EMPRENDEDOR ESPIRITUAL, PROFESIONAL CONSCIENTE

EMPRENDEDOR ESPIRITUAL, PROFESIONAL CONSCIENTE

Paz y Bien

Cuando me he planteado escribir sobre el emprendedor espiritual mi mente ha ido a ver qué hay en internet sobre el tema. Después de las lecturas realmente me ha venido hablar de mí, como emprendedor espiritual.

Teorizar está muy bien, recopilar material inspirador sobre emprendimiento también está muy bien.

Este pararme y conectar para escribir (que es Método P.C.E. que enseño para los escritores en ciernes, en mis mentorías de escritura desde el alma, me he dicho que voy a aplicármelo, jejeje) me ha permitido observarme y ser consciente de mi proceso (tal vez como el tuyo) de emprendimiento.

Hasta este año pasado he estado muy influido por todo el marketing de gurús que te explican su método, plan exitoso para emprender. Éxito lo consideran como resultados que conllevan mucho dinero.

Una anécdota, de cuando empecé a emprender en mi primer proyecto de www.mindfulnessdemujer.com, que quiero contarte es que con mi mentalidad marketingniana me enfoqué en un público objetivo que es quien invierte en esto del desarrollo personal, la mujer.

¿Quién puede y está dispuest@ a pagar mis servicios, mi supuesto expertisse?

Eso fue lo que me movió. Me ha costado muchos años purificar conceptos, fracasar con estrategias hasta hacer desde el ser. Emprender desde el Espíritu, convertirme en un profesional consciente.

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Lo que explico en mi Curso de C.A.E.D. EN LA CUENTA es la importancia de la alineación. 

En uno de los artículos (Qué es ser un Emprendedor Espiritual) que he encontrado indagando en el tema, Marta Puig redunda en la cita que te he compartido más arriba hablando específicamente:

“Eres un Emprendedor Espiritual si en tu empresa eres coherente entre lo que piensas, sientes y haces.”

A esto se le llama poner consciencia o ser consciente. Como profesional está bien poner un poco de consciencia a eso que algunos gurús marketingnianos (que ven negocio en el mundo del emprendimiento y los emprendedores) nos dicen qué hacer, con esos planes mágicos a la par que comprobados/validados.

Uno ha de encontrar su momento (aunque hay algunos dicen que eso es un condicionante más), esto significa que tu emprendimiento necesita un proceso de maduración espiritual. No estoy hablando en términos de juventud y experiencia. Más bien como dice el gran Victor Küppers , es cuestión de #actitud

Y ¿de qué hablo? Lo explica bastante bien Julia Almagro en un artículo (Lo que te define como emprendedora espiritual):

“La clave para denominarte emprendedora espiritual es que el motor que te mueve a emprender venga de lo más hondo de tu ser, que tengas claro cuál es tu ‘por qué’, tu ‘para qué’, y que éste incluya el poner tus dones al servicio de algo más grande, servir a otros, promover la transformación y la alquimia a distintas escalas. Lo importante para una emprendedora espiritual no es el dinero en sí mismo, sino el impacto de su trabajo. (Lo que no quiere decir que no valore la abundancia, sino todo lo contrario. Una emprendedora espiritual vive la abundancia en todas sus dimensiones)”.

Mi experiencia ha sido como un proceso de iluminación. Me he dado cuenta desde mi interior. Si quieres, en Comentarios, puedes explicar tu experiencia.

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Más arriba he comentado que para emprender los entendidos dicen que es necesario e imprescindible un plan. Y ese plan ¿desde dónde se hace?

Yo defiendo que “desde el alma” porque es el espacio donde todo acontece, desde donde tomamos consciencia del cuerpo, mente y emoción.

¿Esto no entra un poco en contradicción con lo que dice Zuckerberg? Creo que no, porque hay un plan divino, (del universo, o llámalo como quieras, ¿más grande?) y un emprendedor espiritual conecta y alinea su plan con ese Plan.

Tu emprendimiento habla de ti, primero, y de la repercusión en los demás, a continuación.

Lo explica Luana Mor en un podcast Los 3 Requisitos para ser una Emprendedora Espiritual Exitosa . Y estoy con ella cuando dice:

“Creo firmemente que si existieran más Emprendedoras Espirituales, haríamos de este mundo, un lugar mejor y por eso que me encaaaaanta ayudarte a que te conviertas en una, que hagas de tu propósito, tu profesión y realmente puedas tener un éxito integral para que así, puedas hacer al MÁXIMO potencial todo el impacto que estás destinada a hacer!”

Aunque hoy no es momento de distinguir o matizar eso de propósito y misión, el tema es clave para alinear nuestro emprendimiento a esa misión a la que te sientes llamado, para dejar tu legado y un mundo mejor.

Concluyo ya, en el artículo que en esta red publiqué sobre el tema del CAPITAL ESPIRITUAL CLAVE DE UN PROFESIONAL DE ÉXITO se hace mención breve a los emprendedores que gestionan su vida y negocio practicando la espiritualidad en la que han nacido y vivido en Norteamérica. Ya sabes que en U.S.A. hacen estudios sobre cualquier cosa y el tema en el "pais de las oportunidades", es clave.

He llegado a reconocer que el emprendimiento es un camino espiritual, o al menos tiene muchas similitudes, vivirlos a la par te hace más consciente de ti como persona y profesional de éxito.

Mi experiencia me dice que no hay que estar pendiente de los resultados a corto plazo, que ya esta bien de las prisas de esta sociedad y de la inmediatez con las que malvivimos.

 Marcelo Berenstein en El emprendedor que reconoce las similitudes entre espiritualidad y emprendimiento… nos aclara esto en lo que quiero poner foco y me gustaría que parases:

“Personalmente, estoy convencido que emprender tiene muchas similitudes con un camino espiritual. Ambos son procesos de autotransformación; te permiten reconocer tus debilidades para trabajar sobre ellas y modificarlas. Espiritualidad y emprendimiento te enseñan en la práctica a reconocer a las dificultades como maestros y nos enseñan que el ego no es sinónimo de autoestima sino un boicoteador consumado que pone en riesgo permanente nuestros avances.
Pero, fundamentalmente, Espiritualidad y Emprendimiento son una gimnasia interior que nos mantienen en estado de alerta constante para estar siempre disponibles para cuando la abundancia comience a fluir. Y esto sucede en un momento preciso que siempre desconocemos; por eso lo esencial es no vivir pendiente del resultado sino concentrado en el proceso.”

Como has visto no he hablado de los emprendedores del sector de la espiritualidad, las terapias, etc.

Estoy hablando de ti y de mí, que empecé a emprender en la última década y que si me siento emprendedor es porque considero lo importante que es la libertad. Y lo que une al emprendimiento y a la espiritualidad es la libertad. Ya sabes lo que dicen: la Verdad (tu verdad) te hará libre.

Esto lo corrobora Gaspar Vera en su artículo Érase una vez un Emprendedor Espiritual que……

Creo que ya he superado lo que escribía recién comenzada la segunda década del siglo XXI en este poema de mi libro ZenObio:

Solicito dar un salto,

Caer al vacío sin más.

¿Quién me ha de dar el permiso?

Pido abrir al mar compuertas,

Ser invadido de cielo.

¿Qué tendría que temer?

Deseo seguir la senda,

Emprender marcha sin fin.

¿Me lo facilitarán?

GRACIAS,

Si quieres que te acompañe a transformarte en un emprendedor espiritual contacta conmigo en privado y hablamos.

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