El próximo nivel: el derecho a la inaccesibilidad

Desde hace casi 10 años trabajo desde a casa, siempre con el objetivo de mantener la flexibilidad para estar disponible para la familia cuando se me necesite y poder desarrollar mis distintos intereses profesionales, gestionando mi tiempo y creatividad de forma libre. Un privilegio. Pero también te compromete a estar siempre cerca tu trabajo y siempre disponible, desconectar completamente se convierte en un reto. 

En un contexto más amplio, ahora, el tiempo tiene un significado en nuestra sociedad actual, como nunca lo ha tenido en ninguna otra sociedad en el pasado. 

Parece que cuanto más podemos moldear nuestras propias vidas, más nos hacemos la pregunta, ¿cómo utilizo mi tiempo aprovechandolo al máximo? 

Aquí en Europa queremos vivir la mejor vida posible pero vivir la vida perfecta te pone mucha presión y a menudo lleva a que las personas no sólo no tengan tiempo, si no que están lejos de ser felices, lo cual no debería ser así dadas sus circunstancias materiales.

Si analizamos bien el mundo laboral actual nos damos cuenta que estamos experimentando una situación muy paradoja. Por un lado, mucha gente joven quiere trabajar menos porque quieren tener más tiempo para otras cosas. Por otro lado, el mundo laboral actual que se caracteriza por una velocidad y exigencia tremenda que antes ni siquiera existía. Antes, después de trabajar sus 8 horas los trabajadores ya no eran alcanzables para los jefes o clientes. Ahora vemos que, este día laboral estático de 9 a 5 se convierte en horario flexible y se está desintegrando a través de las modernas tecnologías digitales, que requiere que los trabajadores estén disponibles en todo momento. 

Estos dos mundos significan un gran contraste, un gran choque, que requiere un reajuste, ya que con el teletrabajo, el próximo nivel, probablemente irá empeorando esta situación. 

Es para nuestro bien que las horas de trabajo tienen que ser reguladas y que la sociedad aprenda a aceptar que muchas personas no quieren ser alcanzadas en ciertos momentos. Todavía no estamos en este punto que la mayoría lo considere normal que las personas no estén siempre disponible. 

Tal como hemos definido el ocio hasta ahora; las horas después de las cinco de la tarde, cuando nos fuimos a casa, hasta las 8:00h de la mañana siguiente ya no existe. 

Tendremos que definir una nueva forma de ocio, en el que el derecho a la inaccesibilidad también sea ampliamente aceptado y respetado como un derecho real.

Blog de Leonard Glab Frontera