EL SER HUMANO

EL SER HUMANO

1.- EL   SER HUMANO Y SU HÁBITAT

Según la tradición veterotestamentaria, el Hombre (Ser Humano)[1] fue creado a imagen y semejanza de Dios[2], fruto del proyecto divino, punto culminante de su labor creadora. Partiendo de esta premisa, les propongo que nos acerquemos brevemente al entorno donde desarrolla su vida:      

Mundo inorgánico, donde la materia existe en múltiples formas y estados (metales, no metales, gases, líquidos, sólidos), organizada como parte de un sistema armónico y equilibrado. Mundo orgánico, sustentado sobre la base de cuatro elementos fundamentales: Carbono, Hidrógeno, Oxígeno y Nitrógeno, a partir de los cuales se estructuran diversas unidades que componen todos los organismos y la vida misma.

Animales, bosques, ríos, mares…  siempre el agua me hizo pensar, quizás, el llamado del más lejano ancestro, aquel imaginarme el origen… el regreso del hombre al río, al lago, al mar, como si genéticamente hubiéramos heredado su rumor al correr de los siglos… [3]  Todo funciona con tal exactitud y eficiencia que se desarrolla exuberantemente. Resultan interesantes, ideas relacionadas con el agua y la teoría del científico Oparin (1894–1980) sobre el origen de la vida, también sobre las llamadas culturas fluviales que se organizaron y desarrollaron a orilla de ríos y lagos.

Un hábitat ideal que favorece la vida en todas sus posibilidades. Por doquier se siente el espíritu de Dios, gozoso de la plenitud de su obra.  Así era y así es todavía el entorno ecológico que habita el ser humano, un mundo biótico y abiótico con el cual establece íntima relación, mutua influencia que determina características y variaciones específicas.   El sol ha salido, viene elevándose sobre el horizonte, su luz se desliza en silencio, mientras un murmullo despierta y se deja escuchar. Agua, peces, mangles, aves, viento, nubes, todo canta alegremente como los gallos al despertar el día.[4]

2.- LA ECOLOGÍA

El término ecología fue creado en 1869 por el biólogo alemán Ernest Haeckel cercano colaborador de Darwin.  A partir de la visión Darwiniana inventó la palabra.   La ecología, por tanto, es la relación que guardan entre si todos los seres vivos y la relación de todos los seres vivos con el medio no vivo… Por su etimología, el término ecología se relaciona con los de Ecumenismo y Economía:   Todos se derivan de la palabra griega oikos que significa casa.  La economía es el arte de administrar la casa y el ecumenismo es la forma en que los seres que habitan la Tierra se relacionan con Dios...[5] Economía = el derecho a la vida, Ecología = deber de preservar lo creado y Ecumenía = el mundo es una familia donde debe existir paz y justicia entre todos sus habitantes.  Surgen entonces, tres preguntas 1) ¿Tienen todos en la familia lo que necesitan para vivir? 2) ¿Se reconocen los derechos de la naturaleza o, ella, en protesta, morirá, arrastrando la vida del planeta? y 3) ¿Pueden todos los habitantes vivir en un mundo como un lugar plenamente habitable?[6] El SH, el mundo que habita y las relaciones, consigo mismo, el medio y Dios.

3.- EL SER HUMANO Y SUS RELACIONES

El ser humano habita la Tierra y cumple la misión que Dios le ha asignado: reproducción, dominio y cuidado del mundo y de todo lo que en el existe. Y les dio su bendición: tengan muchos hijos, llenen el mundo y gobiérnenlo, dominen los peces, y las aves y todos los animales que se arrastran. A ustedes les doy todas las plantas de la tierra que producen semillas, y todos los árboles que dan fruto. Todo eso les servirá de alimento. [7]

Podemos establecer un primer nivel que se refiere a las relaciones hacia el interior, consigo y su especie. Hombre y mujer en una lógica que ordena y da equilibrio. Se trata de la armonía y el complemento, para cumplir la función de reproducción que asegura la supervivencia, para amarse y ayudarse mutuamente. Para que disfruten del mundo que habitan… Así, el desarrollo de las relaciones en la familia, núcleo primario de la civilización humana y su paulatino devenir de la organización social. Dinámica que genera sus propias regularidades, que responde a características particulares de la especie, en un proceso de adaptación y distribución de las tareas dentro del grupo.

Un segundo nivel se refiere a la dinámica con el entorno en función del cuidado y administración de toda la creación. …lo que evidentemente Dios pretende es el ejercicio de la economía, es decir, del cuidado y la distribución correcta de los bienes al alcance de la mano humana, destinados a la alimentación y al cuidado de todos los seres creados.[8]  

Ayudan en la compresión, aportes de la psicología en cuanto a ente social y dinámica de formación y estructura del carácter y la personalidad. Las influencias positivas o negativas del medio (entiéndase; todo elemento ajeno al individuo), son de gran significado; el ser humano se forma, en el proceso de rechazo o asimilación de estas influencias que varían de un individuo a otro. Se acepta que más del 50 % depende del medio y la herencia. En cuanto a la herencia es importante recordar que trasmite, de una generación a otra, características específicas del genotipo o fenotipo, presentes o como factores potenciales.[9] En lo que se refiere a la dinámica entre estos elementos, se reconoce su gran importancia para todos los seres vivos.[10]

Debemos notar en el sentido estético y el disfrute de lo armónico, la confluencia del clima, y la naturaleza, sobre el carácter y el espíritu. La luz, la sombra, el color, el frío, el calor, las formas, el espacio, el silencio, el sonido: Las garzas regresan en la tarde a dormitar en las márgenes del río; mayitos, bijiritas y tomeguines, revolotean escapando a la vista curiosa.  El Sol se pierde en el horizonte, mientras se desliza una tenue neblina… la brisa, suave arruga la superficie del río y el cielo comienza a perder su brillo… Ahora llueve casi todos los días, sobre todo en las tardes. El cielo se cubre de nubes grises, mientras un aire fresco y húmedo preludia los aguaceros que, empapan la tierra y dejan charcos por doquier. Los rosales florecen, los pastos reverdecen, todo es más alegre y saludable. … En ocasiones, cuando la lluvia se prolonga, siento el contagio de la naturaleza que canta y se renueva. La nostalgia y los recuerdos se llenan de imágenes: Carreras, manos que se unen bajo aleros y portales, […]  los pensamientos crecen, mientras, el tintineo continuo del agua, parece darnos la esperanza de un tiempo que no termina. [11]   

En un sentido trascendente; un orden de relación donde, el ser humano se integra al universo rompiendo barreras y conformando el todo, en una sinfonía de vida que late en la eterna profundidad del espacio. El ser humano, punto culmínate de todo el sistema que habita, superior a los vegetales, peces y animales, en la complejidad de su estructura, anatomía, fisiología y organización; imagen de Dios y su perfección.

3.1.- RELACIÓN DIOS–SER HUMANO

Las religiones orientales hacen un énfasis especial en la naturaleza, en la integración del individuo a la creación, a la vida que permanece en todas las cosas. En la India encontramos el Yoga donde se destacan principios como: prana y   nirvana; formas de relación con un orden superior y cósmico.

En la tradición del A.T., la relación del pueblo de Israel con su Dios toma forma de pactos, símbolos de la soberanía divina; el ser humano se ajusta a los planes del Hacedor. Se establecen principios éticos-morales, para la vida cotidiana que, en definitiva, determinan lo bueno (hermoso) y agradable a Dios. Nexos mediante los cuales el ser humano contacta con Dios y sus semejantes en un fructífero intercambio, en una dinámica multidimensional y eterna, en el topos habitado (oikumene). En la religión, del latín re-ligare, el Ser Humano se relaciona verticalmente con Dios y horizontalmente con los demás seres humanos; de una vivencia individual a un orden comunitario que regresa a Dios.

La dimensión económica: administración, cuidado, uso racional y adecuado de los recursos naturales y humanos en un productivo intercambio medio-ser humano. Se trata de la organización social y sus múltiples variaciones en la acción sobre el mundo vivo y no vivo. 

3.2.- PARA COMPLETAR LA IDEA

Quiero hacer referencia al método de la ecología cultural que el antropólogo norteamericano Steward desarrolla a partir del año 1955, teoría aplicada a los problemas culturales expresada en la articulación entre proceso productivo y habitat.  Steward se formó en Berkeley donde hizo su doctorado en 1931, su obra inicial estuvo dominada por la influencia de Kroeber y de Lowie.

El realiza una relectura de los principios marxistas en el prefacio de su Críticas de la Economía Política.  El creciente interés por las relaciones tecnológicas es el reflejo de un vasto movimiento que se propone dar más fuerza a las credenciales científicas de la antropología cultural en el seno de la prestigiosa y sólidamente fundamentada ciencia natural...  La ecología cultural refuerza la asociación entre las ciencias sociales y las ciencias naturales... Promueve la investigación en colaboración con las ciencias médicas, la biología, el estudio de la nutrición, la demografía y etnografía. [12]

Hoy apenas se escucha el susurro del viento soplando la floresta. Un aire frío cala los arbustos donde se esconden silenciosas las aves del campo.  Los trabajadores de la cantera continúan con su dura faena, horadando la tierra en una franja de la montaña que se hace cada vez más profunda.[13]

La mañana despierta, dos botes de remo se dejan ver en un recodo del río, los pescadores en silenciosa faena, persiguen cardúmenes de pequeñas sardinas... En la profundidad del valle se escucha el alboroto de las aves...  El tren llega, la naturaleza sonríe.[14] 

4.- LOS PROBLEMAS

En el universo, todo funciona armónicamente, cada organismo por pequeño que sea, cumple ciclos y realiza funciones, ocupando un lugar importante en el espacio. La materia en su eterno existir, se transforma continuamente, pasando de un estado a otro o cambiando de forma, con gasto o generación de energía, consecuencia de los procesos físicos o químicos en los que se ve involucrada.  Neutrones, protones y electrones, como en un sistema interplanetario mantienen la unidad atómico-molecular. El diseño es de una perfección casi incomprensible y funciona con espantosa precisión.

Debemos ver al SH, parte importante de este universo, integrado funcional y estructuralmente, con jerarquía sobre el mundo animado e inanimado, animal o vegetal con una responsabilidad extraordinaria; él tiene la posibilidad de actuar conscientemente sobre la realidad; unido no sólo a la naturaleza en todas sus posibilidades sino también a la inteligencia que crea y rige la existencia misma.

Los problemas son resultado de los desajustes en esta perfecta maquinaria, ya sea por accidentes, fallos, o producto de un actuar deliberadamente pecaminoso. Podemos mencionar: los desastres naturales, el desgaste de la capa de ozono, el enfriamiento del sol, asteroides y meteoritos que, en vertiginoso viaje por el universo amenazan la integridad de satélites y planetas, el agotamiento de recursos que no pueden ser renovados, el desequilibrio ecológico, la extinción de especies animales, vegetales, el calentamiento global, etc., etc.

Son problemas vitales: la pobreza y el sub desarrollo, la deficiencia de los sistemas de salud, limitado acceso a servicios básicos y a tecnología, el desempleo, una división injusta de bienes, la corrupción y mala administración de los gobiernos y la falta de propuestas viable para países donde los modelos económicos / políticos fracasan. 

5.- LAS SOLUCIONES

Un método eficaz en la búsqueda de soluciones está en el estudio de las causas y establecer un adecuado orden de prioridad. No se trata sólo de diseñar e implementar proyectos, estos deben ser: oportunos, viables, objetivos, efectivos, eficaces, justos, y participativos.

Sugiero entonces, trabajar en las soluciones, con una lógica centrada en el ser humano, que procura retornar a un estado de armonía con Dios, la creación y el prójimo. Como habitantes del planeta, seamos capaces de comprender nuestra responsabilidad y emprendamos un proceso de transformación y búsqueda que tenga consecuencias positivas para la vida.

Son principios básicos: el amor, el desinterés, la solidaridad, la no injerencia en los asuntos ajenos, la eliminación de sentimientos y actitudes dañinas, como envidia, odio y violencia. Procuremos el desarrollo de valores: sencillez, honradez, lealtad. Seamos capaces de firmar acuerdos de paz con nuestros enemigos, tratados de colaboración con los vecinos. Hagamos de la práctica del amor y el respeto al derecho ajeno una tarea cotidiana. Seamos solidarios y aliviemos la carga que otros tienen que llevar.

Mantengamos una visión global, en la que, sin desdeñar las partes, comprendamos la totalidad y universalidad de las cosas; recordemos la lógica que rige el universo: equilibrio, balanza que permite la equidad en todas las cosas, justicia divina que hace que el sol salga para buenos y malos, que establece los límites de la vida. Recordemos la dialéctica y seamos capaces de superar las contradicciones para alcanzar el desarrollo.  

BIBLIOGRAFÍA

BOFF L. Dimensión política y teológica de la ecología. C. Habana: AP- C. M. Martin Luther King, Jr. 1994.

BETTO FREI   La obra del artista.  C. Habana: Edit. Caminos. 1998.

CEPEDA R. Naturaleza y Fe. C. Habana: DECAP–CIC. 1995

GARRIDO J. D.   Notas de agenda. Matanzas: 1999

HAM REYES A.  Conferencias de antropología y eclesiología. C. Habana: ISEBIT. 1999.

HARRY M.  El desarrollo de la teoría antropológica. (Una historia de las teorías de la cultura) C. De México: Siglo XXI. 1988.

MACVER R. M.  y   PAGE C. H. Sociología.  Madrid: Editorial Tecnos. 1974.

TEIHAR de CHARDIN   El fenómeno humano.  Madrid: Editorial Tecnos, 1974.


NOTAS

[1] Hebreo: ´adam, todo el género humano.

[2] “…imago Dei: hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza, (Gn.1:26). Esto significaría dentro de los proyectos históricos del Dios único, una consulta entre las personas de la Trinidad (desde la especificidad de sus funciones y en la agenda de discusión entraría no solo la creación del hombre, sino también el alcance de sus atributos divinos y sus relaciones y deberes para con todo el inmenso abanico de seres y cosas creadas.”  CEPEDA, R.   Naturaleza y fe.  C Habana: DECAP–CIC, 1995. P. 26

[3] GARRIDO GARCÍA, J. DANIEL.  Fragmentos de manuscritos. Matanzas; 1986.

[4] GARRIDO J. D. Una aventura interesante. (Cuento) Matanzas; 1989.

[5] BOFF L. Dimensión política y teológica de la ecología.  C. Habana: DECAP–CEC.  1994. P 8  

[6] Cepeda R. 1995, p. 53.

[7] Génesis 1: 28–29.

[8] CEPEDA R. Opus citatus.  p. 9

[9] Ejemplo son los factores predisponentes a enfermedades que solo se desarrollan en presencia de condiciones específicas del medio o la conducta.

[10] Sobre esto en: Macver R. M y Page C., 1972. p 74–100

[11] GARRIDO J. D.  Notas de agenda.  Matanzas, (1999).

[12] Harry M.  El Desarrollo de la Teoría Antropológica, 1988, p. 568

[13] Garrido J. D. (1999)

[14] Garrido J. D. (1999)

 

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