El País. El enigma sin resolver de lo que nos hace humanos
Leyendo los textos de Rousseau o de Aristóteles, me hago la pregunta, ¿eran inteligentes?
La filosofía existencial es un laberinto apasionante y la mecánica cuántica, un campo infinito sin explorar. Me inclino a pensar que, somos una consciencia inconmensurable, donde solo tenemos acceso a una minúscula parte y en ese pedacito, percibimos cosmos y todo lo que nos rodea. Con esa ignorancia nos permitimos afirmar, que por ser hombres y poseer un lenguaje, somos superiores ¡qué ingenuidad!