El juicio entre EGEDA CHILE y VTR deberá ser resuelto por la Corte Suprema de Justicia.
El martes 10 de julio, fue publicado en El Mercurio, un artículo en el que se informa del juicio entre EGEDA CHILE (Entidad de Gestión Colectiva de Derechos de los Productores Audiovisuales de Chile) y VTR.
La demanda presentada por EGEDA CHILE a fines del 2013, se encuentra en su etapa final, ya que la Corte Suprema, deberá pronunciarse en los próximos meses, poniendo fin al conflicto que mantiene enfrentados a mas de 3900 productores audiovisuales (chilenos y extranjeros) representados por EGEDA CHILE con VTR.
EGEDA CHILE como gestor colectivo de derechos, reclama a VTR el pago de los derechos de comunicación pública en su modalidad de retransmisión, por las obras audiovisuales presentes en las señales de los canales abiertos chilenos y que este cableoperador entrega a sus abonados, sin haber sido autorizado por los titulares del contenido presente en dichas señales.
A diferencia de lo que ocurre en Chile, donde las empresas de cable sistemáticamente se han negado a pagar la retransmisión, en países como Perú, Colombia, Ecuador o República Dominicana, los productores audiovisuales ya han obtenido el reconocimiento y pago de este derecho, incluso por parte de empresas de cable que también operan en Chile, como Telefónica o Claro.
En Europa, Liberty Global, que es la empresa controladora de VTR, a través de sus operaciones de cable, si paga por la retransmisión de contenidos a varias entidades de gestión de derecho derecho equivalentes a EGEDA CHILE, mientras que en nuestro país se niegan a hacerlo.
La fuente del derecho reclamado por EGEDA CHILE se encuentra principalmente en el Convenio de Berna, que ha sido ratificado por Chile. Este convenio, no solo es la base en la que se funda la Ley de Propiedad Intelectual chilena, sino la de prácticamente todas las legislaciones sobre derecho de autor a nivel global.
La recaudación del derecho reclamado por EGEDA CHILE, no solo tiene como objetivo el reparto entre sus productores asociados, ya que también parte de estos recursos podrían destinarse al desarrollo de actividades e iniciativas importantes para al sector audiovisual chileno, como son la academia de cine, la participación en premios vinculados al audiovisual, organización de seminarios, o la promoción el cine chileno.
Como vemos, mientras no se logre el que empresas como VTR y las demás cable operadoras paguen por las retransmisión que ellas hacen, de las obras audiovisuales presentes en las señales de los canales abiertos chilenos, no solo se perjudica a los titulares de estos contenidos, sino también a todo el sector audiovisual.