Emprendedor, pero como adjetivo
Solemos, no sé muy bien porqué, referirnos a los emprendedores como una serie de sujetos jóvenes, suponiéndolos medio mal vestidos, atrevidos, inteligentes, con un Mac y unos auriculares como extensión de su propia presencia terrenal. Solemos identificar el término “emprendedor” cuando vemos a jóvenes milenials labrando un futuro a base de innovación, atrevimiento e informática aplicada.
Tengo la suerte de tener contacto todos los días con personas de diferentes edades, el abanico de posibilidades va desde los 8 años hasta los 65. Imagínese el lector que amplia gama de posibilidades y que pátina más amplia de colores. Bien, muchas personas y muchas edades. Pero, ¿saben que veo emprendeores de todas las edades y de toda condición? ¿Saben que veo emprendedores que nada tienen que ver con la imagen que se nos ha creado?
Me explico; Normalmente se emplea el término emprendedor como sustantivo y no como adjetivo y ahí es donde radica el error. Según la RAE, emprendedor/a es: “Que emprende con resolución acciones innovadoras”…..
Después de leer y releer con atención, lógicamente me quedo estupefacto al descubrir, como ya me temía, que emprendedor puede tener que ver con el mundo empresarial y puede, como es el caso, que nada tenga que ver con este mundo. Es más, según esta definición, tiene algo más que ver con la aventura y con el atrevimiento que con una edad o con una condición social.
Primera pregunta: ¿No será que hemos abusado del término emprendedor sin saber qué diablos significa? ¿Es una moda ser emprendedor?
Yo creo que está muy bien ser emprendedor, se tenga o no se tenga proyecto empresarial. No creo que tenga nada que ver….. Se puede ser emprendedor sin tener empresa y se puede no ser nada emprendedor aunque se tenga entre manos un proyecto empresarial.
Es decir, mejor usemos el término como adjetivo.
Ser emprendedor es una actitud vital, no una condición que se adquiere como un título mobiliario. O se es emprendedor o no se es. Pero lo que es seguro es que esta condición no se adquiere. Es como ser alto, o como ser moreno, o como ser vallisoletano. O se nace con ello o no se nace con ello.
Así que dejemos de usar el término para referirnos a los jóvenes empresarios que deciden establecerse por su cuenta y montar una empresa. Hablemos de emprendedor como cualidad y no como condición.
Y, ya que el director de este periódico me da esta oportunidad, fomentemos el espíritu emprendedor, no dejemos que se duerma en los laureles de la autocomplacencia, y hagámoslo en los colegios, desde la base, para que llegado el momento, el futuro de nuestro entorno este garantizado con empresarios, políticos, trabajadores, funcionarios, estudiantes, amas de casa y jubilados EMPRENDEDORES.
Especialista en Energía Solar Térmica y Eficiencia Energética | Responsable de Ventas en INAA
7 añosOlé