Encuentren al Genio
En el artículo anterior hablé de un hábito que es muy destructivo en las organizaciones y le di como título “Brilla con luz propia”. Hoy deseo dar continuidad con otra enseñanza que aplico en los procesos de formación en desarrollo organizacional.
Encontrar al “Genio” es la costumbre más nociva y común que se aplica diariamente en las empresas. Al mencionarlo de esta manera parece que me refiriera a encontrar el tipo de persona que puede traer ideas tan maravillosas que nos van a dar solución a problemas o retos que afrontan las organizaciones cotidianamente y que nunca antes a nadie más se le habían ocurrido; pero realmente lo digo de manera sarcástica, este título que es realmente sugestivo se refiere a otro hábito que por años ha sido letal en todas las empresas grandes o pequeñas y que tiene que ver con el comportamiento humano de estarse justificando y culpando a los demás de las fallas o problemas que se pueden presentar.
Es así que podemos ver como muchas personas cuando las cifras y los números van bien son los primeros en salir a mostrar los resultados a la alta gerencia, pero cuando los resultados son negativos, ahora si encuentren al “Genio” para culparlo a él. “¿quién tomó la decisión?, ¿Quién autorizó?, ¿Por culpa de quien se cometió este error en el proceso?”.
Aunque es necesario entender la razón de los problemas y los resultados negativos, la mala práctica está en cómo dejo mi nombre en limpio y daño la imagen del “Genio”. Como encuentro un culpable y lo pongo en el escarnio público muchas veces con mala fe y no nos enfocamos en lo que verdaderamente es importante que es la solución. Debemos recordar siempre que allá afuera hay clientes esperando una respuesta, un producto, una instalación, o una solución; sin embargo lo olvidamos y es más importante dejar mi nombre en limpio antes que solucionar y permitir que el proceso siga avanzando.
Los problemas siempre van a surgir, la invitación que hago es que primero nos enfoquemos en la solución y luego hagamos el informe que nos indicará el lugar, área, política, nivel de empoderamiento o personas, entre otros, que pudieron generar el inconveniente. Luego si se debe analizar qué acciones se deben tomar a futuro para prevenir este tipo de errores evitando que se repitan, ¿Cuál es la base de lecciones aprendidas que realmente van a llevar a mejorar cada día a tu organización? ¿Bastará con el nombre de una persona o un culpable? Mi posición es que debemos actuar con mayor prudencia y no perder el foco buscando culpables, sino dando soluciones oportunas y efectivas en momentos de dificultad.
Fundadora de TeBriLeadership. Speaker. Coach Empresarial certificada, desarrollando líderes a nivel personal y organizacional
4 añosY cómo dice parte de un capítulo de mi libro que se refiere exactamente a cada loco con su tema y cómo influyen las interpretaciones y los juicios de cada quien en base a sus creencias a sus experiencias y a su puntito, que a veces no les permite observar la importancia de solucionar y avanzar a resultados sin tildar sino apoyar en busca de un bien común, mucha veces influye ese líder que guía a ese equipo a alcanzar un resultados pero apoyando a un genio 🧞♂️ que lo que Aporta son quejas que terminan siendo estéril al desarrollo de una organización 😃🌈🌍