El coronavirus es al humano, lo que el humano es al planeta.

Escribo el siguiente artículo, a título y opinión personal.

Actualmente estamos viviendo uno de los episodios más reflexivos e importantes de nuestra historia, en dónde, un microorganismo nos está dando una de las lecciones más difíciles que podamos tener como seres humanos. La pregunta es entonces, ¿Qué debemos de aprender de la actual pandemia?, ¿Qué que debemos de reflexionar con la llegada al mundo de este diminuto virus? y es aquí en donde quisiera hacer una primera analogía para tratar de explicar mi punto de vista. Si consideramos al planeta como un ser viviente, que respira, que se mueve, que su sangre corre a través de sus ríos y sus pulmones son los bosques y parques, el ser humano podría ser su coronavirus y no solamente en contra del planeta, sino también de muchos otros seres humanos. Continuo con la analogía, desde mi punto de vista personal, en el planeta existimos dos clases de humanos, los que podríamos considerarnos cómo células benignas y los que debemos de considerar como un “virus” en general, los cuales son aquellos que realmente están descontrolados, fuera de orden y sobre todo, que no les importa el impacto negativo de sus actos, porque además, los ve lejanos.

A esos “Virus humanos” no les importa la contaminación del aire, del agua, la deforestación, el consumo irresponsable bajo el modelo de “úsese y tírese”, en fin, son los virus que pueden ir por la vida, destrozando todo lo que se les presenta en su camino.

Si ante el coronavirus, se está desarrollando alguna vacuna en su contra, deberíamos de empezar a pensar en una vacuna en contra del “Virus humano” que sigue presente en nuestra sociedad.

Como siempre, existe una gran incertidumbre que genera lo desconocido y también cientos de especulaciones al respecto del origen del coronavirus y de su intención, que van inclusive entrelazadas con temas del petróleo y de un nuevo orden mundial, pero lo que es real, es que existe y hay casos en todos los ámbitos políticos, sociales, económicos, financieros, deportivos, educativos, etc. y ese es el mismo futuro que nos espera, sino hacemos algo con ese “Virus humano” y ponemos un alto a la destrucción que provoca todos los días en el planeta.

Para mí, lo que debemos de aprender de esta pandemia, es que es momento de renovar nuestra energía en favor del medio ambiente, en tratar de hacer cambios significativos porque hoy no podemos salir de casa dadas las circunstancia de un posible contagio, pero en el futuro, probablemente no podamos consumir agua como lo hacemos ahora por su escasez, o no podemos comer muchos alimentos, porque están contaminados, los del mar por los plásticos que arrojan los Virus humanos, y los de tierra, porque han sido regados con pesticidas, también por los Virus humanos. Muy probablemente no podamos salir a la calle, por la alta contaminación del aire o por la alta radiación, en fin, lo que hoy estamos viviendo, puede ser el futuro y ese debería ser el mayor aprendizaje que podemos tener.

Somos más las células benignas, no debemos de dejar que los Virus humanos sigan destruyendo el único planeta que tenemos para vivir, sin un mundo, no hay historias que contar, no hay nada. Somos mucho más y es nuestra responsabilidad

#darlabatalla