los describía habitando el espacio de la organización “porque no les queda otra”. Así que decidí escribir este artículo, en primera instancia para ellos, los colaboradores a disgusto, y, finalmente, para los líderes que deban gestionarlos.
"Cuando hay disconformidad en el trabajo, está acompañada de una crisis de sentido. Hemos dejado de encontrar valor en esa actividad o el valor que obtenemos de ella ya no nos conforma."
Una estrategia o abordaje con la que solemos trabajar estas situaciones de las organizaciones es con la teoría de percepción de sentido de Víktor Frankl. Cuando trabajo con mis alumnos sobre que es el sentido, nos divertimos desentrañando la polisemia o las metáforas que hay detrás del término. Sentido puede ser una dirección, “lo que ha quedado” luego de sentir -una emoción- o una lógica o coherencia (“no entiendo el sentido de lo que dices”). Cuando le encontramos el sentido al trabajo es que hemos hallado valor en él. Y esto se nota en nuestra actitud y nuestra emocionalidad. Y si el término valor te genera duda de cómo está utilizado, me explico: cuando hablamos de valores estamos hablando de que una cosa o idea, una actividad, una persona o un ámbito nos provee de algo valioso que guía nuestro comportamiento para proveernos de ellas. Estamos acostumbrados a creer que valor sólo es dinero o “Los Valores” son los valores éticos/morales (como la justicia, la honestidad, la sinceridad y la solidaridad). Podemos encontrar muchos más valores que estos y aquellos que hemos de perseguir, dependen de nuestro desarrollo y necesidades. Por ejemplo: si encuentras valor en el dinero, está bien, es lo que hoy necesitas para vivir una vida con sentido. Hoy… puede que mañana no sea suficiente y podrás encontrar sentido en otros valores.
Volviendo a la disconformidad en el trabajo, podremos esgrimir ahora, que cuando ocurre, está acompañada de una crisis de sentido. Hemos dejado de encontrar valor en esa actividad o el valor que obtenemos de ella ya no nos conforma.
Un “colaborador a disgusto”, probablemente se encuentre en esta situación. Puede considerar que la remuneración no le aporta el valor monetario para sostener su vida o que la forma de relacionamiento en su sector le parece anacrónica o que la cultura de la empresa no cuadra con sus valores personales. Puede pasar, de hecho, sucede todo el tiempo…
Ahora, encontrarle el sentido al trabajo no es algo que podamos tercerizar, debemos hacernos cargo de ello en primera persona. Encontrarnos a disgusto nos muestra, de manera poderosa, que un valor se ha deteriorado o que está emergiendo la posibilidad de desarrollar uno nuevo. Podemos tolerar, y aguantar la situación o transformarla como deseemos. Decir “no me queda otra” es solo una expresión de que no estamos viendo otras posibilidades y que nos estamos resignando a vivir una vida laboral sin sentido ¿Existirán otras posibilidades? Claro que sí, pero como decía al comenzar este párrafo, las posibilidades que funcionen, te funcionarán a tí y, lo más importante, surgirán de ti. Yo no puedo decirte que da sentido a tu vida, debes descubrirlo tú. A pesar de ello, te dejo unas ideas a modo de ejemplo:
Puedes aceptar lo que sucede en el trabajo, a sabiendas de que paga las cuentas, y buscar sentido en otros ámbitos.
Cuando digo aceptar, hablo de una disposición que incluya a todo tu ser: que tu cuerpo y tu emocionalidad sean coherentes con esa aceptación.
Me he relacionado con una pareja de almaceneros que apenas ganaban para pagar las cuentas, pero que se sentían plenos y felices al dedicar su tiempo extra al servicio comunitario. Trabajaban, donde trabajaban, para poder llevar adelante su comedor comunitario.
Puedes buscar trabajo en otros ámbitos que te provean de sentido.
Una ceguera que tiene el humano moderno es que ve instantáneas de su vivir. Dice: “no me queda otra” como si las situaciones de su vida no se modificarán o pudieran modificarse en el futuro. Me gustaría decirte que, quizás, “no te queda otra” HOY, pero puedes empezar a construirte un mañana donde si tengas posibilidades distintas. Quedarte donde no tiene sentido es una elección, nadie te obligó a estar en ese trabajo, nadie te obliga a que te quedes. Hemos visto que diseñar un cambio de entorno laboral ha provisto de mucho sentido a ciertos colaboradores, con lo que la tarea se terminó realizando adecuadamente hasta el momento del cambio.
En esta opción, me gustaría alertarte a que detectes minuciosamente cual es la crisis de sentido, ya que si es estructural respecto al trabajo (percibes valor en el socialismo) o radica en tu forma de ser (estas teniendo una forma particular de relacionarte con los demás), el cambiar de trabajo será garantía de repetir la misma crisis de sentido en un nuevo ámbito.
Transforma tu tarea en un arte
Utilizando la metáfora de Amy Wrzesniewski, puedes encontrar sentido en realizar tu tarea como nadie más la hace o la hizo, puedes llevar tu hacer al nivel de maestría y, lo que obtengas, al de artesanía. Recorrer ese camino te conecta con tu capacidad personal y con los receptores finales de tu hacer (el cliente, la gente). De la misma manera, puedes detectar que necesitas aprender para realizar tu tarea sin esfuerzo, ni estrés. El aprendizaje nos conecta con la vida, me gusta decir. Puedes abrirte a conversar con tus líderes para que te asistan en ese aprendizaje que te está faltando. Vivir el trabajo como quieres, es tu decisión.
"Vivir el trabajo como quieres,
es tu decisión."
Si eres líder, ojalá hayas encontrado valor en este texto y te permita comprender que sucede cuando un colaborador trabaja a disgusto. Creemos que lo esbozado aquí, puede facilitarte tu trabajo con él. Ahora que sabes esto, podrás generar espacios de conversación para que tu “colaborador a disgusto” exprese el valor, o la falta de él, que percibe en su trabajo. De la misma manera que con la construcción de sentido, puede que creas que no es tu responsabilidad; ahora, si tomas el compromiso de comprender lo que sucede y te pones al servicio del colaborador, te garantizo que lograrás resultados asombrosos y extra-ordinarios. Muchos líderes han mejorado su status y reconocimiento en la compañía, gracias a facilitar estos procesos de: reversión de detractores, cambio a sectores donde aumenta su performance o, inclusive, out-sourcing (deje la compañía) con mínimos costes para la organización. Para ganar soltura en este hacer, debes entrenar tu impecabilidad conversacional.