El Mundo sin redes sociales

Lo sucedido el pasado lunes 04 de Octubre con la caída de las redes sociales podría pasar a la historia como solo un mal momento, que causo molestias a los millones de usuarios afectados, pero me parece que debemos ver más allá y realizar varias reflexiones en torno a este tema.  

Para ponerlo en perspectiva, Según la firma Statista, México registró en 2020 unos 80.9 millones de usuarios de WhatsApp y se espera que para 2026 sean alrededor de 97.2 millones de usuarios, en consecuencia, el apagón afectó a más de 80 millones de mexicanos (de un total de 128 millones) que se quedaron incomunicados virtualmente.

En esta reflexión, lo primero que me queda claro es que somos frágiles. Nuestra vida es tan dependiente a las redes que un suceso como este puede impactar en todo lo que hacemos, desde que nos levantamos, nuestras rutinas, la vida escolar, las relaciones personales e incluso las dinámicas económicas y de negocios.

Para todos fue evidente la desesperación que vivieron la mayoría de las personas al no poderse comunicar de forma habitual a través de las plataformas virtuales como Facebook, Instagram y Whatsapp por más de seis horas.

Y como era de esperarse esto dio pie a cientos de teorías de conspiración, algunos aseguraban que todo estaba relacionado con el tema de los Pandora Papers, otros, acusaron a Anonymous y otros más a una red de hackers mundiales.

La realidad, según las fuentes oficiales de la misma compañía, es que la falla se debió a a que hubo problemas durante un cambio de configuración de sus sistemas, eso afectó las herramientas y sistemas internos de la empresa, lo que complicó los intentos de resolver el problema.

Otro de los temas que es importante tener en cuenta es que diversos expertos estiman que más de 1.5 mil millones de personas pudieron haber sufrido hackeos de sus nombres y datos, pues expertos en robos pudieron aprovecharse de la situación, todo esto sin contar las afectaciones económicas que a decir de algunas plataformas como Netblocks, provocaron un “boquete” en la economía mundial de más de mil millones de dólares .

Pero una de las reflexiones que considero más importantes para los emprendedores, específicamente para los emprendedores millennials, para quienes es de lo más normal tener contacto con sus proveedores y clientes por medio de estas plataformas, creo que con esta situación se entendió el riego que tenemos de depender de una sola vía de comunicación y además de la necesidad de contar con una base de datos de contactos, usuarios o clientes en varios medios de almacenamiento.

En este mismo sentido, la falla en redes sociales fue un momento crítico para un sector laboral que en los últimos años ha crecido exponencialmente, los “community manager” que se encontraron literalmente sin trabajo y prácticamente con un día perdido.

Las redes sociales regresaron a su funcionamiento habitual, a nosotros se nos pasó la desesperación y lo importante será las enseñanzas que tomemos de esto.

El mundo virtual ha cobrado gran relevancia en nuestra vida diaria, pero de nosotros es la decisión de que tan dependientes de ellas nos volvemos.

Rodrigo Ruiz Ballesteros