En cuclillas

En cuclillas:

En Oriente es muy común encontrar gente por las calles adoptando esta posición en distintas actividades: cocinando, comiendo, charlando, etc.

Cuando somos niños la adoptamos con frecuencia, resulta muy natural en nosotros y al crecer la dejamos de practicar en Occidente

Sus beneficios:

• Activa nuestro sistema nervioso parasimpático: su función es la de generar un estado de reposo que nos permite ahorrar o recuperar energía, provocando una relajación del cuerpo
• Activa toda la musculatura que mantiene nuestra corrección postural
• Mejora la digestión por lo que ayuda ir al baño con mayor facilidad
• Mejora nuestra postura, el dolor de espalda y cuello

Os recomiendo que la practiquéis unas tres veces al día de 30 segundos a un minuto aproximadamente.

Estar en cuclillas produce la restricción vascular en nuestros miembros inferiores, por lo que la circulación queda más restringida en el abdomen; así que, el volumen de los vasos sanguíneos incrementará.

Aumentará la volemia; es decir la tensión en la pared de los vasos, activando el reflejo baroreceptor que a su vez informa al núcleo del tracto solitario y activa nuestro parasimpático.

Cuando comprimimos el plexo entérico –el que controla el aparato digestivo que nos advierte del hambre y saciedad-, hay un equilibrio de las presiones intersticiales, así que disminuye la ultrafiltración arterial y aumenta el retorno venoso que va a pasar a las vénulas, aumentando la captación del sistema linfático.

Es decir, disminuye la sangre que llega y aumenta el sistema de drenaje. Se activarán una cantidad de citoquinas proinflamatorias del sistema entérico y peritoneal. Cuando limpiamos esta vascularización, esto vuelve a regular la estimulación del vago y del simpático; porque el vago no está hiperactivo por la concentración de citoquinas.

Gracias por tus conocimientos @luisgonzagafisioosteopatia