El posible cierre de Ence plantea un escenario hostil para las inversiones y para el futuro de miles de personas en el rural gallego

La cadena de valor de la madera, de la que forma parte el Cluster da Madeira e o Deseño de Galicia, coincide en manifestar su gran preocupación por el daño ya causado con la incertidumbre que la actual situación ha generado en miles de familias y profesionales del sector, así como la retracción de las inversiones que ya estaban previstas en el sector, tanto por parte de la compañía como por la red asociada a su actividad. Existe una gran angustia por parte de las familias y profesionales del sector que ven en riesgo su sustento, así como el pago de las inversiones, tanto realizadas como previstas.

Por otra parte, no se entiende la incongruencia por parte de algunos partidos políticos que defienden el cierre en Pontevedra-ya que un traslado no es posible, tal y como confirman informes de expertos independientes- y, en cambio, se oponen al cierre de Alcoa y Meirama, sin tener en cuenta la gran importancia de Ence para el sector forestal y el haber demostrado, sobradamente, cumplir de forma holgada con todas las exigentes normas ambientales, hasta el punto que las Cofradías de Pescadores de Pontevedra apoyan la prórroga de Ence.

El cierre de Ence supondría la pérdida de 5.100 empleos en Galicia; más de 2.000 en el sector forestal, que contribuyen a fijar población en el rural. Además, su marcha significaría la pérdida de 90 millones de euros, distribuidos en la cadena de valor forestal: propietarios forestales, empresas de selvicultura, aprovechamiento forestal, rematantes, transportistas, viveros... Esta cifra se hubiera visto notablemente aumentada, si el Gobierno no hubiera afectado, con su decisión, al desarrollo, en Pontevedra, del Plan Estratégico anunciado por Ence a principios de año.

De llegarse a producir el cierre de Ence, el sector forestal se encontrará en una situación demoledora, al haber pedido uno de sus ejes tractores, lo que llevaría al incremento del abandono del monte y, consecuentemente, al incremento de incendios e impactando, muy negativamente, en el mercado de la madera.