EL LADO BUENO DEL co2
El dióxido de carbono es considerado como el gran lobo malo entre los gases de efecto invernadero, precursor del cambio climático y el recalentamiento terrestre. ¿Y si se utilizara para producir energía y mitigar así su impacto negativo? Hay varios estudios que confirman.
Sí, se puede crear combustible a partir del dióxido de carbono (CO2). Este proceso se basa en la transformación del CO2 en combustibles líquidos o gaseosos utilizando diversas tecnologías. Aquí están algunas de las maneras en que esto se puede lograr:
Estos métodos están en diferentes etapas de desarrollo y escalabilidad. La eficiencia, el costo y la viabilidad a largo plazo son retos clave que se están abordando a través de la investigación y el desarrollo continuos. Además, la captura y utilización de CO2 como fuente de combustible también puede ayudar a mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero, contribuyendo así a los esfuerzos contra el cambio climático.